La moda que da la talla

TALLAS GRANDES

El número 70 puede asociarse a la edad, a la década de la Transición y la consagración de la minifalda, a los minutos de duración de una película ligera o a los eternos kilómetros que te separan de una escapada de fin de semana. Pero si al decir el número 70 nos estuviéramos refiriendo a una talla, muchos de los grandes diseñadores de treintaycuatros en sus pasarelas se caerían de espaldas. El tener unos kilitos de más se ha convertido en un gran problema -y en algunas ocasiones en un trauma- para muchas personas que tienen que soportar cómo los empleados de las tiendas de moda les miran con caras raras cuando cometen la osadía de pedir la 46.

Pero ir a la moda ha dejado de ser un privilegio de cuerpos esbeltos. Los largos y aburridos blusones para esconder la figura han pasado a la historia y las curvas ofrecen mucho juego para sacarles el mejor partido. La lycra fría o la seda son tejidos ideales para entallar sin que se pegue demasiado, ya que no se puede caer en el error de comprar una prenda demasiado grande para disimular, cuando el efecto será justo el contrario. Tampoco los tejidos demasiado entallados favorecen a los cuerpos más voluminosos, pues dejarían al descubierto justo aquello que se desea camuflar.

Para este otoño volverán los favorecedores colores tierra, marrones, grises, caquis o chocolates; sin descartar el uva, vino o azul petróleo. Mejor de un solo tono que con cortes cromáticos. El color negro no perderá su protagonismo y seguirá siendo el mejor aliado para estilizar la figura. Una falda negra con caída o un traje de este color para los caballeros serán opciones acertadas para una velada distinguida.

En cuanto a los estampados, todo es posible. Desde las actuales flores a las imitaciones de animal, preferiblemente en colores neutros y figuras discretas. Los dibujos grandes y las inscripciones en las camisetas, del mismo modo, resaltan más de lo que nos gustaría esos kilitos de más. Las rayas ofrecen un gran juego si se sabe como escogerlas: horizontales para ensanchar las zonas más menudas y verticales para estilizar. Del mismo modo, todos aquellos estampados que tiendan a la caída, afinarán la silueta.

Los cortes siguen las últimas tendencias, siempre con toques especiales, más favorecedores. Los tirantes tienden a ser más anchos para sujetar mejor el pecho y las mangas recogidas, para cubrir, sobre todo, la parte interior del brazo. Se prefieren los tiros medios con camisetas o blusas por fuera, tanto para señora como para caballero, para no acentuar el área del vientre. Para ocasiones más formales, especialmente en hombres, en las que la camisa deba ir por dentro, no usar cinturón y colocarse el talle a la altura del ombligo, nunca debajo, ya que no se conseguiría más que destacar la tripa.

El pantalón más favorecedor sería un modelo básico, en tonos apagados, de tiro alto, sin bolsillos y ceñido, dibujando las curvas. Los pantalones caídos u holgados no favorecen y se deben evitar los modelos con mucho volumen. Del mismo modo, los excesos -volantes, encajes, terciopelo...- no son buenas alternativas. Esta temporada, además, se llevarán los jerseys largos y anchos, a los que se les puede sacar mucho partido recogidos con un cinturón a la cintura. Y, para las más atrevidas, las minifaldas siempre son una opción divertida y seductora, ideales para lucir piernas sin complejos -siempre, mejor acompañadas de unos pantys-. También los leggins, en tejidos más duros para evitar que se abran y luzcan como medias y las elegantes trasparencias, combinadas con camisetas básicas por debajo.

En Dorothy Perkins, en el centro comercial La Cañada, en Marbella, apuestan por la elegancia, con vestidos que van desde los 30 euros y blusas desde los 20. Un estilo más sport tiene La Luna, en calle Mármoles 41, que van desde la talla 40 a la 70, con jerseys a 8 euros o pantalones a 12. Para caballero, en Plaza Mayor se encuentra la tienda Gran Hombre XXL, donde se pueden encontrar prendas de hasta la talla 12XL, que equivale a más de una 80, y con estilos desde el más atrevido al más clásico, con trajes de calle y ceremonia y un amplio surtido de ropa vaquera, de baño, deportiva, interiores o complementos. También disponen de calzado, desde la talla 45 a la 52 y hasta los probadores son grandes.