Las claves
Pilar Cernuda
Pedro Sánchez, a por todas
En el fútbol no sólo se brilla ofensivamente, la defensa, de hecho, suele ganar campeonatos. El Málaga fue pobre y previsible en ataque, pero atrás cimentó un punto muy valioso en Córdoba.
Sensacional, varios paradones de categoría, paró hasta los que estaban en fuera de juego. Un lídesde la portería, una bendición para el equipo.
Brutal partido del granadino. Un despliegue tremendo por la banda, infranqueable defensivamente y conduciendo y llegando al área rival. Acabó derrengado.
El portugués empezó con una tarjeta rápida (a veces en un central lleva a Pellicer al cambio, pero esta vez no), pero fue creciendo y tuvo varias acciones defensivas muy buenas.
Tuvo algún error en la salida de balón al principio del partido, pero su presencia se fue agigantando durante el partido y estuvo defensivamente muy atento y lúcido para frenar peligro cordobés.
El malagueño cumplió muy bien con la baja de Víctor García. Defensivamente sólido, se animó más a llegar en la segunda parte. Acabó con molestias.
Primera titularidad del que debe ser jugador básico en la contención. Abarca metros y gana duelos, pero con balón no estuvo fino.
Estaba siendo el jugador más regular del equipo. No estuvo cómodo en buena parte del partido, pero fue creciendo y su peso en la segunda parte aumentó, bueno para el equipo.
Jugó a pierna natural una hora, mucho mejor cuando fue a la izquierda. Se intuye el peligro cuando coge la bola. Forzó tarjetas y tuvo un par de disparos que no empaló bien. Peligro en las venas.
No tuvo continuidad el marbellí, que perdió más bolas de las que suele. Por su calidad debe pesar más en los partidos.
Redebut del francoargelino con el Málaga. En su banda natural, alguna cabalgada y la entrega habitual. Debe ir a más.
Titularidad otra vez. Estuvo aislado arriba. Se fajó y retuvo algún balón para que el equipo saliera.
Poco protagonismo con balón del croata, apenas tocó. Salió y ganó algún duelo aéreo, pero lejos del área.
No está bien el donostiarra. Muy impreciso con balón, igual debe jugar más de cara. Demasiadas pérdidas.
Ayudó a tener control sobre el partido. Filtró un par de balones con mala leche. Juega con un aplomo anormal para un chaval de 17 años.
Salió porque ya estaba Puga reventado. Un pelín tarde a un pase de Ochoa que le hubiera dejado ante el meta.
Salió en los instantes finales el manchego por los problemas físicos de Dani Sánchez. Un par de despejes.
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