Los peñistas denuncian robos y la presencia de 'okupas' en el Real

A tan solo 25 días del comienzo de la Feria, en el Real Cortijo de Torres los peñistas ya trabajan en los preparativos de las casetas tras los robos sucedidos durante los últimos meses. La falta de vigilantes de seguridad a la entrada de las instalaciones del recinto durante al menos ocho meses, ha provocado el robo de cables, puertas metálicas, hierros, escaleras, cocinas, baños, y hasta la presencia de okupas.

Para los peñistas de la caseta Puerta Blanca la broma les sale por alrededor de los 3.500 euros. Un gasto significativo que a Cristóbal le ha supuesto un sabor amargo, ya que incluso se planteó no abrir este año después de realizar las mejoras pertinentes. Además de los robos, Cristóbal asegura que en el hueco de debajo de su escenario, que utilizaban para guardar herramientas y materiales, han dormido okupas: "Hay restos de cigarrillos y hasta un camastro hecho con toldos. Incluso han pelado cables ahí dentro", relata. La peña La Biznaga es otra de las afectadas por los hurtos, y aunque en este caso los gastos no ascienden a más de 800 euros, José recalca que "se han llevado hasta el grifo". Un gasto inesperado que en algunos casos ha sembrado pesimismo a un mes de empezar. De este modo, los peñistas demandan un mínimo de vigilancia y seguridad durante el resto del año para evitar que este tipo de situaciones se vuelva a repetir.

Los robos tuvieron lugar durante todo el invierno, desde octubre hasta mayo, mes en el que volvió a contratarse seguridad en el recinto. Hasta entonces, lo único que restringía el acceso a las instalaciones era una valla metálica. No obstante, los peñistas no se dieron cuenta de los hurtos hasta comenzar con los preparativos para la Feria. Aunque tampoco se trata de una novedad, ya que en los meses de abril y mayo ya algunos denunciaron que se habían producido robos y destrozos en algunas casetas.

Desde la Federación Malagueña de Peñas han querido recordar que "no se deben dejar cosas de valor dentro de las casetas durante el resto del año ya que no hay seguridad". De esta manera, los gastos corren a cuenta de los peñistas, quienes asumen el riesgo y se hacen responsables de sus pérdidas. No obstante, el Ayuntamiento de Málaga ha colaborado a mantener el material municipal, como la madera del exterior de las casetas y la restauración de los baños y las puertas.

Por su parte, Teresa Porras, concejala de Playas y Servicios Operativos, aseguró que se avisó a los peñistas de que "no utilizaran las casetas como almacenes y no dejaran objetos de valor dentro" ya que, por problemas presupuestarios, este año el recinto no contaría con guardas de seguridad durante los ocho meses que van desde septiembre a mayo.

Al mismo tiempo, Manolo Curtido, vicepresidente de la agrupación, propone que el Consistorio ceda las casetas a los peñistas durante todo el año para realizar las actividades pertinentes que crean oportunas en otras épocas fuera de la Feria y, de este modo, poder contar con un "servicio privado de seguridad".

Por otro lado, el alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, aseguró que el Ayuntamiento no organizará ningún tipo de botellón durante los días de Feria y que están estudiando "las mejores soluciones para que exista la mejor oferta respecto a pasarlo bien". "Lo que tenemos es que lanzar el mensaje para que haya el menor consumo del alcohol posible, depender del alcohol para divertirse a mi me parece una mala norma", señaló el regidor.