El centro de Málaga, una pequeña Stuttgart

El fútbol continúa presente en Málaga. E ilusiona. Pero no es el caso de todos los habitantes y turistas de la ciudad. Porque el centro de Málaga durante la tarde de este viernes 5 de julio, fue poblado durante el España - Alemania por aficionados germanos en su mayoría. Aún así, hay que destacar que la afición española también se echó a la calle para animar a los pupilos de Luis de la Fuente y tuvieron la oportunidad de celebrar el pase a semifinales con gol en el último minuto de Mikel Merino, a lo Antoñito Cordero, aunque algo menos agónico porque llegó en el minuto 119.

En la capital, tras conseguir el ansiado ascenso con el Málaga C.F. y vestir a la ciudad de blanquiazul, es el turno de la Eurocopa con España. Málaga se preparaba para acoger una gran tarde de fútbol. El mayor torneo en Europa a nivel de selecciones había querido que en la ronda de cuartos de final se enfrentasen las dos favoritas a optar por el título. Y el plan de salir a verlo con amigos o familiares no era mala opción. Por juego y resultados era el partidazo de esta competición y había que disfrutar de él de cualquier manera. Las calles del centro de Málaga se convirtieron en una pequeña Stuttgart por la gran cantidad de aficionados alemanes presentes en los bares.

Desde los minutos previos los establecimientos estaban completos. No quedaban mesas. Mucha gente disfrutó del fútbol de pie desde fuera de los bares. Los camareros y porteros de dichos establecimientos confirman que son horas de mucho trabajo, de controlar a cada uno de los clientes y por supuesto, de hacer el mejor servicio para que vuelvan a repetir. El ambiente era sano. Y afortunadamente no tuvo que lamentarse ningún altercado a pesar de la mezcla de alemanes y españoles que vivieron juntos el encuentro. Durante la tarde, se respiró un gran ambiente de fútbol, y aún más cuando España consiguió pasar de ronda.

Los alemanes, durante el encuentro, comenzaron a entonar cánticos para manifestar que eran más. Todos cantaban a una, como si estuviesen en el Stuttgart Arena. Todos con bebida en mano. Ninguno faltaba. Repetían y repetían una y otra vez la misma canción. En cualquier establecimiento del centro de la ciudad la mayoría de espectadores llevaban su indumentaria blanca para apoyar a los suyos. Los españoles, algo menos ruidosos, respondieron para crear ese pique sano entre ambas aficiones. Muchas camisetas y banderas de España también presentes. Tras la respuesta, todos eran risas y choques de manos. Durante los descansos que tuvo el encuentro, gran parte de los asistentes salían al exterior y compartían la visión del partido que cada uno tenía.

A la llegada a los alrededores de los establecimientos, la longitud de la calle se estrechaba debido a la multitud de personas que se encontraban en la puertas de los bares. El resto de viandantes sacaban el móvil de sus bolsillos para recoger una instántanea única. Todos quedaban sorprendidos ante la multitud de personas y los cánticos de los alemanes. Cada 50 metros había un bar con pantallas en el interior y exterior del establecimiento plasmando el encuentro. Y la situación era la misma: gran cantidad aficionados viviendo el fútbol.

Los goles se cantaron, se protestaron faltas y tarjetas, se notó el nerviosismo de ambas aficiones, se sintió el miedo de caer eliminados, pero sobre todo se disfrutó de una tarde de verano con fútbol, amigos y familiares. Y qué mejor para la ciudad malagueña que celebrar el triunfo de España.

Con motivo del Portugal - Francia que se jugaba a las 21:00 horas, cuando el sol comenzó a caer, por la calles del centro se dejaron ver aficionados con la camiseta de la selección gala. En la espalda el 10 y el nombre de Kylian Mbappé. Eran menos, pero las banderas de Portugal también estuvieron presentes. En general, había muchos aficionados con camisetas de selecciones y equipos que no disputaban el encuentro. Es el ejemplo de un grupo de aficionados de Croacia, selección ya eliminada del torneo, o camisetas blanquiazules del Málaga C.F.

El malaguismo presente en Stuttgart

Una representación de la Peña Malaguista de Manilva estuvo presente en el Stuttgart Arena para presenciar el encuentro de la Selección Española. En las gradas, los componentes de esta peña lucieron banderas con el escudo del Málaga C.F. El club de Martiricos estuvo presente en la Eurocopa y no es la primera vez que se ha podido apreciar banderas del club boquerón en las gradas.

El fútbol en Málaga tendrá una nueva cita el próximo martes 9 de julio a las 21:00 horas. España buscará vencer y llegar a la gran final del campeonato para hacerse con la cuarta Eurocopa y convertirse así en la selección con más trofeos en dicha competición.