The Garrison Tavern, el pub inglés de Málaga en el que te puedes pedir una pinta con tu perro

Este establecimiento de calle Comedias atiende a todos sus clientes y a sus acompañantes de cuatro patas, a los que les ponen agua y chuches

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Los perros Tiffany y Héctor, junto con Irving y un camarero en The Garrison
Los perros Tiffany y Héctor, junto con Irving y un camarero en The Garrison / Javier Albiñana
Paula Tejada

02 de abril 2023 - 07:00

Málaga/A solo dos pasos de estar en pleno centro de Málaga un local invita a hacer un viaje a la Gran Bretaña de la posguerra. Al mirar alrededor parece que alguno de los hermanos Shelby saldrá del baño, aparecerá detrás de la barra o entrará por la puerta. Pero solo es una apariencia porque la realidad es que Tommy Shelby solo llegará al pub Garrison de la serie de Netflix Peaky Blinders y no al de calle Comedias que entre fotos y decorados de la serie también deja entrar a todos sus clientes con sus amigos de cuatro patas.

La pandemia cambió la vida de muchos y la de este bar también. Tras cambiar de nombre, el establecimiento pasó a llamarse: The Garrison Tavern Pub. Con decoración de Peaky Blinders, mesas repartidas tanto por dentro del local, como por fuera -aunque su terraza está ahora mismo cerrada- los clientes llegan para tomarse algo, pero no lo hacen solos. Muchos de ellos siempre llevan a sus mejores amigos, a sus perros, que como ellos son uno más en este local.

Este pub inglés permite la entrada de estos animales desde que abrieron después de la pandemia. La decisión no fue algo que tomaron para atraer más clientes, según Fernando Vallejo, dueño del local, lo permiten desde siempre porque son amantes de los animales y su compañía siempre les gusta, siempre y cuando se porten bien. También señala que cómo no van a dejar entrar a los perros si “hay animales con dos patas, los humanos, que son peores”.

Jugar a los dardos, al billar o beber una cerveza o algún cóctel son algunos de los servicios que ofrecen en el establecimiento, también conocido por poner pantallas gigantes para que sus clientes puedan ver los partidos de rugby, fútbol e incluso baloncesto. Al igual que hay productos para los humanos, también los hay para los perros. “Les ponemos su cacharrito con agua, le compramos chuches y galletas para ellos”, asegura Fernando.

Estos animales de cuatro patas son uno más dentro de estas cuatro paredes, viajan con sus dueños a la Gran Bretaña de la posguerra mientras escuchan música rock o ven algún partido en la gran pantalla. Tal es el nivel de aceptación de los perros, que estos pueden subirse a las sillas sin problemas y sentarse junto a los demás, en vez de permanecer en el suelo.

Irving y Tiffany, dos clientes habituales

En este bar abundan los clientes habituales, muchos de ellos son extranjeros y otros malagueños. Entre ellos se encuentra Irving, un inglés que vive en Málaga desde hace casi 30 años, y acude a The Garrison desde hace unos meses con su mejor amiga, Tiffany. A su juicio, el pub “no se parece mucho a un bar inglés, pero el ambiente sí que se parece a los bares del norte de Inglaterra”.

Se trasladó a la capital por amor. Hace 50 años conoció a una joven malagueña que lo enamoró y le hizo querer regresar a Málaga nada más pisar su país natal. No fue hasta 22 años después de comenzar su relación con ella que se trasladaron definitivamente a la Costa del Sol, junto con los tres bichón maltés que le acompañaban en aquel momento. Ahora, después de casi tres décadas en Málaga asegura que es su casa y que no se plantea el irse de aquí.

Tiffany lleva con él dos años y va con él a todas partes. Hace unos meses llegó a este local de casualidad y al ver que los perros podían entrar se quedó. Nada más entrar en el local Irving señala que “se enamoró de Luis, el camarero”. Desde entonces acude mínimo una vez a la semana, si Tiffany no lo arrastra hasta el local. “El otro día salí sobre las siete y me equivoqué de calle, ella reconoció el sitio y se puso a tirar hasta que llegó aquí porque quería venir”.

Cualquier perro es bien recibido

Todo aquel que llega, se queda en el local. Tanto las personas que van con sus perros como las que no. Estas últimas, según Luis Aguilar, camarero del local, nunca se han quejado por la presencia de estos animales, siempre están dispuestos a recibirlos y compartir espacio con ellos. Además, cualquier perro tiene la entrada abierta a The Garrison. En este sentido, el camarero indica que la raza del perro no les importa “pueden ser grandes y pequeños, mientras se comporte bien puede entrar”.

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