El Málaga cierra filas con Rubén Castro

Si hay un jugador que está sufriendo esta temporada en la plantilla del Málaga, ese es claramente Rubén Castro. Por desgracia, al delantero canario se le ha visto más veces cabizbajo de las que hubieran gustado y en cada celebración de gol se aprecia que resetea y se quita un peso de encima. A pesar de la mala racha que está teniendo este año, donde las cosas parecen no salirle, no para de intentarlo, ofrecerse y probar suerte. Todo un ejemplo a seguir por cualquier futbolista. Sin embargo, el máximo goleador histórico de Segunda División se marchó bastante tocado en el aspecto anímico tras haber fallado un penalti ante el Huesca en La Rosaleda que puede sentenciar a los de Martiricos. Un gol que hubiera dado la victoria en un partido pobre en ataque y falto de fútbol. Además, hubiera supuesto ponerse a cuatro puntos de la salvación, pero Andrés Fernández aguantó muy bien y se lució ante el gran golpeo colocado del 24 blanquiazul.

Viendo la situación de los blanquiazules en lo deportivo, lo normal es que la pena máxima la ejecutara un veterano y especialista como es el canario. Así lo reflejan sus datos, el delantero español lanzó 42 penaltis en toda su carrera y convirtió 35, sólo erró siete. Precisamente, dos de ellos han sido vistiendo la elástica blanquiazul esta temporada. Una cuenta pendiente para el pichichi en goles, lleva diez dianas, y asistencias, ha obtenido cuatro, de la plantilla de Martiricos. El mismo Pellicer salió a arroparlo tras el partido: "Es fútbol. El que lo falla es el que lo lanza. Es un goleador, una leyenda y se ha visto en mil situaciones así. Ahora le toca levantarse y ojalá en Ponferrada se quite esta espina. El mas jodido es él, son situaciones límites y se nos nota". Todavía tiene cuatro partidos por delante para intentar redondear su cifra goleadora en la categoría de plata de 195 a 200.

También es necesario recordar que el delantero blanquiazul ha vivido en sus propias carnes esta temporada como el VAR le anulaba varios goles y sino era el asistente por posición antirreglamentaria. Eso sí, si se culminase la desaparición del Málaga del fútbol profesional, es decir, se descendiera, este penalti sería una espinita clavada para Rubén Castro. Además, se llevaría un sabor muy amargo de su aventura en la Costa del Sol. En su defensa, es necesario recalcar que el killer español está muy solo en el frente ofensivo blanquiazul, pues sus perseguidores en la lista de goleadores son Chavarría con cinco dianas y Fran Sol con tres tantos o Lago Junior con tres. El resto se encuentran con uno o dos goles sólo.

Unos datos que dejan claro que sin Rubén Castro este Málaga podría estar ya deshauciado a estas alturas, pues el jugador de 41 años lleva diez goles de los 33 que ha conseguido marcar el conjunto ahora dirigido por Sergio Pellicer. Al menos, el delantero canario ha conseguido llegar a los dos dígitos, diez goles, la cual es su cifra mínima. Nunca se quedó por debajo de esta marca en Segunda División el actual jugador blanquiazul. Algo que ha conseguido salvar esta campaña. Sin embargo, el propio delantero admitió que espera dejar la cifra de esta temporada en 15 goles. Todavía es posible.