Los taxistas de Málaga, en pie de guerra por la subida de los seguros: "Piden hasta 8.000 euros"

Realizarán un paro de tres horas en toda España el próximo 13 de noviembre en señal de protesta

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Un grupo de turistas cogiendo un taxi. / JAVIER ALBIÑANA

Como "muy grave". De esta forma califican los taxistas de Málaga la situación que están atravesando los últimos meses durante los que, por un lado, están teniendo problemas para renovar sus pólizas de seguro y, por otro, están topándose con subidas de precios "estratosféricas" cuando lo logran. Hasta 8.000 euros anuales, nada menos, han llegado a pedir algunas aseguradoras a los conductores en la provincia, según tienen conocimiento organizaciones del sector consultadas, que suben aún más la cifra, a la esfera de los 14.000, al abordar lo sucedido a nivel nacional.

Aunque en el caso de la provincia buena parte de los incrementos han sido más comedidos: con topes en 2.000 o 3.000 euros partiendo de una base de 1.200. Un escenario, en cualquier caso, sin precedentes que no dudan en calificar de "jaque a la supervivencia" y ante el que han decidido empezar a rebelarse. La primera acción tras una serie de reuniones a distinta escala, a cargo de la Asociación Nacional del Taxi (Antaxi), será un paro en el servicio de tres horas (de 11:00 a 14:00) el próximo 13 de noviembre en toda España. Si no se soluciona, avisan, será solo eso: la primera.

¿Pero cuál es el origen de todo esto? El presidente de la Asociación Unificada de Autónomos del Taxi (Aumat), Miguel Ángel Martín, explica que viene de lejos, de varios años atrás, hasta que se han encontrado con la dificultad para asegurar los vehículos a la par que con un incremento extraordinario en el coste de los mismos por la "alta siniestralidad" que tienen los conductores de VTC, que computan en su misma categoría "a pesar de que nosotros somos profesionales".

"Operan como un cártel. Estamos pagando justos por pecadores", afirma Martín, que añade que este problema también atañe a quienes "no han dado partes" o, incluso, a quienes "han recibido un golpe sin que sea su culpa". No obstante, el sector del gremio que más lo está sufriendo en la provincia, según ha detectado Aumat, son los taxistas más jóvenes, y en especial, aquellos que tienen menos de 25 años e intentan prosperar en este oficio, a quienes "ni siquiera se les hacen seguros".

Cuando consiguen hacerlos, añade el portavoz de Elite Taxi en Málaga, Guillermo Díaz, la suma asciende hasta los niveles anteriormente denunciados. "Es inviable ¿De dónde saca cualquiera ese dinero para poder meter a una persona a trabajar?", apostilla Díaz refiriéndose a la contratación de asalariados, aunque también hace extensible la inviabilidad a los que adquieren una licencia. "Compras una licencia, un coche, te gastas el dinero en adaptarlo, en ponerle el taxímetro y, cuando vas a asegurarlo con todo lo que te piden, vas y te encuentras con esto", lamenta. El resultado se aprecia igualmente en los talleres, donde los coches están quedando arrumbados por varias semanas, lógicamente fuera de servicio.

Ante esto, Díaz pide repensar el modelo y ver qué ha cambiado: "El trabajo es trabajo. Entendemos que haya que pagar cierta suma, como hacíamos antes, para garantizar tanto la seguridad del usuario en caso de accidente como si le ocurre algo al coche, cosas que gracias a dios no suelen ocurrir, pero esto es excesivo", afirma el portavoz de Élite, que recuerda el desembolso que viene haciendo de un tiempo a esta parte el sector para renovar la flota.

Entretanto, la única alternativa para los taxistas que no son renovados o no están dispuestos a abonar las cifras actualizadas es recurrir al Consorcio de Seguros del Estado. Una medida que si bien les está permitiendo seguir trabajando tampoco llegan a considerar óptima. "Cuesta unos 2.300 euros, aproximadamente, pero es a terceros, y sólo cubre a los pasajeros. Si quieres asistencia en carretera, va aparte", apostillan desde las asociaciones.

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