El Puerto de Málaga echa balones fuera con la nueva lonja y se abre a colaborar "si hay barcos interesados" en vender pescado

El presidente de la Autoridad Portuaria asegura que no quiere que desaparezca la actividad, pero sus planes pasan por un punto de descarga

Una ‘inauguración’ y 2,3 millones para la lonja de Málaga que no venderá pescado

Autoridades inauguran la nueva Lonja de Málaga
Autoridades inauguran la nueva Lonja de Málaga / Javier Albiñana

La Autoridad Portuaria echa balones fuera con la nueva lonja que costó más de 2 millones y no venderá pescado, al menos de momento. Tanto que ya ni siquiera la llama lonja, cambia su nombre por centro de actividades pesqueras. El presidente de la Autoridad Portuaria, Carlos Rubio, además, asegura que aunque pretende que no desaparezca la actividad pesquera en el puerto, no es competencia suya si esto pasa o no. Y abre la puerta a que sean los propios barcos interesados los que gestionen, en el futuro, la venta de pescado. En el caso de que se vuelva a hacer. Ellos "estarán encantados en poder facilitar la actividad".

En diciembre de 2023, cuando se inauguró el edificio, aunque fuese para la foto, con la presencia de la entonces consejera de Pesca, Carmen Crespo, sí que se llamaba lonja. Costó casi 5 millones, si se tiene en cuenta la construcción de un nuevo pantalán –en el que hay 19 embarcaciones, está completo, que ahora no pueden hacer su actividad en Málaga– y estuvo financiado, en parte, por fondos europeos.

Rubio, tras presentar el balance del Puerto en 2024, incidió en que "sería una pena que desapareciera" de Málaga la actividad pesquera porque cuenta con "mucha tradición". Es por ello que, cuando iniciaron el proyecto para hacer un nuevo muelle 8 que se centre en la logística –el Puerto quiere crecer en el sector de importación y exportación– impulsó la construcción del nuevo edificio, ya que suponía cerrar la antigua lonja.

El mismo, que clausuró el 31 de diciembre del pasado año, estaba operado, aseguró Rubio en declaraciones a este periódico, por un solo barco, el Porto Sol, que naufragó en agosto del año pasado. Ese es el motivo que esgrimía para que el nuevo centro no hubiese entrado en funcionamiento. Este martes explicó que impulsó una licitación para la gestión de la nueva lonja en noviembre, pero que esta quedó desierta.

La nueva lonja –que él no llama lonja, sino centro de actividades pesqueras– tiene dos empresas que le dan uso. Una primera de acuicultura y una segunda dedicada a la expedición y depuración de moluscos vivos (véase coquinas, concha fina o almeja). Pero los barcos no pueden, siquiera, descargar su pesca para llevarla a vender a otras lonjas (Caleta de Vélez o Fuengirola). El 10 de enero de este año la Junta de Andalucía remitió el permiso para el traslado de las capturas (llamado comúnmente conduce). En el proceso de conseguir la autorización para ser un punto de descarga, asegura Rubio, trabaja ahora con la administración autonómica.

Pero no en la primera venta de pescado, es decir, no forma parte de la intención del Puerto, al menos de manera inmediata, volver a poner en marcha la lonja en su función principal. "Hoy por hoy, lo que estamos centrados es que por lo menos los pescadores que quedan en Málaga puedan vender su pesca", pero a otras lonjas, puntualiza Rubio.

stats