La tribuna
Voto de pobreza
La Policía y la Guardia Civil, junto a cuerpos de seguridad franceses, han desarticulado una organización dedicada a introducir cocaína en Europa en veleros en una operación en la que han sido detenidas quince personas e incautados mil kilos de esta droga.
La mayor parte de la cocaína, 740 kilos, fue incautada a finales del pasado mes de diciembre en uno de los veleros de la organización que fue abordado al noreste de las islas Azores por fuerzas policiales españolas embarcadas a bordo de un buque de la Armada Española.
El resto fue localizado en un "piso franco" que dos hermanos franceses que lideraban la organización y que han sido arrestados tenían en el centro de París.
La operación, bautizada como Garlankore, ha sido llevada a cabo tras el trabajo conjunto de la Policía Nacional y la Guardia Civil y la OFAST (Office Anti Stupéfiants) francesa coordinado por EUROJUST, ya que la organización tenía dos ramas, la española, encargada de los contactos con suministradores del estupefaciente en Colombia y Venezuela, y la francesa, que se ocupaba de la distribución de la droga.
El entramado, asentado en Marbella y París, preparaba envíos de cocaína desde el Caribe hasta Europa en veleros y después los distribuía por las provincias españolas de Cádiz y Málaga así como por la región Ile de France, que engloba París y su área metropolitana.
La investigación se inició el verano de 2021 cuando la Guardia Civil tuvo conocimiento de la llegada de un velero a El Puerto de Santa María, capitaneado por un ciudadano francés, del que sospechaban que estaba vinculado con el tráfico de cocaína.
Los agentes determinaron que estaba relacionado con un segundo ciudadano francés que estaba siendo investigado por la Policía Nacional por su presunta relación con el tráfico internacional de estupefacientes.
Los investigadores solicitaron entonces información sobre ellos a las autoridades policiales francesas a través de la OFAST (Oficina Antiestupefacientes). Descubrieron entonces que el primero de ellos fue rescatado en el 2018 en el Canal de la Mancha tras hundirse un velero que capitaneaba en solitario y que supuestamente transportaba cocaína.
Al segundo no le constaban antecedentes policiales, pero era hermano de un francés estrechamente relacionado con el tráfico de cocaína en París.
Tras constatar que ambos franceses mantenían numerosos encuentros, se creó un Equipo Conjunto de Investigación (ECI) entre Francia y España para trabajar de forma conjunta a nivel policial y judicial.
Después detectaron que mantenían reuniones con otros ciudadanos franceses asentados en Marbella, algunos de ellos históricos miembros de la mafia marsellesa.
Entre ellos estaba un conocido criminal francés vinculado durante décadas al crimen organizado y al robo de bancos, que además había sido condenado en Francia por asesinar a un policía durante un robo.
En otoño de 2022 los investigadores observaron que la organización aceleraba los preparativos de un envío de droga, con reuniones con socios venezolanos en España y viajes a París para visitar un piso aparentemente vacío.
Se comprobó que el primero de los franceses investigados adquirió, reparó y acondicionó un velero en Martinica.
En noviembre inició la navegación en solitario. Aunque había declarado como destino final Francia, navegó dirección sur y permaneció unas horas al norte de la zona de Isla Margarita. Después modificó su rumbo e inició la travesía hacia Europa por la ruta de las Azores.
Los agentes solicitaron entonces a través del Centro de Inteligencia contra el Terrorismo y el Crimen Organizado (CITCO) colaboración de la Armada Española para abordar el velero. Así un equipo de investigación compuesto por agentes de la Guardia Civil, Policía Nacional y OFAST embarcó junto a los militares de la Armada para llevar a cabo el asalto del velero en alta mar.
El abordaje se produjo con éxito y gracias a un equipo del GEO, a finales de diciembre, a pesar de las malas condiciones del mar.
En su interior localizaron 25 fardos de cocaína que arrojaron un peso de 740 kilos de estupefaciente. Asimismo, detuvieron a dos personas, tanto al primero de los investigados como a otro hombre venezolano que cumplía las funciones de "notario" y que había embarcado en el velero junto a la cocaína en Isla Margarita.
Tras la incautación de la cocaína en alta mar, los agentes explotaron la operación en tierra con detenciones y registros realizados de manera coordinada entre España y Francia.
En España se incautaron de 52.450 euros en metálico, dos armas de fuego localizadas en un domicilio de Salamanca, dos routers satelitales para embarcaciones, vehículos y múltiples terminales móviles, algunos de ellos con sistemas de comunicación encriptados.
Por otra parte, el piso de Francia donde habían sido vistos los hermanos, ubicado en el centro de París, resultó ser una guardería de estupefaciente donde se localizaron otros 345 kilos de cocaína y un arma de fuego. Además, en otros registros intervinieron 745.500 euros.
La operación, que ha finalizado con la detención de 15 personas -entre las que se encuentran los líderes de la organización, los encargados del transporte, los distribuidores del estupefaciente en Francia, financiadores, colaboradores más cercanos y representantes de la organización suministradora en España- ha permitido la completa desarticulación de la organización criminal.
Temas relacionados
También te puede interesar
Lo último
La tribuna
Voto de pobreza
Tribuna Económica
José Ignacio Castillo Manzano
La financiación autonómica, ¿Guadiana o Rubicón?
La ciudad y los días
Carlos Colón
La Navidad en la obra de Dickens
No hay comentarios