Resuelven una quincena de robos de joyas y dinero en casas de Málaga con la cerradura sin echar
La Policía Nacional ha detenido a cuatro personas en el marco de una operación para prevenir este tipo de delitos
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Málaga/La Policía Nacional, en el marco de la operación 'Nazareno' para prevenir los robos con fuerza en domicilios durante la pasada Semana Santa, ha desarticulado en Málaga una trama especializada en la comisión de este tipo de ilícitos penales.
Así, cuatro integrantes de la red han resultado arrestados por participar presuntamente en 15 robos, sustrayendo especialmente joyas y dinero, ha indicado la Policía Nacional en un comunicado.
Los arrestados utilizaban un modus operandi conocido como "resbalón", consistente en forzar la puerta de la vivienda cuando no se encuentra con la cerradura echada, utilizando un plástico que ataca directamente el cierre. Este grupo desarticulado, formado por dos hombres y otras tantas mujeres, se alojaba en un hostal de la capital y desde allí se desplazaba a las zonas elegidas para perpetrar los asaltos.
El Juzgado de Instrucción número 1 de Málaga autorizó el pasado día 30 de marzo la entrada y registro en las habitaciones del hostal donde se hospedaban los investigados.
Allí, los agentes detuvieron a los sospechosos e intervinieron herramientas para la apertura de los domicilios, así como joyas, perfumes y dinero. A este grupo criminal se le atribuyen 15 robos con fuerza, 14 de los mismos en grado de tentativa.
La investigación, llevada a cabo por el Grupo de Robos de la Comisaría de Málaga, evidenció un claro reparto de funciones entre los miembros de la trama. Las dos mujeres eran las encargadas de cometer los robos y solían llevar diversas prensas de vestir y complementos para cambiarse y ocultar sus rostros, al objeto de no poder ser identificadas. Por su parte, los hombres eran los que supervisaban el trabajo y ejercían el control sobre los efectos sustraídos.
Durante este operativo para la prevención de delitos contra el patrimonio, enmarcado en la operación Nazareno, los agentes tuvieron conocimiento de diversos robos en la capital, la mayoría de ellos en grado de tentativa, y, a su vez, conocieron la identificación policial de dos personas de sexo femenino a las que les intervinieron varios efectos susceptibles de ser utilizados como útiles para la apertura de domicilios por el procedimiento del "resbalón".
Continuando con las indagaciones, se practicaron las oportunas pesquisas hasta comprobar que las sospechosas pertenecerían a una organización criminal de ciudadanos de procedencia ítalo-croata o serbocroata, dedicada al robo con fuerza en casa habitada por el método del resbalón y/o forzamiento.
Este tipo de organizaciones presentan unas características delincuenciales muy específicas y reconocibles, ya que lo primero que hacían es formar delincuencialmente a sus miembros en su país de origen y, posteriormente, conducirlos en grupos de dos a cuatro personas a diferentes países europeos, siendo España uno de los principales destinos.
Normalmente, las células de trabajo solían estar compuestas por dos mujeres y uno o dos hombres, realizando éstos últimos la función de control y dirección del equipo. Solían desplazarse por diferentes ciudades y por períodos inferiores a una semana, lo que dificultaba enormemente las investigaciones policiales, ya que en este pequeño espacio de tiempo trataban de hacerse con el mayor botín posible.
Daban salida a los efectos sustraídos de forma rápida
Una vez con los efectos robados en su poder, el cabecilla de la célula se encargaba de recoger el dinero y remitirlo a su país de origen a través de empresas de envío rápido de dinero. El resto de efectos era enviado por empresas de transportes o, en otros casos, por las mismas células, aprovechando viajes a su país de procedencia.
En el transcurso de las gestiones practicadas, se pudo comprobar que las dos investigadas habrían intentado entrar a robar hasta en catorce viviendas, si bien, o no consiguieron abrir las puertas al estar la cerradura echada, o fueron detectadas por algún vecino y desistieron de su actitud.
Una vez recopilados todos los indicios necesarios, se solicitó al Juzgado de Instrucción número 1 de los de Málaga autorización para la entrada y registro de las dos habitaciones donde se encontraban alojados en un hostal de la capital y allí se procedió a la detención de los cuatro sospechosos, interviniendo joyas, perfumes y dinero en efectivo, que habían sustraído en un domicilio el pasado día 27 de marzo, así como herramientas utilizadas para la apertura de domicilios.
Los agentes han observado que, durante el desarrollo de este plan impulsado antes y durante la Semana Santa, se ha producido un descenso de este tipo de hechos respecto a años anteriores.
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