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Ya lo dijo 'El Kanka' de que el malaguismo es "una cosa inexplicable" y es que hay momentos y alegrías que te marcan por conseguirlo también con los tuyos, con la gente de tu ciudad, con tus vecinos y amigos y, en el caso de la plantilla de Sergio Pellicer, lo han conseguido siendo una gran familia durante un duro y largo camino. Buena prueba de ello es que uno de los integrantes del equipo es que Dani Sánchez, un jugador del que su sentimiento de pertenencia y su implicación nunca ha estado en duda, ha inmortalizado el gol de Antoñito Cordero en su piel con un tatuaje que lo representa con un '122' que es el minuto, en el que el canterano anotó el 2-2 para el Málaga CF en el Nou Estadi Costa Daurada.
Esto se conoce, porque lo lució con orgullo mediante las historias de su cuenta de Instagram y mostró como esto quedará plasmado en su mano izquierda para siempre y demostró como no hablaba en vano, cuando decía que era uno de sus sueños conseguir una gesta de esta índole durante su carrera como jugador con el club de Martiricos y devolverlo al fútbol profesional.
El lateral ha aprovechado la decisión de Sergio Pellicer de que las vacaciones pondrán su punto y final el día 15 de este mes de julio para poder hacerse este tatuaje sin tener ningún problema con la curación de este, puesto que el plazo recomendado sin sudar excesivamente y con una atención mayor a esa zona suele ser de, como mínimo, de alrededor de dos semanas, salvo con piezas muy grandes o con una indiosicrasia especial por la naturaleza de la pieza. De esta manera, podrá entrenar sin problemas y sin miedo a ningún choque cuando ya vuelvan a ejercitarse en el Anexo I de La Rosaleda.
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