La UMA se despedirá de los exámenes de septiembre en el curso 2023/24

Málaga/La generación del 2005 no tendrá que estudiar durante la Feria de Agosto para los exámenes de septiembre. Los universitarios de Málaga nacidos en este año serán los primeros en examinarse de la segunda convocatoria ordinaria en julio y no en septiembre como se venía haciendo tradicionalmente. Las popularmente conocidas como recuperaciones se realizarán un mes después de la primera convocatoria ordinaria del segundo trimestre, que seguirá celebrándose en junio. La Universidad de Málaga (UMA) sigue trabajando en este traslado paulatino del calendario y en dos cursos será una realidad.

La UMA es la última en sumarse al carro de las universidades andaluzas en cuanto a la organización del calendario de exámenes. En el resto de centros tienen preparada la convocatoria ordinaria del primer semestre en febrero, la convocatoria ordinaria del segundo semestre en junio y la segunda convocatoria se celebra justo un mes después. Esta es la organización que domina, además de en toda la geografía andaluza, en el resto de universidades españolas y europeas. La prueba de selectividad ya ha adoptado este modelo y desde el curso 2020/21 la prueba extraordinaria se realiza en julio.

En septiembre de 2023 los campus de la Universidad de Málaga estarán vacíos, pero ya hay centros que han optado por este sistema. Desde este curso, algunos grados de la Facultad de Ciencias, la Escuela Técnica Superior de Ingeniería Informática, la de Telecomunicaciones y la de Ciencias de la Educación ya realizan los exámenes en julio a través de una experiencia piloto. La UMA planea realizar un cambio escalonado hacia la nueva segunda convocatoria ordinaria. De esta forma, el año que viene otros grados se sumarán a los ya mencionados para en el siguiente año conseguir la desaparición total de la convocatoria de septiembre.

El rector, Jose Ángel Narváez, siempre se ha mostrado favorable para aceptar dar este paso y ya lo contemplaba en 2015, cuando fue elegido Rector por primera vez. “Proponer la modificación del calendario académico, iniciando el curso a principios del mes de septiembre y celebrando la segunda convocatoria ordinaria de exámenes en el mes de julio” era uno de los puntos de su candidatura.

La sintonía con el calendario europeo, que beneficiaría a los estudiantes, es una de las ventajas que Nárvaez señala de esta planificación. Por otro lado, apunta a que al finalizar el curso académico antes de las vacaciones de verano se puede mejorar la organización del año siguiente. También señala entre los factores a favor que de esta manera los alumnos podrán descansar durante los meses de verano.