Un simulacro de terremoto en el peor día para Málaga

El ensayo coincide con una Dana que se cebó con la provincia de Málaga, provocando rescates y un caos en la circulación

El balance del hipotético seísmo: seis fallecidos por la caída de cascotes y un autobús volcado

El Ayuntamiento de Málaga mantiene el simulacro de terremoto pese a la tormenta y las incidencias

Bomberos rescatan a un ocupante atrapado en un supuesto vuelco de autobús tras el terremoto
Bomberos rescatan a un ocupante atrapado en un supuesto vuelco de autobús tras el terremoto / Javier Albiñana

29 de octubre de 2024. Un fuerte temblor de tierra de grado 6 según la escala de Ritcher sacude Málaga. La ciudad ha sufrido sus efectos. El séismo deja un balance trágico: hay cinco fallecidos y 13 heridos como consecuencia de la caída de cascotes. El sonido estridente de sirenas resuena en el distrito de Cruz de Humilladero, epicentro del desastre. La estampa es desoladora. Un edificio está a punto de derrumbarse y los bomberos se afanan en rescatar a pasajeros atrapados del interior de un autobús, que ha volcado. Proceden a evacuar un instituto de Carretera de Cádiz. Es sólo ficción. Más de 200 personas -entre ellas arquitectos, aparejadoras, ingenieros, policías, psicólogos sociales y sanitarios, la mayoría voluntarios- recrearon este martes las devastadoras consecuencias de un posible terremoto, con una duración de 30 segundos y posteriores réplicas aunque de escasa intensidad. Lo hicieron, después de prepararse durante meses, en la peor jornada que vivía la provincia en los últimos años, con calles cortadas, balsas de agua acumulada en numerosas calles y hundimientos en viviendas. Pero el Consistorio no vio razones para suspenderlo. Si bien, según explicó desde el puesto de mando avanzado el concejal de Seguridad, Avelino Barrionuevo, en un principio se planteó "demorar" el ejercicio, los técnicos les informaron de que, al menos en la capital, no había habido "grandes afectaciones". "Las emergencias no entienden de día o de que llueva. Ya no estamos acostumbrados a que llueva en Málaga", precisaba el edil.

Para ejecutar el ensayo, hubo que desplegar un servicio extraordinario de bomberos, con la pretensión, según el responsable de Seguridad, de que el operativo no se viera afectado durante la jornada para cubrir las emergencias que dejaban las intensas precipitaciones y los daños que supuso la histórica tormenta eléctrica. Los servicios "continúan funcionando", matizaba, "como cualquier otro día". Si ocurriera una emergencia real, aseveraba, se pondría fin a la prueba.

Eran las 8 de la mañana cuando las sirenas de las ambulancias activaban su atronador canto, que se convirtió en la banda sonora durante las horas más intensas del hipotético seísmo. Málaga quería poner a prueba la operatividad del Plan de Actuación Local ante Riesgo Sísmico de Málaga y verificar la capacidad de respuesta ante un terremoto y sus réplicas, con edificios dañados. "Esperemos que en Málaga no ocurra, pero si es así tenemos que estar lo más preparados posible", apuntaba en la zona a este periódico Salvador Castillo, jefe del Servicio de Prevención de Incendios y Salvamento de Málaga. La clave en un suceso de esta naturaleza, recalca, es la coordinación, máxime teniendo cuenta la labor complicada que enfrentan. "Sobre todo si se colapsan las infraestructuras y hay que proceder al desescombro y a la búsqueda de víctimas", detallaba el responsable de los bomberos.

El ejercicio simulaba los daños causados en los inmuebles de un edificio en Cruz de Humilladero a consecuencia del terremoto. Y de su inspección aérea se encargaba la Unidad de Medios Aéreos de la Policía Nacional de Málaga, que desplegó un helicóptero que le permitiera captar imágenes retransmitidas en directo desde la "perspectiva privilegiada", un cenital.

Los primeros avisos alertaban de que se observaban a personas tumbadas en el suelo, además de grietas en edificios. Había que actuar con celeridad. El reto es "llegar al sitio y organizarnos". "Hay que salir corriendo; no sabes lo que hay", apuntaba el investigador. Una vez sabido lo sucedido, el paso siguiente es dirigirse al "foco principal y revisar las infraestructuras críticas de la ciudad por si se hubieran visto perjudicadas". "El helicóptero es el medio más rápido y eficaz para tener una visión clara de lo que ha ocurrido", subrayaba el subinspector Jesús Ciruelo. Tres drones aumentaban las posibilidades de localizar a personas atrapadas o desaparecidas. Equipados con cámaras térmicas y sensores de imagen, son capaces de detectar señales de calor y movimientos, algo especialmente útil en situaciones de desastres naturales, como terremotos, inundaciones o avalanchas. "Nos permiten acercarnos aún más a la zona del seísmo, introducir cámaras térmicas para prever si se va a producir un incendio en algún punto. La tercera pata son los sistemas antidrones de los que dispone la Policía para descubrir si, en tiempo real, hay otros dispositivos de este tipo sobrevolando la ciudad. "En una situación así nos interesa que no haya drones de curiosos ni otros medios no autorizados porque pueden entorpecer la labor del helicóptero y causar un accidente", remachaba.

El simulacro acabó con éxito. Pese a la tormenta y a una Dana que, fuera del recinto ferial, escenario de la prueba, se había cebado con la provincia. ¿Miedo ante la posibilidad de un séismo combinado con inclemencias meteorológicas? "Ninguno. El día que pase algo nos tenemos que esperar lo peor, venga con lluvia o no", afirmaba el subinspector. Hacia la 1 de la tarde, las sirenas volvían a resonar, esta vez para anunciar el final del ejercicio en un martes negro, con más de un centenar de emergencias. Pero, a diferencia de las inundaciones dle 89, sin víctimas.

Situaciones recreadas:

·         Inspección de zonas afectadas: efectivos de Policía Local y del Cuerpo Nacional de Policía (CNP) se desplazarán con vehículos a las zonas de las que se han recibido llamadas a través de teléfonos de emergencia para identificar e inspeccionar el nivel de afectación de las mismas. Se solicita igualmente a CNP que realice una inspección por parte de los medios aéreos (helicóptero), y posteriormente con drones de ambos cuerpos.

·         Retirada de mobiliario urbano: Una farola ha caído sobre un vehículo con personas en su interior, por lo que personal de Servicios Operativos y de la empresa de mantenimiento del alumbrado proceden a su retirada. Posteriormente, Bomberos interviene para liberar a los ocupantes del vehículo.

·         Desalojar un instituto tras una réplica del seísmo: miembros de la Agrupación de Voluntarios de Protección Civil proceden a la evacuación del alumnado y personal docente del Instituto de Educación Secundaria Profesor Isidoro Sánchez (Distrito Carretera de Cádiz)

·         Realizar la excarcelación de un autobús: el seísmo provoca el accidente de autobús de la EMT, que ha quedado volcado sobre las puertas de salida. Bomberos acude al lugar para extraer a los viajeros, aunque los figurantes estarán en todo momento fuera del vehículo. También intervienen unidades de Protección Civil y personal sanitario.

·         Evaluación de edificaciones dañada por el seísmo: técnicos municipales realizan una evaluación de edificaciones afectadas por el seísmo para verificar la viabilidad de su ocupación por parte de sus propietarios. Se cuenta con el asesoramiento de los grupos de voluntarios de los colegios oficiales de Arquitectos y de Aparejadores y Arquitectos Técnicos.

·         Afectación sísmica en el aeropuerto: personal del Aeropuerto de Málaga-Costa del Sol activará su plan de autoprotección y se procederá a la evacuación de un módulo técnico con capacidad para 200 personas hacia un lugar seguro.

·         Identificación de cadáveres: detectadas víctimas en la zona del barrio San Rafael, Policía Local asegura la zona, a la espera de la llegada de la autoridad judicial, Policía Científica del CNP y personal del Instituto de Medicina Legal.

·         Realización de RCP: tras la excarcelación de las personas atrapadas en el autobús, una de las víctimas requiere la práctica de reanimación cardiopulmonar (RCP) con desfibrilador por parte del conductor del autobús y miembros de Protección Civil.

·         Búsqueda e inmovilización de personas desaparecidas en estructuras colapsadas: la Agrupación de Voluntarios de Protección Civil efectúa una batida por la zona afectadas para buscar personas heridas y/o atrapadas.

·         Inspección de la Unidad de Subsuelo del Cuerpo Nacional de Policía: debido al hundimiento de un registro de acceso al embovedado del arroyo de los Ángeles, se realiza inspección de dicho embovedado para verificar su estado.

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