Álex Muñoz, el MVP del Tenerife con lazos con el Málaga

El zaguero, autor de dos goles ante el Albacete el domingo, jugó con Matos y Soriano en el Sevilla Atlético en Segunda

Álex Muñoz, segundo arriba por la izquierda; Soriano y Matos, a la derecha arriba y abajo.
Álex Muñoz, segundo arriba por la izquierda; Soriano y Matos, a la derecha arriba y abajo.

Viene a La Rosaleda este domingo un Tenerife al alza desde que Luis Miguel Ramis se hiciera cargo del banquillo canario relevando a Fran Fernández tras el primer tercio de Liga. El tarraconense tiene al equipo en el puesto 10, justo tras el Málaga, a un punto. El domingo anterior consiguió una victoria agónica ante el colista, el Albacete, que tuvo un protagonista: Álex Muñoz. El zaguero alicantino marcó los dos goles, en los minutos 86 y 91, del triunfo, acabando con la resistencia manchega.

Álex Muñoz, elegido MVP de la jornada 29 de LaLiga Smartbank tras esa actuación, tiene lazos con varios componentes del plantel malaguista, a los que podrá saludar este domingo. Fue compañero en el Sevilla Atlético que militó en Segunda División desde 2016 a 2018 de Juan Soriano y José Joaquín Matos. Muñoz había destacado en el Hércules, el equipo de su ciudad, y fue fichado por el filial de Nervión tras el ascenso a Segunda. Allí estuvo dos temporadas, en las que acumuló experiencia en la categoría de plata antes del descenso del filial a Segunda B.

Muñoz se desenvuelve de central zurdo o lateral izquierdo, donde está contando más con Ramis, para el que es indiscutible. Formó pareja de centrales en ese filial sevillista durante su primer año con otro ex malaguista, Diego González. En esos dos años confluyeron un gran número de jugadores que se asentaron en la élite, ya sea en Primera o Segunda. Son los casos del citado Diego González (Elche), Carlos Fernández (Real Sociedad), Eteki (Granada), Pozo (Eibar, cedido aún), San Emeterio (Valladolid), Borja Lasso (también en el Tenerife), Berrocal y Genaro (Mirandés), Amo y Curro Sánchez (Ponferradina), Aburjania (Cartagena), Marc Gual (Alcorcón), Carrillo (Lugo) o Pejiño (Las Palmas). O los malaguistas Juan Soriano y Matos, cedidos por Sevilla y Cádiz en La Rosaleda.

Parte de esa generación de canteranos sevillistas se enfrentó al Málaga en la final de la Copa de Campeones de Vera, en la que el cuadro malaguista se proclamó campeón con el gol de En-Nesyri, paradójicamente ahora en el Sevilla, para forzar los penaltis. De aquel equipo malaguista el único que permanece en la primera plantilla es Luis Muñoz, aunque hay otro buen número en el fútbol profesional. Un buen número de ellos se verá este domingo en La Rosaleda.

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