Lombán y su constante

Están siendo complicadas estás últimas temporadas en la carrera de David Lombán. El asturiano caía lesionado de nuevo ante el Numancia este pasado viernes. Aguantó sobre el terreno de juego poco más de un cuarto de hora. Rápidamente se echaba al suelo y pedía el cambio. Diego González calentaba con celeridad y se producía la sustitución. Se le veía claramente afectado al veterano central que está viviendo un calvario con las lesiones.

Es la tercera lesión de David Lombán esta temporada la que se produjo en Los Pajaritos –más alguna que otra recaída en el proceso de recuperación de alguna de estas–. Las molestias son ya una constante. En Santander, en el primer partido de la presente temporada, el central forzó dada la situación del club y aquello le llevó a tener que ser sustituido al descanso por problemas en su rodilla (originada la pasada temporada en los play off ante el Dépor).

Tres semanas de baja más para reaparecer ante el Almería donde disputó los 90 minutos. Fue suplente después ante el Mirandés pero disputó toda la segunda mitad. De nuevo molestias ante el Rayo Vallecano que el evitaron estar ante el Albacete. Tras aquello, parecía estar plenamente recuperado de sus dolencias y se hizo con la titularidad. Partidos completos ante el Sporting, Zaragoza, Cádiz, Deportivo de la Coruña y Oviedo. Iba por el mismo camino en El Toralín ante la Ponferradina a inicios de noviembre pero su adductor dijo basta. Parecía recuperado ante el Numancia pero quedó en espejismo.

“Molestias en la zona del adductor y la inserción con el pubis”, señalaba el club, que aún debe hacerle pruebas para determinar el alcance de la lesión de un jugador que, desde que firmó por el Málaga la pasada temporada hace ya más de un año, ha disputado tan solo 22 partidos, 17 como titular, y fue sustituido en seis de ellos. Números que hacen destacar el porqué un jugador de su calado y trayectoria, estaba libre tras su etapa en Primera con el Eibar.