Antoñito Cordero se enfrenta a otro juicio en La Rosaleda

La última vez que Antoñito Cordero saltó al césped de La Rosaleda se llevó una sonora pitada por parte de un sector de aficionados disconformes. El hecho de que el héroe de Tarragona no haya firmado su renovación, escuece en Málaga. Pero este asunto afecta a todos, no al jerezano de manera individual aunque sea blanco de ciertas iras. En Martiricos están intentando poner todo de su parte para que no vuelva a suceder un episodio como el del día del Cartagena.

Han pasado casi dos semanas. El jugador, además, se marchó junto a Izan Merino con la selección española sub 19. Por el camino, celebró su 18 cumpleaños. Fue importante con La Rojita. Y regresó a Málaga para sumarse de nuevo a la dinámica del primer equipo.

"Ya han venido los tres. Han hecho entrenamiento suave. Los tres van a estar para ayudar, ninguno va a salir de inicio. Que quede claro. En el caso de Antoñito, se tiene que solucionar y sé que Loren está hablando con ellos. Pero no quiero que vaya a más. Lo veo muy bien, como a todos, y no hay ningún tipo de problema", contaba el jueves Pellicer, un poco cansado de esta situación por todo lo que implica. Ciertamente, el director deportivo no ceja en su empeño de tratar de reconducir el asunto.

Resultó desagradable escuchar en La Rosaleda con un partido en marcha una reacción de tal calibre. Aunque luego se intentase mitigar con ciertos aplausos, escuchar ese sonido de viento también afecta al resto de jugadores y enrarece el ambiente, genera desconcierto. Teme Pellicer que se vuelva a repetir algo similar teniendo enfrente al Racing de Santander, el mejor equipo de toda la Segunda División, cuando lo que se necesita es precisamente unión y firmeza.

Y en La Rosaleda pinta a que habrá ambiente de lujo. Salvo por la horquilla de abonados que siempre suele faltar en cada jornada, la venta de entradas va como un tiro. Se volverá a rozar el lleno óptimo (otra cosa es lo que digan los tornos). Eso sí, la madurez del futbolista está resultando asombrosa, sabiendo abstraerse del ruido externo y cumpliendo como uno más en el día a día. Tanto con España como con el Málaga.