Colista como visitante

Las dos caras del Málaga CF como local y visitante son un hecho. Tras ocho partidos, lo que pudieron ser tropiezos o coincidencias, comienzan a ser una constante, un resultado en base a la experiencia repetida de acontecimientos. El equipo es frágil sin el calor de los suyos, sin estar arropado por sus aficionados. Es un patrón que se repite lejos de La Rosaleda, donde aún no conoce el triunfo y donde solo ha sumado tres puntos de 24 posibles, los peores números de toda Segunda División.

Es difícil ocupar puestos de cabeza, de promoción de ascenso, logrando tan solo buenos registros como local. Es cierto que el equipo es en este sentido uno de los mejores de toda la Liga SmartBank. Cinco victorias y dos empates en siete partidos, invicto con ocho goles a favor y solo dos en contra. Son números magníficos, superlativos a poco que el equipo fuera capaz de ganar algunos partidos como visitantes para mejorar su media. Pero está siendo difícil, ciertamente preocupante.

Tras la derrota ante el Cartagena, con un abultado 3-1 en contra en Cartagonova, el equipo sigue con los peores registros de la categoría. Solo ha sumado tres puntos como visitante, los mismos que ha hecho el Alcorcón, colista destacado en la general con tan solo ocho puntos. Los tres puntos de los alfareros lejos de Santo Domingo sí fueron sumando un triunfo –ante el Mirandés– que contrasta con sus seis derrotas. El Amorebieta empató este fin de semana, precisamente ante el Alcorcón, y mejoró su registro como visitante con cuatro puntos. Éste y el Lugo son los otros dos clubes que no han logrado ganar esta temporada aún como visitante.

En cualquier caso, el equipo no dejado de competir como visitante, excepto contadas ocasiones como fue el partido negro en Ponferrada. Los detalles y errores puntuales han costado muchos puntos hasta la fecha a los blanquiazules y tampoco terminan de ganar en seguridad defensiva –sobre todo a balón parado– ni contundencia en el área rival. Solo ha logrado seis goles a favor, ni uno por partido, y ha encajado 16, una media de dos por encuentro. Muy preocupante.

José Alberto ha buscado alternativas en lo que va de temporada, tanto en el centro del campo como en los puestos de ataque, aunque hasta la fecha no ha encontrado algo firme a lo que agarrarse para crecer desde ese punto, sigue en su búsqueda. Mientras las jornadas pasan, los de arriba mantienen un equilibrio como local y visitante que puede determinar a qué aspiran unos y otros esta temporada.