El Sindicato Médico reclama vigilantes de seguridad y cámaras para acabar con las agresiones

Lejos de descender, las agresiones al personal sanitario, tanto las físicas como las verbales, han crecido más de un 43% en el último año. Según las cifras aportadas por el Sindicato Médico de Málaga (SMM), en 2022 se registraron 268 casos de violencia física, amenazas, intimidación, acoso y humillaciones frente a los 187 de 2021.

Y la tendencia no parece mejorar mucho. En lo que va de año la organización tiene constancia de 11 agresiones sólo a médicos de Málaga y provincia, "varias de ellas por parte de usuarios reincidentes". A estas habrá que sumar las producidas a otros grupos de profesionales sanitarios aún no comunicadas, "lo que demuestra que el plan de prevención frente a las agresiones es un absoluto fracaso". Así lo consideran desde el Sindicato Médico y reclaman el incremento de la seguridad en hospitales y centros de salud.

En 2022 siguió siendo el Hospital Universitario Virgen de la Victoria, el Clínico, el centro donde se registraron más agresiones, con un total de 74 y una veintena más que el año anterior, seguido del Distrito Sanitario Málaga con 69 (28 más que en 2021) y el Hospital Regional con 49 en tercer lugar (cinco más).

"Hay una evolución ascendente en el número de agresiones en 2022 respecto a 2021 tanto en hospitales, áreas de gestión sanitaria como en distritos, y en algunos de forma escandalosa", reiteran desde el Sindicato Médico. "Estos incrementos suponen una variación del 271% en el caso de la Axarquía, el 68.29% en el Distrito Sanitario Málaga, el 50% en Costa del Sol, el 37% en Hospital Universitario Virgen de la Victoria, el 11.36% en Hospital Regional y el 10% en la Serranía. Sólo han descendido en el Área Norte", agregan.

Explican desde la entidad que el año pasado los delegados sindicales se concentraron hasta 20 veces en acto de repulsa frente a estas conductas violentas de pacientes y familiares. Y sostienen que llevan años "reclamando el aumento de las medidas de seguridad", algo que no llega bajo el mismo argumento de la falta de presupuesto.

"Pues ya es hora de que haya presupuesto para la seguridad de los trabajadores del Sistema Sanitario Público Andaluz. Los trabajadores tienen derecho a la protección frente a los riesgos en sus puestos de trabajo, y es la Administración quien tiene el deber de protección de su personal", dicen desde la agrupación sindical.

Medidas de seguridad en los centros de salud y hospitales

También señalan que el actual Plan de Prevención y Atención frente a agresiones a profesionales del Sistema Sanitario Público Andaluz debía implantarse a partir de octubre de 2020 en todos los centros asistenciales del SAS. "Este plan prevé diversas actuaciones encaminadas a la prevención, entre ellas, como medida activa destacamos la figura del vigilante de seguridad, y como medidas pasivas, elementos tales como el pulsador en consulta o timbre antipánico, software antipánico en los ordenadores, sistemas de videocámaras de vigilancia en lugares de trabajo, diseño del puesto de forma que el profesional pueda tener una vía de escape, etcétera", comentan.

Sin embargo, según las comprobaciones del SMM, los vigilantes de seguridad están presentes solamente en un tercio de los centros de salud y consultorios de Málaga, tres en la Axarquía, seis en el Distrito Costa del Sol y un solo vigilante en Antequera. En Guadalhorce o Serranía de Ronda no hay ninguno. Igualmente destacan que hay tres centros que atienden a zonas con necesidad de transformación social sin vigilante, como son Alameda-Perchel, El Cónsul y Carlinda.

En cuanto a las cámaras de videovigilancia, "hay en la mitad de los centros asistenciales de Málaga y Axarquía, 6 en Costa del Sol, un tercio de los centros del Guadalhorce, la sexta parte de los centros de Antequera, y es anecdótico el de Serranía, donde hay sólo un centro con cámara", indican desde el Sindicato Médico. Además, la mayoría de centros sanitario no cuentan con consultas comunicadas.

"La medida fundamental en los centros de Málaga capital es el timbre, con el que cuentan más de la mitad de los centros de la Axarquía, menos de la mitad en Guadalhorce, y prácticamente ausente esta medida en Serranía, Costa del Sol y Antequera", subrayan.

Ante esta auditoría, desde el SMM consideran que las medidas para garantizar la seguridad de los profesionales sanitarios son "deficitarias, con una implantación muy irregular y, en muchos de los centros, absolutamente ausentes, por lo tanto, el plan no se cumple en estas ni en otras medidas".

Encuesta a médicos sobre su seguridad

El Sindicato Médico de Málaga lanzó una encuesta a médicos de Málaga y provincia con una pregunta directa: ¿Cree que trabaja en un entorno seguro? Se recibieron 854 respuestas y tan solo el 8% contestaron que se sienten seguros en sus puestos de trabajo. El 58% percibe inseguridad y el 25% se sienten muy inseguros en su entorno laboral.

Para la organización sindical, se necesita una apuesta real por la prevención de riesgos laborales y en concreto frente a las agresiones. "Urge la implantación de la figura del vigilante de seguridad en todos los centros asistenciales, además de aumentar el sistema de cámaras de vigilancia, hablitar en todas las consultas una vía de escape rápida y eficaz y permitir en el programa Diraya un icono o señal de alarma que sirva como advertencia a los profesionales si el paciente es agresor", explican, entre otras medidas como una memoria económica de inversiones a realizar, formación y la creación de la figura de responsable de Seguridad en hospitales y distritos.