Iñaki Goitia: "Hay que captar toda la muy buena materia prima de Málaga y que confíen en nosotros"
El ex portero, ahora entrenador del Juvenil de División de Honor, lleva entrenando ocho años entre cadetes y juveniles: "Izan Merino está cerrando ciclos, para su periodo y edad es importante"
"Los rivales nos conocen y se meten atrás"
El Antequera quiere El Maulí blanquiverde
Iñaki Goitia fue parte de aquel histórico filial que jugó en Segunda División. Jugó 76 partidos en el primer equipo entre Primera y Segunda, participó del último ascenso a la élite y se convirtió en un portero de dilatada trayectoria en el fútbol profesional. Ahora es entrenador del Juvenil A de División de Honor del Málaga CF. Pocas personas conocen como él la cantera. En los últimos años ha dirigido al cadete y al juvenil malaguista. Todos los jugadores nacidos en este siglo en el primer equipo han pasado por sus manos. Y conoce lo que viene. En Área Malaguista de 101TV habló sobre esa Academia y también algo de su pasado.
"Aprendiendo todavía y contribuyendo a la mejora de los chavales que están en la Academia. Es un trabajo continuado de varios cuerpos técnicos. Formándoles y adecuándolos al profesionalismo o semiprofesionalismo, que lo tienen próximo con filial y primer equipo. Y haciendo seguimiento a las categorías inferiores, tanto a nuestro equipo como a otros de la provincia. Este es el octavo año en el club como entrenador. En cadetes estuve seis años y estos dos últimos en juvenil", explica Goitia sobre su labor en la entidad: "El ámbito competitivo de jugador es diferente, tienes que tener más frialdad, la percepción de los hechos son diferentes, tienes menos pulsaciones, tienes que analizar lo que sucede en diferentes fases del partido, tienes que analizar cómo proceder e intentar enseñar a los chavales para que vayan aprendiendo todas esas facetas en la metodología que queremos implantar".
"Cuando acabas, nos pica el ámbito competitivo. Formar llama y gusta. Empezar con chavales es diferente, pero ves que te está gustando la formación, planteamiento, sesiones, los microciclos que se desarrollan... No siempre si se gana se hace bien y si se pierde se hace mal. Hay un trabajo pesado detrás. Comprendes mejor a los entrenadores que has tenido. Es un trabajo arduo, concienzudo, que se ve en los dominios de las áreas, por ejemplo. En el fútbol todo es válido y es lo que enriquece al deporte, diferentes sistemas y planteamientos", señala Goitia, que señala referentes que tuvo en el banquillo: "Me marcaron Muñiz con su seriedad y disciplina, Víctor Fernández en planteamientos con balón, Carlos Pouso en el Mirandés en gestión de grupo. De todos se saca algo. No me planteo dónde llegar. Valoro el momento, el día a día. Te planteas a años vista y no disfrutas del presente. Valoro el presente, disfrutar del momento y cuando más provecho se le puede sacar".
"Puedo garantizar que sí, que lo que viene es bueno", dice el que fuera meta de Portugalete sobre lo que se trabaja en el club y el futuro: "El primer año que trabajé fue con la generación 2002 y ahí están en el primer equipo David Larrubia y Haitam. De 2004 hay varios juveniles que acabaron que están rindiendo con Funes, 2006 y 2008 son generaciones buenas... En Málaga siempre ha habido una materia prima muy buena. Es captarla, que confíen en nosotros, en el trabajo. Llevamos tiempo trabajando con ellos sabiendo que pueden llegar y está dando sus frutos", afirma Goitia, que ahora tiene por encima el trabajo de Loren Juarros como director deportivo integral: "Loren poco a poco nos está mostrando lo que quiere conseguir, los patrones que quiere trabajar. Él quiere conocer el modus operandi de los jugadores en una metodología clara en diferentes situaciones de juego. Se trabaja para conseguir un jugador, un equipo y un resultado. No es que le dé igual el resultado, pero quiere conocer in situ lo que busca y pretende. Nos lo está dejando claro. La relación es sana y directa, nos solemos ver y hay trato".
Por edad, Goitia podría disponer de Izan Merino y Antoñito Cordero, dos jugadores que están en órbita de primer equipo y filial, internacionales con España. Pocos los conocen mejor que él. "Izan Merino y Cordero son dos jugadores que he estado dos años con ellos, son encantadores. Tienen una formación y forma de ser súper madura. A nivel futbolístico están subiendo su rendimiento. Desde chavales han mostrado sus destrezas, es fruto del trabajo de mucho tiempo. Izan lleva años en el club, desde abajo, es un malaguista. A Cordero lo recibimos en su segundo año cadete procedente del Betis y viendo sus posibilidades veis cómo está rindiendo. Los dos están de una forma cotidiana en dinámica filial y primer equipo. Es un activo muy importante para el club. Izan Merino está cerrando ciclos, para su periodo y edad es importante. Es del 2006, buen jugador, buen activo, pero vamos a tener calma. Si fomentamos y promovemos subir jugadores sin parar igual nos damos un tiro en el pie. Todo tiene un proceso, tanto en la vida como en el ámbito deportivo", contextualiza Goitia: "El tema de la representación y redes sociales distorsiona el entorno y la percepción del jugador. Cuando los de mi quinta éramos profesionales el representante te venía con 17 o 18 años. Ahora ya hay infantiles y eso les distorsiona todo. El mensaje no les llega directo. Hay jugadores que sí confían en nosotros, mismamente Izan se queda y confía en el trabajo que se realiza porque va consiguiendo resultados".
Habló de otros temas Goitia
Construcción de la Academia
"Parece ser que está próximo, es un paso importante que vamos a tener, que nos va a ayudar para seguir mejorando como club, será importante".
Alfonso Herrero
"Lleva una temporada muy regular y es un portero que está para parar. Las pocas ocasiones que tiene las resuelve con solvencia. Todos deben apretar para la causa. La Rosaleda es una afición que te quiere y reconforta. Las comparaciones no son buenas, pero otras aficiones igual te castigan más por un error que daña colectivamente. Alfonso puede estar muy a gusto por sentirse portero en La Rosaleda, jugar en un estadio así. Es un buen profesional, aportando y dando puntos".
Integración
"Soy malagueño de adopción, siempre lo he dicho, a nivel profesional me recibió de manera fantástica. Tengo grandes amistades grandes aquí, mi familia es de aquí. Llegué al Málaga con el filial en Segunda. Siempre intentaba salir por la puerta y centrarte en tu vida social. 24 horas en tu profesión no ayuda. Disfrutaba del momento, todos canteranos, un grupo joven, una generación que sube de Tercera a Segunda A, súper honesta y buena".
Ascenso a Primera
"Se subió con el gancho, pero veníamos de un ERE, muchos problemas extradeportivos, iniciamos muy bien, se hizo un grupo humano muy bueno en todos los departamentos, una gran familia y unido a esa afición que tiene el club que nos llevó en volandas. 42 jornadas, se disfrutó mucho aunque al final llegamos justos".
Barakaldo
"Soy de Cruces, al lado. Un rival que va a afrontar con muchísima ilusión el partido. En el Norte la Copa siempre gusta mucho y más ante un Málaga. Barakaldo es una ciudad con 90.000 personas, gusta el fútbol, gente de fútbol, ambiente muy bonito. El Barakaldo tuvo una reestructuración interna muy importante. El referente en Vizcaya es el Athletic, dentro de Euskadi la Real trabaja muy bien también, como Osasuna y Alavés.
Identificación
"Hace 20-25 años veías a gente con la camiseta del United o del Madrid cuando entrenabas, los goles del Madrid se cantaban casi más que los propios en un partido. Pero ese sentimiento de pertenencia de la tierra, de lo tuyo, aunque luego tengas simpatía con otro club, es básico. Primero soy del Málaga y después de otro. Allí en el Norte se vive ese sentimiento de pertenencia. A mis hijos les digo siempre que es mejor ser del Málaga porque cuando celebremos algo lo vamos a celebrar a lo grande que de un club que está acostumbrado a ganar. Es fácil ser de Barcelona o Madrid, pero lo autóctono es lo que se vive más. Mi cariño al Málaga es muy grande. Seis años de profesional, trato exquisito. Y luego cómo se me ha recibido, al Málaga lo quiero con locura. El ERE nos unió mucho, se vivieron situaciones tensas, bonitas, une más a los compañeros, las parejas, los críos, el entorno, los grupos de trabajo... Era bonito. El Málaga tiene ese sentimiento que no tienen otros clubes".
Relación con clubes
"Hace 7-8 años se miraba mucho a las afueras de Málaga provincia, teníamos 150 chicos en la residencia, pero con todos los clubes es cordial, nunca he tenido problemas con clubes de la provincia".
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