"No pretendo que echen a nadie, lo que quiero es mi plaza de bombero"

Una sentencia del titular del Juzgado de lo Contencioso-Administrativo número 5 de Málaga acaba de darle la razón a Fernando González, el primero de los nueve aspirantes a bombero que han llevado las últimas oposiciones en la capital ante la Justicia. Pasó los últimos cinco años preparándose para las pruebas y ha tenido que esperar casi un año más para que el magistrado obligue al Ayuntamiento a volver a calificar de nuevo la tercera prueba con un reparto idéntico y proporcionado de la puntuación. Lo que deja sin validez los criterios de valoración impuestos por el tribunal opositor y le da la opción de acceder a unas de las 37 plazas que se cubrieron.

-Tras casi un año de reclamaciones, un juez le da la razón, ¿qué sensación le queda?

-La verdad es que todavía no me lo creo, han sido tantos meses de lucha que no llego a asimilarlo.

-¿Cómo se encuentran los demás demandantes con juicios aún pendientes?

-Estamos muy contentos, hemos ganado esta primera batalla que cada uno ha vivido como si fuera propia, puesto que lo de la puntuación nos afecta a todos.

-La sentencia deja claro que una vez corregido el examen, si pasa la nota de corte, le correspondería una plaza. ¿Pasa el corte?

-El tribunal estableció que para aprobar el último examen hacían falta 10 puntos. Con esta nueva puntuación, tendría más de 11 puntos, sin contar la pregunta sobre la botella de oxígeno que el juez también me da como válida; pasaría de sobra el corte.

-Sería una plaza que ha tenido que luchar dos veces, en las oposiciones y en los tribunales.

-Sí, primero me enfrenté a la última prueba de la oposición, pero parece que el último examen ha sido en los tribunales y al parecer he ganado la plaza que me corresponde.

-¿Cómo cree que puede afectar al procedimiento la nueva corrección del ejercicio?

-Se volvería a elaborar una nueva lista de aprobados y los que tengamos que estar dentro, estaremos dentro. Pero aunque yo reclamo lo que es mío, no dejo de empatizar con los que sí consiguieron una plaza. Si yo hubiera aprobado tampoco me gustaría que me quitaran algo que me he ganado.

-¿Llegar hasta los tribunales les ha generado enemistad con los candidatos con plaza?

-Desde un primer momento todo el mundo nos ha apoyado. Pero aquí hay dos partes, los que no tiene por qué preocuparse, porque han sacado su nota y están por arriba de la lista; que son casi todos. Y luego hay cierta gente que prefiere que no removamos más el tema, no sé por qué. Pero ante todo seguimos siendo compañeros.

-Su abogado dijo durante el juicio que el criterio utilizado en la corrección del examen había beneficiado a opositores, cito textualmente, "con una relación de parentesco directo con altas autoridades del Ayuntamiento".

-Eso no me importa demasiado, lo que quiero es mi plaza, que en su momento no me la dieron. No tengo nada en contra de nadie y tampoco pretendo que echen a nadie. Lo que quiero es que entremos los que nos merecemos el puesto.

-Analizando los 37 exámenes aprobados, al menos dos se quedarían fuera de las oposiciones con la nueva clasificación.

-Parece ser que sí, que algunas personas se quedan fuera, porque no obtendrían ese mínimo de puntuación para aprobar.

-El juez le da la razón en cuanto a la falta de transparencia en el procedimiento y dictamina que el tribunal no estaba autorizado para imponer los criterios de valoración una vez realizado el examen.

-El caso es que la oposición iba bien, fue limpia hasta el último examen.

-También le da el juez la razón en una pregunta que ha sido bastante polémica sobre una botella de oxígeno y reconoce que en su corrección hubo "arbitrariedad".

-El tribunal de las oposiciones me decía que yo no justificaba la respuesta, cuando puse la fórmula y estaba completa.

-El Ayuntamiento les ha cerrado la puerta en varias ocasiones, primero en la revisión de la prueba y luego con el recurso de alzada presentado, ¿genera sensación de impotencia?

-Ésta no era la primera oposición a la que me presentaba, realicé otra anteriormente y suspendí, pero siempre he sido consecuente con los errores que he cometido. Pero esta vez no, en este caso tenía mi examen aprobado, tenía mi plaza, pero decidieron jugar sucio.

-¿Cree que el Ayuntamiento recurrirá la sentencia?

-Creo que sí, pero han de ser consecuentes con lo que hacen, tienen muchas cosas en las que pensar. A mí me gustaría que fueran sensatos, que reconocieran su error y que ejecutaran la sentencia.