El proyecto de rehabilitación del convento de San Agustín de Málaga, al detalle
El Gobierno activa el concurso para las obras, valoradas en casi 16 millones (sin IVA) y con un plazo de 45 meses
El diseño incluye una bóveda acristalada en el patio central, que será destinado a zona de lectura y préstamo
Málaga/Poco más de un mes ha habido que esperar para que el Gobierno central active el concurso para la contratación de las obras de rehabilitación del antiguo convento de San Agustín y su transformación en futura sede de la Biblioteca Provincial del Estado. El paso ya formalizado, una vez publicada la licitación en la plataforma de contratación, supone un hito histórico para la ciudad, toda vez que este equipamiento cultural venía siendo objeto de demanda desde hace décadas.
El camino que ahora se abre ya se intentó sin éxito hace trece años, cuando se adjudicó la redacción de un proyecto de intervención que poco o nada tiene que ver con el que ahora ve la luz. Los nuevos responsables del Ministerio de Cultura han modificado de manera sustancial la operación sobre el inmueble, que data del siglo XVI, y optan por una intervención mucho más respetuosa sobre la construcción vigente.
"Nuestro proyecto es un proyecto de restauración en mayúsculas y mantenemos en su integridad la estructura del convento", llegan a afirmar los autores de la actuación, que apostillan a modo de resumen: "Podría decirse sin riesgo de equivocarse que lo que se pretende es la conservación del edificio y sus estructuras así como la puesta en valor de sus elementos decorativos y hasta la reposición de algunas piezas incorporadas a sus fabricas consideradas perdidos pero que tienen un gran valor sentimental para muchas personas que se relacionaron con el edificio".
En este sentido, se señala que son objeto de presupuesto las intervenciones de refuerzo necesarias conforme al estudio de estabilidad, a lo que sumar la apuesta por restaurar todas las fábricas, caso de carpinterías, zócalos de azulejos… A pesar de no ser una obra nueva, el valor de la operación inicialmente estimado se sitúa en unos 16 millones de euros (19,3 millones con IVA), siendo el plazo de 45 meses. Las empresas interesadas en optar a esta obra tienen hasta el 2 de febrero próximo para presentar sus proposiciones. Con todo, no parece previsible que la actuación esté completada antes de 2024.
Atendiendo a los estudios realizados, el edificio "no presenta actualmente indicios, ni lesiones, que hagan pensar en problemas significativos de cimentación, o que cuestionen la estabilidad estructural y sus condiciones de seguridad". A pesar de ello, se reconocen "numerosas lesiones y problemas relacionados con pequeños asientos locales, fisuras y grietas derivadas de las heterogeneidades de las fábricas resistentes, un sinfín de humedades de filtración y humedades de capilaridad, una regular conservación de cubiertas y fachadas exteriores, y una mala conservación (pésima en el primer patio) de fachadas interiores y acabados".
Proyectan una nueva fachada en Pedro de Toledo
Otro de los detalles a destacar del proyecto de intervención es la solución que se plantea para la calle Pedro de Toledo. "Queremos dar a la ciudad una fachada nueva y actual que hable de que se ha intervenido en el conjunto y que a la vez diga del uso del edificio, para esto se propone una fachada que sea malla, tamiz o celosía y que sin definir huecos consiga el efecto de decir que ese edifico es una biblioteca y además decirlo con la dignidad que proporciona una escultura", se destaca en el documento técnico. Para ello, la idea pasa por crear una doble piel, al interior con más cristal que macizo y que integre el acceso en la calle mediante el cristal. "Esa piel de cristal se mantiene en toda su altura en la antigua calle recuperada por la arqueología y hoy acceso principal y se organiza en bandas funcionales en la sala infantil de la planta primera, en la retranqueada planta segunda se reproduce la fachada que se quemó en el incendio de 1931". Por delante de esa piel, "más tecnológica y propia del siglo XXI", se colocará una celosía de cerámica con los colores de los barros tradicionales de la región que serealizará mediante la combinatoria de seis piezas del mismo tamaño. Su forma quiere conseguir un efecto escultórico de estantería tradicional repleta de libros, imagen del uso de biblioteca, por otro lado busca el acondicionamiento térmico, con su profundidad dará sombra al interior y creará sobre todo sobre elespacio delos núcleosde comunicaciones un ambiente tamizado y agradable.
Por ello, los técnicos consideran preciso actuar sobre los elementos estructurales minimizando las actuaciones sobre la cimentación, ejecutando soleras nuevas impermeabilizadas o con barreras capilares, cosiendo grietas y fisuras de fábricas y mejorando las heterogeneidades con fábrica nueva y armaduras que mejoren la ductilidad, reforzando nervios de forjados y disponiendo una capa de compresión con armaduras ancladas a muros que mejoren la rigidez, entre otras operaciones.
Partiendo de la configuración del edifico que une dos calles se ha planteado un equipamiento con dos accesos. Desde la calle de San Agustín se accederá a la parte de la biblioteca que contiene los servicios internos de dirección administración y trabajo bibliotecario, mientras que desde la calle de Pedro de Toledo se accederá a los servicios de la biblioteca abiertos a la mayoría de los usuarios.
Uno de los elementos protagonistas del nuevo disco es la construcción de una bóveda acrislatada sobre el patio principal del complejo, donde quedará localizada la sala de lectura y préstamo, especialmente pensaba para el público. "Es el pulmón del edificio y lo vamos a restaurar y cubrir con una bóveda de cristal de la más nueva tecnología para que quede incorporado a la biblioteca como espacio principalmente dedicado al servicio de préstamos en libre acceso, pudiendo colocarse las estanterías sobre el suelo del edificio", se expone.
Al tiempo, cabe resaltar la delimitación de un salón de actos, al que se podrá acceder desde la calle de San Agustín, a través del primer patio y la escalinata histórica que se mantiene en su disposición y volumen pero que se ejecuta con un diseño mucho mas actual. También habrá, en la planta primera, dos salas con cierre acristalado que se usarán como espacios para trabajo en grupo o salas de estudio; en la segunda planta habrá una biblioteca con fondo local así como la sala de investigadores.
En la parte de Pedro de Toledo, en la primera planta del futuro edificio, se delimita un espacio para público infantil y juvenil. Igualmente, en la parte más próxima a esta calle se incluirá una fonoteca y videoteca aunque sin separar estos espacios delas áreas de lectura y estancia del piso superior del claustro.
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