Víctor, muy presente en La Rosaleda

Víctor estuvo en La Rosaleda sin estar en el partido ante la Ponferradina. Su vacío lo llenaron miles de aficionados que se posicionaron de parte del entrenador, recientemente despedido. Al mismo tiempo, los aficionados blanquiazules dejaron clara su oposición, de manera casi unánime, a la gestión de Abdullah Al-Thani al frente del Málaga. Fue Richard Shaheen, su director general, quien aguantó la bronca en el palco.

Los integrantes de la grada de animación se quedaron durante casi toda la primera mitad fuera del estadio como medida de protesta ante lo que consideran un despido injusto del entrenador. Ese tiempo estuvieron en los aledaños del estadio mostrando su disconformidad. Luego, sobre el minuto 40, los mismo integrantes del Fondo Sur 1904 ocuparon sus localidades al canto de: “¡Qué bonito es, cuando salgo de casa para ir al estadio, a animar a mi equipo!”. El siguiente cántico fue para el presidente:“¡Al-Thani, vete ya!”. Ya se había escuchado fuera.

No fue, de cualquier modo, el mejor día para nada en La Rosaleda, que vivió la peor entrada de la temporada con una asistencia oficial de 12.203 espectadores. Los efectos de las decisiones de Al-Thani y Shaheen se dejan notar negativamente en el estadio.

Por su parte, Víctor Sánchez del Amo hablará mañana ante los medios de comunicación a las 13:00 horas en el hotel Guadalmar (su residencia en la Costa del Sol), donde dará su versión de los recientes acontecimientos. El Málaga contraprograma al técnico madrileño convocando a la prensa para la presentación de Sergio Buenacasa, que será en La Rosaleda a partir de las 13:30.

700 investigados

La investigación de la difusión de un vídeo íntimo por redes sociales y en algún medio de comunicación del ex entrenador de Málaga Víctor Sánchez del Amo abarcará a unas 700 personas que retuitearon el contenido. El Juzgado de Instrucción número 10 de Málaga será el encargado de investigar “caso por caso” y se incidirá en los “más activos”, según han informado a Efe fuentes judiciales, que han destacado la colaboración de Twitter para borrar el vídeo y cerrar rápidamente incluso perfiles que se hicieron eco de las imágenes.