Once años de prisión por perforarle un ojo a un hombre y apuñalar a otro en una discoteca de Málaga
El Supremo confirma la condena a los tres agresores de dos individuos
Una de las víctimas precisó reconstrucción de tejidos oculares y estuvo 12 días hospitalizada
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La Sala de lo Penal del Tribunal Supremo ha confirmado la condena a 11 años de prisión impuesta a cada uno de los tres hombres que apuñalaron a otros dos en una pelea ocurrida a las puertas de una discoteca de Málaga capital, a la que acudieron con motivo de una boda familiar. Una de los implicados sufrió una perforación en el ojo izquierdo. La reyerta se produjo después de que una de las víctimas defendiera a su novia, a la que los condenados habían estado molestando poco antes en el interior del local, situado en la avenida Isaac Peral.
Una indemnización de 30.000 y 75.000 euros para los heridos
El tribunal desestima así el recurso de casación interpuesto por los acusados contra la sentencia de la Audiencia Provincial de Málaga que en marzo de 2020 ya les consideró responsable de dos delitos de lesiones. Además de a la pena de prisión, los tres agresores también fueron condenados al pago de una indemnización de 30.000 y 75.000 euros, respectivamente.
Los hechos probados recogen que los procesados “rodearon y golpearon” a un hombre que había llamado la atención a uno de ellos por molestar a su pareja. Los porteros los expulsaron de la sala. Los autores volvieron a coincidir fuera de la discoteca con la víctima y, “de común acuerdo utilizaron un objeto punzante para agredirle”. Un primo del herido trató de mediar y, al girarse, fue también apuñalado, al tiempo que le golpearon en el ojo izquierdo, mientras los acusados “le perseguían” y lo “amenazaban con matarle”.
"Un perjuicio estético importante"
La agresión le provocó una perforación ocular, además de heridas incisas en un hombro y en la cabeza. El herido de mayor gravedad fue sometido a una intervención quirúrgica y los médicos tuvieron que reconstruirle tejidos oculares. Permaneció 12 días hospitalizado y sufrió un “perjuicio estético importante por alteración facial”. Su primo, también con heridas por arma blanca, estuvo ingresado más de una semana y sufrió “síndrome de estrés postraumático”.
Pero aquel no fue el primer episodio violento que ocurrió a las puertas de una de las discotecas en la avenida Isaac Peral. Ya en otras ocasiones se han registrado peleas multitudinarias y detenciones. Una de las más graves se remonta a mayo del año pasado, cuando un atropello, supuestamente intencionado, acabó con un joven de 23 años fallecido y tres heridos. El conductor del vehículo implicado, que se había dado a la fuga, ingresó en prisión.
Según apuntaron entonces varios testigos, hubo una disputa previa entre los presuntos agresores y las víctimas y uno le dio con una botella de cristal en la cabeza a otro dejándolo ensangrentado y en el suelo en la carretera. Cuando sus amigos lo intentaron ayudar, vieron cómo los agresores se acercaron de nuevo hacia ellos circulando en un vehículo blanco a gran velocidad. Siempre según las versiones de los testigos, a los amigos apenas les dio tiempo a apartarse, resultando heridos, mientras que el joven que estaba malherido en el suelo fue arrollado y perdió la vida.
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