Pepe Mel, la imagen de la impotencia: "¿Qué quieres que te diga?"
El técnico compareció compungido tras el empate contra el Burgos, pero insiste en que se ve capacitado para salvar la situación: "Sí, por supuesto que sí"
La crónica del partido
Pepe Mel compareció con tono de voz bajo, visiblemente afectado, por la situación tras el empate con sabor a derrota ante el Burgos. El Málaga va camino a Primera RFEF sin remisión. El técnico no da con la tecla, sólo ha ganado tres partidos de 18 y sólo ha sumado 18 puntos. Números muy pobres. La afición se hartó en el final, con gritos a Manolo y José María Muñoz. Mel apuntó a los errores de los jugadores, que cuestan puntos. "¿Qué quieres que te diga?", fue la coletilla más usada.
"Hicimos unos buenos 60 minutos y nos pudo después la precipitación y los nervios. Hicimos lo más difícil, ponernos por delante, y eso era lo más complicado. No te puede marcar un gol en contraataque el Burgos, teníamos que leer mejor la situación, tener más oficio. Ganando 1-0 en casa no debemos cometer ese error. Es fútbol, a partir de ahí nos pudo la ansiedad y los nervios. Estuvimos bien 60 minutos", decía Mel como primer análisis antes de contestar a la pregunta de si se sentía capacitado para sacar esto adelante de manera escueta: "Sí, por supuesto que sí".
"El Burgos es un equipo que defiende muy bien y contraataca. Es un error de manual. Estamos a cuatro puntos de salir, en el fútbol no son nada cuatro puntos pero estos errores nos matan. Contra el primero la semana pasada perdimos por errores, el Burgos nos empata cuando debía haber sido al revés, debíamos haberle pillado a ellos en una contra...", lamentaba el técnico, que asume la decepción colectiva: "Entiendo que la gente y ustedes piensen lo que sea, pero yo confío en mi trabajo y los jugadores y en verlos trabajar. Punto a punto no nos salvamos, es la verdad. Espero cortar la racha rápido. Las ruedas de prensa son parecidas, pero mientras pueda seguir trabajando lo intentaré. Dependemos de los resultados, como bien se sabe en el fútbol, mientras no se decida otra cosa será entrenador. No vi jugadores indolentes ni bajada de brazos, eso sí supondría que estaríamos muertos. Los jugadores se rebelan, pero no nos salen las cosas".
Sobre la pobreza de ideas en los últimos minutos para llevar peligros opinaba Mel que "es fácil decirlo desde esa posición. Hay un rival que también juega, los futbolistas son personas, la situación te gana. Lo sencillo es meter el balón en el área e irte para allá. Lo intentamos de todas las formas posibles. Mañana a las 10:30 trabajo con todos los futbolistas, si el club no dice lo contrario. Entiendo que todo sea negro y pesimismo, pero no podemos bajar los brazos. Han jugado casi todos los futbolistas, no sé qué jugador no ha participado en algún partido. Han jugado todos, si ves los goles cómo han sido es para volverte loco... Un rival que juega a no encajar, que tres puntos nos dan vida... Qué quieres que te diga".
"Hicimos lo más difícil y no podemos recibir este gol, nos lo tenemos que hacer ver. Le hemos hecho un gol al Burgos, que es muy complicado. vas ganando y nos hacen un gol en contraataque, es muy doloroso de admitir. Los errores cuestan puntos, echamos la vista atrás de los goles encajados, machacamos, entrenamos todos los días la semana pasada las faltas y los corners... Y nos lo meten en el último minuto. Es impotencia. Quiero que la gente entienda que son los primeros interesados son los jugadores. No veo el equipo caído, ni indolencia, sería la primera señal de que el entrenador sobra. Los futbolistas lo intentan. Los futbolistas están llorando, muy mal. Sólo hay alguien que pueda sacar esto, son los que se ponen la camiseta. Los futbolistas son lo principal, no hay que levantar a Manolo Gaspar o Nacho, son los jugadores", señalaba Pepe Mel, que era cuestionado por los gritos conta José María Muñoz y Manolo Gaspar: "No puedo decir nada, el público es soberano. Es como si dicen que se vaya Pedro Sánchez, ¿Qué puedo decirte yo?" El fútbol es así, no tengo que opinar si me van a echar o no, no depende de mí".
"Es el primer partido en casa, Lago Junior tiene unas características, siempre ha desbordado. Antes del gol ha tenido otra ocasión. Hasta que ha pedido el cambio ha estado bien. Julián estuvo más nervioso y dubitativo, tienes que contar con eso. Estamos en descenso y los futbolistas lo llevan en las piernas y la cabeza y se hace más complicado cuando las cosas no salen", analizó Mel sobre los nuevos, antes de ser cuestionado por el penalti no señalado a Ndiaye en la primera mitad: "Estáis muy obsesionados, con razón, con otras cosas. Agradezco la pregunta. El penalti a Ndiaye es clamoroso. Teníamos dos tarjetas a los pocos minutos y el Burgos ninguna. El penalti de Ndiaye no sé cómo explicarlo".
También te puede interesar
Lo último
El parqué
Caídas ligeras
Tribuna Económica
Gumersindo Ruiz
La casita de Jesús
Postrimerías
Ignacio F. Garmendia
Todo lo que era sagrado
La tribuna
Testigos de la esperanza