Robot, póngame una copa

Málaga/La típica frase de "camarero, póngame una copa" que ha salido en miles de películas puede quedarse obsoleta en poco tiempo. La empresa Dax Robotics ha presentado esta mañana en el salón H&T de Hostelería en Málaga un "bar robótico", es decir, un robot que sirve cervezas, refrescos, combinados o copas de vino. No tiene mucha conversación ni empatiza con los clientes, una de las principales dotes de los camareros, pero quien sabe si también lo harán en el futuro.

Sus creadores son Aarón Rojas, un ingeniero informático, y David Gallego, ingeniero mecánico. "Todo empezó por algo lúdico entre mi socio y yo. Haciendo pruebas poniéndolo al lado de un grifo de cerveza. Nos gustó la idea, la llevamos a una boda, la gente se entusiasmó y pensamos que podíamos hacer de esto un negocio. De la cerveza pasamos a los refrescos, de ahí a los combinados, cóctels, copas de vino, etcétera", explica Rojas.

El funcionamiento es sencillo. El cliente tiene una pantalla táctil en la que le vienen los productos, como ya se hace en las cartas digitales de restaurantes de comida rápida. Pulsa, por ejemplo, una cerveza. Acto seguido, un brazo articulado robótico coge un vaso, va al grifo de cerveza, dobla el recipiente para que no salga demasiada espuma de inicio, lo vuelve a erguir y, una vez lleno, lo deposita en una bandeja. El proceso con otro tipo de bebidas es el mismo. "Ahora estamos enseñándole a hacer también cóctels y nuestra idea es que la variedad sea cada más amplia", destaca Rojas.

Lo que han presentado en Málaga está en fase beta y harán una exposición más completa en la feria HIP especializada en hostelería que tendrá lugar entre el 7 y el 9 de marzo en Madrid. "Allí vamos a llevar también copas de vino refrigeradas y congeladas para servir la cerveza muy fría", añade el CEO de Dax Robotics.

El objetivo de sus creadores es llevar este "bar robótico" a bodas, caterings, eventos u hoteles, permitiendo dar un servicio 24 horas al día durante todos los días de la semana. De hecho, el verano pasado instalaron el primer quiosco automatizado de cerveza, junto a Heineken, en un parque temático en Canarias que ofrece tres tipos de cerveza y dos tipos de bolsa de patatas.

Rojas afirma que el robot tarda lo mismo en servir una bebida que un camarero de carne y hueso. "No lo va a hacer con el salero de un ser humano, pero es verdad que para tener un servicio 24 horas funcionando ayuda mucho", expone. Alquilarlo tiene un coste de 1.000 euros al día. Por otra parte, esta empresa también ha creado otro robot asistente que sirve los vasos entre los invitados cuyo precio es de 9.500 euros o de 300 euros al mes en renting. Están trabajando además en otro robot que hace cafés y helados.

¿Acabará este tipo de robots con millones de empleos de camarero en el mundo? Rojas prefiere pensar que su máquina será una ayuda para los profesionales, tanto a la hora de poner copas como para recoger los vasos y llevarlos, por ejemplo, a la cocina. "La robótica va a generar muchos empleos. Nosotros demandados empleados en programación y robótica y no los encontramos. Hay que fomentar más estos estudios, tanto universitarios como de Formación Profesional. Pasa como con internet, ¿cuántos puestos de trabajo se pensaba que iba a destruir y cuántos ha generado finalmente? Hay gente trabajando ahora desde su casa de bloguero y otros oficios que ni se conocían. Van a cambiar los oficios de carga, de llevar peso, de trabajar 12 horas al día. El oficio de camarero es muy duro y los robots vienen a ayudar. Hay un cambio de paradigma", afirma este empresario.