La tormenta deja lluvias testimoniales en Málaga: los pantanos reciben máximos de hasta 6 litros

Las lluvias que cayeron durante prácticamente toda la tarde de este pasado sábado en Málaga han sido testimoniales. Aunque todo aporte hídrico es bien recibido, apenas han contribuido a suavizar la bajada de agua en los pantanos de la provincia. La sorpresa más agradable se la ha llevado el embalse del Guadalteba, que ha recogido en las últimas 24 horas hasta seis litros por metro cuadrado, de acuerdo a los datos de la red Hidrosur de la Junta de Andalucía. Una cantidad similar, que ronda los 5 litros, cayó en el embalse de Conde del Guadalhoce y del Limonero.

Las principales más cuantiosas se registraron en zonas del interior como Majada de las Lomas, en Cortes de la Frontera, donde se contabilizaron 11,6 litros por metro cuadrado, en Pujerra, con 8,2, y 7,6 en Cuevas del Becerro. También Alcaucín fue uno de los puntos en los que llovió con más intensidad. Cayeron 8,5 litros. El chaparrón fue intenso también en la zona de El Torcal, con 7,6 litros cuantificados.

El estado actual de los embalses

La situación de los embalses sigue siendo crítica. Desde el aluvión que cayó en Semana Santa, cuando se recogió agua para tres meses, las lluvias han sido testimoniales, lo que se traduce en que los pantanos no dejan de perder agua.

En cuanto al volumen de los embalses, el de la Concepción es el que presume de ser el que acumula más agua. Se encuentra al 47,65%. Le sigue el de Conde de Gualdalhorce, al superar el 25%, mientras que el de Casasola registra niveles muy similares, está al 23%. El pantano más damnificado es el del Guadalhorce, con un 10,87%, y el del Guadalteba, con un 13,50%. Por su parte, el de la Viñuela, el más grande la provincia de Málaga, apenas llega al 15% de su capacidad total, y el del Limonero roza el 17%.

Enfilando el final de verano, el acumulado de las siete reservas malagueñas ha disminuido hasta los 114 hectómetros cúbicos, la misma cantidad que albergaban a finales de marzo apenas unos días antes de que se produjeran las generosas lluvias de la Semana Santa, tan esperadas como inoportunas para los cofrades, pero que en cualquier caso fueron vitales para salvar los muebles junto a las menos cuantiosas de abril, alzando los pantanos hasta los 170 hm3 en 30 días. Seis meses después, sin embargo, factores como el aumento de la evaporación por las altas temperaturas y el pico de consumo por el turismo; no hay que olvidar que algunas ciudades costeras hasta duplican su población, han devuelto la situación a la casilla de salida, con los embalses al 18,63% de su capacidad total.

La predicción meteorológica para este lunes

El riesgo de lluvia ha desaparecido al menos el miércoles, cuando se sitúa en apenas un 10%. Y podría regresar, de nuevo, el jueves, con una probabilidad del 25%. Este lunes, festivo por la celebración de la Patrona de Málaga, volverá a lucir el sol. Los termómetros marcarán máximas de 31 grados y mínimas de 23.