Besos al escudo
Juande, Ramón y la identidad de un Málaga CF plagado de canteranos comprometidos
A los canteranos se les presupone un amor a los colores y un compromiso que no siempre es real. Hay jugadores que pasan sus años de juventud en un club pero que no se llegan a identificar ni a ilusionarse con triunfar en el mismo. En el Málaga hay ejemplos de sobra. Pero ahora no es el caso. La energía y el hambre con que se emplean los chicos de La Academia se ve en cada encuentro. Hay rabia contenida, furia, pasión. Hay besos al escudo como metáfora redonda. Es algo más que un gesto simbólico.
Dos partidos consecutivos y prácticamente las mismas imágenes. Cuando marcó Juande, cuando marcó RamónRamón. Al Lugo, al Fuenlabrada. En La Rosaleda, en donde encarte. Es un factor fundamental para el club, que se había fijado como meta contar sólo con jugadores que verdaderamente quisieran estar en el proyecto. No sólo hablando de profesionales, también de los chicos de la factoría blanquiazul.
"Te quiero, Málaga", compartía Ramón en sus perfiles sociales tras el brillante triunfo ante el Fuenlabrada. El centrocampista, que había entrado en la segunda mitad, celebró su buen y definitivo gol con sus compañeros de La Academia desplazados al Fernando Torres. La otra familia. Pero le rodearon prácticamente todos los hombres que había en el campo.
También te puede interesar
Lo último
La tribuna
Voto de pobreza
Tribuna Económica
José Ignacio Castillo Manzano
La financiación autonómica, ¿Guadiana o Rubicón?
Microcosmos
Brindis al sol
Alberto González Troyano
Retorno de Páramo