Las primeras lluvias importantes desde marzo alivian el campo en Málaga, pero "hacen falta muchas más"

Las lluvias de estos últimos días, con acumulados por encima de los 130 litros por metro cuadrado en la provincia, han supuesto un alivio para los agricultores, que ven por fin cómo sus cultivos reciben algo de agua por esta vía, que es también la más caprichosa de todas. Sin embargo, estos aportes, tal y como recuerda el presidente de Asaja Málaga, Baldomero Bellido, son todavía "insuficientes" debido a la "situación de sequía tan extrema" que afecta al territorio. El comienzo no es del todo malo porque han "contribuido a mantener las cosechas" o, en otras palabras, a que no se pierdan cultivos que estaban al límite, que no es poco, pero aún "hacen falta muchas más lluvias" para lograr una solución.

Si hay que poner en la diana a un principal beneficiado, o paliado, este sería el sector olivarero. La recogida comienza a finales de octubre o principios de noviembre y que la aceituna reciba agua unas semanas antes, cuando en su mayoría está arrugada por el estrés hídrico, es de vital importancia para maximizar su rendimiento cuando pasa a ser convertida en aceite en las cooperativas. No ha corrido tanta suerte la aceituna de mesa, que ha empezado a recogerse ya y para la que en no pocos casos es demasiado tarde. Ejemplo de ello es la aceituna aloreña, que ha sufrido una debacle en toda regla con pérdidas que llegan al 90% respecto a años anteriores.

Refrenda esta idea el secretario general de la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA) en Málaga, Francisco Moscoso, que incide en la "mala temporada" que ha tenido la variedad aloreña por la falta de agua, a la par que explica que esta borrasca ha dejado grandes disparidades de litros acumulados en pocas distancias. "En unos sitios han caído 50 litros y a lo mejor pueblo abajo 15". "Las lluvias siempre son bienvenidas para el agricultor, pero debe seguir lloviendo. Necesitamos que sigan dándose acumulados de 70 u 80 litros".

Qué va a ocurrir con la cosecha es todavía una incógnita casi tan grande como qué precio puede tener el aceite de oliva en el futuro. Aunque ahora mismo el coste en los lineales se haya relajado y la tendencia es que siga así, los expertos coinciden es que no veremos precios iguales a los de antes de la crisis de la sequía. Para eso habrá que esperar. Recuerda el director general de DCOOP, Rafael Sánchez de Puerta, que la continua bajada del precio dependerá de lo que finalmente ocurra durante ésta: lo que en el ámbito comercial se llama enlace. "El precio del próximo año va a depender de la pluviometría acumulada éste. La estimación de la cosecha siguiente tiene mucho peso. No es lo mismo terminar con todo el aceite vendido a que a la gente le dé igual quedarse sin él porque la campaña siguiente va a ser buena".

Los pantanos, a poco más del 15% de su capacidad, no notan las lluvias

Si las lluvias no han aliviado todo lo que debían al campo malagueño, menos lo han hecho a los embalses, que apenas han ganado algo más de medio hectómetro cúbico desde el domingo, con un acumulado total de 95,26 y al 15,58% de su capacidad. Lo previsible es que las escorrentías sigan nutriendo los embalses varios días, aunque si no llueve más y en cantidades abundantes lo esperable es que el aumento no sea más que de unas décimas.

Hasta la fecha, como suele, las lluvias han beneficiado especialmente al embalse de La Concepción, donde han caído unos 36 litros por metro cuadrado en las últimas horas que le sirven para mantenerse al 40,32% con 23,20 hectómetros cúbicos. Importantes aportes han tenido también al menos dos de las vías que le insuflan recursos, aunque en un porcentaje no mucho mayor a un 10% en cada caso, como son la presa de Guadalmansa, con 132,8 litros por metro cuadrado; o la de Guadalmina con 92,9. 

En el pantano de La Viñuela las lluvias han dejado hasta el momento 13,4 litros por metro cuadrado de forma directa y se encuentra en estos momentos al 13,62% con un volumen de 22,39 hectómetros cúbicos. Apenas nada ha caído en las reservas estratégicas de Casasola, 11 litros, que se sitúa al 20,53 por ciento con 4,46 hectómetros cúbicos, y en la del Limonero, unos 10 litros, que está al 15,35% con 3,43 hectómetros cúbicos. Marcan los mismos parámetros desde hace semanas: porque sus reservas ni se tocan ni se elevan por las lluvias. 

En Conde de Guadalhorce, la pluviometría acumulada estos días apenas roza los 8 litros por metro cuadrado: su acumulado actual es del 20,63% con 13,72 hectómetros cúbicos en su haber. Ni una solo gota, por contra, ha caído sobre los embalses del Guadalhorce, que se mantiene al 8,02% con 10,08 hectómetros cúblicos; y de Guadalteba, que marca un 11,73% al albergar 17,98 hectómetros cúbicos.