Así se desinfecta y se sigue el protocolo de seguridad en La Rosaleda
Es un proceso complejo y minucioso de limpieza en el que se tienen en cuenta todos los detalles para seguir las indicaciones e impedir contagios
El primer equipo del Málaga Málagavive su primera jornada de descanso desde que empezase a entrenarse en el estado de alarma y el club ha aprovechado para explicar cómo se higienizan las instalaciones para poder seguir los protocolos. "Primero hicimos una desinfección en oficinas y vestuario inicial, con pulverización, con unos trajes de seguridad, mascarillas, guantes… Fue una primera desinfección inicial. Justamente antes de la entrada para los entrenamientos tuvimos que hacer otra, y ahora todas las semanas tenemos que seguir haciendo desinfecciones", explicó Javier Pérez.
"El jugador, desde que entra, tiene que hacer su primera parada donde tiene su gel hidroalcohólico, sus guantes y su mascarilla. Vuelven a subirse al coche y esperan su turno para acceder al campo, porque viene ya con su ropa para entrenar. En ese momento el jugador sí se quita la mascarilla; accede al campo, pero cuando sale se vuelve a desinfectar. Al entrar se quita sus zapatillas de deporte y se pone sus botas, y ya se desinfecta sus zapatillas de deporte. Cuando se retira vuelve a pasar por otra zona distinta a la que entró, donde deja su GPS y sus botas, que se desinfectan y se limpian, y recogen sus zapatillas, se las vuelven a poner y se vuelven a desinfectar. El jugador pasa por el punto de control de salida, vuelve a coger su gel, sus guantes y su mascarilla, coge el coche y fuera", relató Pérez en referencia al protocolo de entrada de los futbolistas que, junto al cuerpo técnico han alabado estos días a los operarios del club por su trabajo.
Quienes entran al estadio no pueden acercarse a otra persona a menos de dos metros y todo está controlado por un trabajador de LaLiga: "No hay contacto, no se puede tener contacto entre ellos ni entre nosotros, el contacto como sabéis es de dos metros. Se está haciendo un protocolo estricto, pero se está cumpliendo. Es riguroso, pero es la única manera de que esto salga bien. Cada día es un reto, porque quieras o no surgen historias en las instalaciones y no te puedes saltar nunca el protocolo. Es una prueba de fuego. Tenemos el inspector de LaLiga, que nos ayuda bastante, está siempre con nosotros y vamos de la mano todos. Tiene que ser así.
"En estas primeras fases no se utilizan los espacios cerrados. Ahora mismo son todo espacios abiertos, es bastante más llevadero. Cuando empecemos la otra frase será otro reto que tenemos que afrontar. Empezaremos algo más grupal, pero también escalonado. Tendremos que estar desinfectando los vestuarios y se utilizarán todos los vestuarios de las instalaciones; son seis vestuarios y va a ser algo más complicado", dijo en referencia al paso a la siguiente fase.
Los entrenamientos necesitan más tiempo del habitual por los pormenores de limpieza individual: "Cada valla, cada cono y cada balón está desinfectado por jugador. Las instalaciones están divididas en dos partes. Está el campo 1 y el campo 2, acceden a una parte del parking señalizada y no se mezclan. Los del campo 1 y el campo 2 ni se cruzan", manifestó y agregó: "Se supone que el último entrenamiento puede ser a la una y media, y el siguiente es a las seis, pero nosotros no terminamos de desinfectar hasta las nueve de la noche, que termina el último entreno. Y seguimos limpiando el gimnasio porque tenemos que dejarlo todo preparado para el día siguiente y la verdad es que no paramos. Vamos con turnos, pero siempre hay limpieza. También los trabajos del césped, que hay que tratarlo porque le estamos dando ahora más uso".
Por último, Javi Pérez habló del aspecto anímico de la situación: "Hay más unión. Estamos más cerca, pero no tan cerca. Por los protocolos de seguridad tenemos que guardar las distancias, pero convivimos más con ellos. Estamos atentos a ellos, especializados en ellos. Donde va el jugador, vamos nosotros detrás. Convivimos más con ellos. Es agradable volver a estar con los compañeros, hay buen ambiente, sonrisas… Es especial".
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