Análisis
Santiago Carbó
Algunas reflexiones sobre las graves consecuencias de la DANA
Entrevista con Alberto Escassi, jugador del Málaga CF
Alberto Escassi (Málaga, 1989) completa un extenso balance de un 2021 que no ha dado respiro y sigue sin darlo. El final del año también viene movido con el brote de Covid y la situación del entrenador, sin embargo, el centrocampista malagueño aboga por cerrar filas, hacer autocrítica y poner al equipo en el lugar que cree que se merece. Uno de los capitanes abandera la “unidad” para volver a levantar al Málaga, que de peores ha salido en estos últimos tiempos.
–Si echa la vista atrás y repasa el año, ¿qué se le viene a la cabeza?
–A nivel de vida, el Covid lo cubre todo. A nivel deportivo lo pasamos mal, un año complicado con el límite salarial, el presupuesto más bajo y las fichas profesionales. Satisfecho con eso, ojalá hubiésemos quedado más arriba.
–¿Y de este segundo tramo de 2021?
–La situación ha cambiado, hay mucha más estabilidad en el club, el presupuesto ha mejorado y no hay límite de fichas. Tenemos equipo para mejorar como mínimo lo del año pasado. No me gusta poner objetivos a largo plazo, soy de vivir el día a día, eso es lo que te va a marcar, pero qué mínimo que acabar entre los diez primeros.
–¿Cuál ha sido la situación más difícil a la que se ha tenido que enfrentar en este año?
–¿Lo más difícil? Yo creo que a pesar de que nos salvamos con varias jornadas de antelación, será que soy de aquí, pero sufro mucho las derrotas y vivo las victorias. Cada partido me lo tomé como una final y cuando perdía sufría mucho, incluso me traía los problemas a casa. Lo más difícil fue saber llevar las derrotas del año pasado.
–¿Y el momento top?
–Estábamos en Oviedo y había jugado el Logroñés con otro equipo, que nos daba la permanencia matemática antes de jugar. Era la cena, nos dimos un abrazo y fue un momento muy bonito, una energía muy positiva en el ambiente, la satisfacción de haber realizado el trabajo a falta de muchas jornadas, se veía la unión que había.
–Se cumplió lo de vivir partidos con gente en La Rosaleda…
–Sí, también es una pasada. Se nota muchísimo. Como llevo unos cuantos años en la categoría conozco a muchos rivales y todos me dicen que es una pasada el ambiente, es una locura cómo nos empuja la afición. Es la mejor de la categoría y de las mejores de España.
–El recibimiento antes de Las Palmas fue brutal.
–Sí, sí, sí. El año pasado vivimos uno pero fue diferente. Salimos al parking, pero era todo más estricto, con menos gente. El día de Las Palmas se percibía esa unión, se nos ponían los pelos de punta cantando con la afición. Son recuerdos para toda la vida.
–¿Qué se dijeron después en el vestuario?
–Ese día cuando bajamos las escaleras todo eran gritos y la gente extramotivada.
–Siempre se habla del buen ambiente del vestuario, ¿pero ha tenido que sacar esta temporada alguna tarjeta amarilla?
–Esta temporada, nada. Tenemos un grupo sano y unido. Hacemos comidas y cenas de compañeros y las parejas, somos amigos más que jugadores. Y comidas de equipo. Creo mucho en los vínculos personales. Igual me estoy yendo por las ramas, pero vi en Netflix un documental sobre Italia cuando ganaron la Eurocopa. Si ve el grupo y el ambiente que tienen, es una verdadera locura. Se lo comenté a los compañeros. Eso luego te da puntos.
–¿Se siguen pagando con las multas las comidas de equipo?
–Sí, sí, multitas, multitas. Algunas comidas las pagamos con las multas, que hay algunas. Las típicas de peso, de grasa, por llegar tarde, por la ropa… Hay cosas que no van a cambiar. También es importante que haya disciplina.
–¿Quién es el más revoltoso?
–En plan mal, ninguno. Pero el que pone el vestuario patas arriba y de cachondeo, sin duda, Javi Jiménez. Es un artista con todas las letras. Es un fenómeno, se pone a bailar, a hacer tonterías… Nos da una felicidad increíble. A cualquiera que le haga esta pregunta, creo que le dirá Javi Jiménez, me resultaría raro otro. Cuando perdemos un partido o tenemos una semana mala siempre nos saca una sonrisa y el grupo lo agradece. Es un cachondo pero luego trabajando y entrenando es el primer tío que va a tope.
–Se vivió un momento complicado ante el Leganés que quizás no esperaban como fueron los cánticos contra el entrenador.
–Fue un momento que a nadie le gusta vivir. Cuando la gente se pronuncia y pide la dimisión del entrenador está claro que es porque las cosas no van bien. Pero no es que no le vaya bien al entrenador, es que no le va bien al equipo, al Málaga y a los jugadores. Lo último que queremos es que la situación sea mala, queremos ganar los máximos partidos posibles y estar lo más arriba posible. Esperemos revertir la situación porque hemos entrado en una dinámica negativa. En La Rosaleda estábamos muy fuertes, pero ante Amorebieta y Leganés perdimos y no dimos una buena imagen, tenemos que cambiar esto lo antes posible por el bien de todos.
–Cuando entraron al vestuario, ¿qué José Alberto se encontraron?
–Sobre todo muy triste, con mucha tristeza por la derrota. Todos esperábamos ganar ese partido e irnos de vacaciones con buen sabor de boca, con 30 puntos, que habría sido una cifra buena para cerrar la primera vuelta. Fue un palo duro porque también veníamos de perder en Copa ante el Rayo Majadahonda y queríamos cambiar esa imagen. Le vi triste y afectado, pero eso quiere decir que le importa y que está implicado al cien por cien.
–¿Y el vestuario está comprometido al cien por cien con el entrenador?
–Sí, sin duda. Al final si a él le va bien a nosotros nos va a ir bien. Soy una persona al que le gusta la unión, la unidad. En los momentos duros es cuando más juntos debemos estar y por supuesto que nosotros estamos con José Alberto.
–Personalmente, ¿ha hecho algún balance de su rendimiento?
–Sí, algo que tengo que mejorar es la autocrítica porque creo que me resta más que me suma. Debería darme menos caña, pero de esta primera vuelta destacaría la irregularidad. Yo siempre veo mi partido, en ocasiones dos o tres veces, el rendimiento que he dado en casa no es el que he dado fuera. No sé por qué motivo pero es lo que ha pasado. Fuera no he estado a mi nivel, no puedo tener tantos bajones.
–En no pocos partidos ha rondado el gol, podría llevar un buen número, pero se le ha resistido y sólo cuenta el que firmó ante el Alcorcón. Se le ha visto enrabietado con eso.
–En el campo soy muy caliente y no sólo cuando defiendo, en ataque voy a por todas. Nunca voy a brillar en esa faceta, pero gusta hacer goles y ayudar al equipo. Espero meter tres goles más y acabar con cuatro o cinco a final de temporada.
–¿Lleva el equipo los puntos que merece?
–Sí, yo creo que sí. 27 puntos, hemos estado en situaciones privilegiadas para meternos en zona de play off, como en Burgos, donde no estuvimos bien. Estamos donde merecemos. Que no es ni mucho menos donde quisiera estar, pero siendo justo o quizás meto demasiada caña, pero creo que somos mejor equipo y podemos estar más arriba, sobre todo, fuera de casa.
–Las lesiones ha castigado duro pero han permitido ver a canteranos en acción.
–Sí, sin duda, y además se han focalizado casi todas en el centro del campo. Y encima Juande también. En las bandas ya nos faltaba gente y Paulino pilla neumonía y se pierde un mes. Yo no soy de excusas, pero la realidad es la que es y nos faltan jugadores importantes.
–Por fortuna, ha aparecido Dani Lorenzo.
–Nos deja helados, pero en el día a día, cada entrenamiento. El primer día ya le vimos cosas buenas, eso sí, competir es otra cosa. Con el estadio lleno de gente, con rivales que te van a dar fuerte y no van a quitar el pie en un balón dividido. El día que salió ante el Amorebieta me dejó alucinado, cómo pedía todos los balones, la personalidad. No era un escenario fácil. Parece un veterano. Aparte es malagueño, de la tierra, hay que tirar para Málaga (risas).
–¿Cómo les llegó la noticia del brote, se enteraron antes?
–Nos enteramos porque tenemos un grupo de whatsapp y nos llevamos genial. Uno de los compañeros lo dijo por el grupo porque el viernes habíamos estado de concentración antes del Leganés. Nos avisó para que nos hiciéramos los test. El club nos proporcionó seis test de antígenos para que nos los hiciésemos a diario y así nos enteramos de que un compañero lo tuvo y los siguientes días fueron cayendo más.
–¿Hay que temer porque se pueda extender a más gente?
–Sinceramente pienso que puede caer más gente porque la nueva cepa es súper contagiosa. Por suerte no es tan agresiva como la anterior y las vacunas ayudan. Cuando nos hagamos la PCR puede que más compañeros den positivo aparte de los que ya hay. En el club nos han pedido discreción y cuando sepan los resultados, imagino que harán un comunicado.
–¿Cree que se puede suspender la jornada?
–Sí, es posible. Hablo del Málaga, no entro en la jornada entera. Tenemos ya casos y pueden aparecer más con las PCR, así que puede haber un gran brote. Si esto sigue así puede que se suspenda como sucedió en el Lugo-Almería.
–¿Qué Málaga se va a ver en la segunda vuelta?
–Yo espero que sea un Málaga más regular. No es normal que seamos de los mejores locales y de los peores visitantes. Ser el mismo equipo. A nivel de concentración tenemos que dar todos un paso al frente.
–Un deseo para 2022, personal y deportivo.
–En lo deportivo, regularidad para el equipo. En lo personal, salud y que me respeten las lesiones. Y hago mío también lo de la regularidad.
–Un mensaje para los aficionados.
–Sólo podemos mostrar agradecimiento por todo lo que nos dan. Nos vamos a dejar la vida por este escudo, que confíen en nosotros.
También te puede interesar
Lo último
No hay comentarios