Dioni Villalba y un dejà vú de su último partido en Primera División

El fútbol da muchas vueltas y más en una carrera completa, puesto que suelen rozar las dos décadas en la categoría sénior y eso hace que, salvo en contadas ocasiones, los jugadores tengan la ocasión de defender los colores de varios clubes debido a las circunstancias propias e inherentes del balompié a nivel competitivo.

Una trayectoria que ha tenido bastante recorrido y muy curioso además es la de Dioni Villalba, que se convirtió en el máximo artillero en la historia de la categoría de bronce del fútbol español tanto bajo la denominación de Primera Federación como combinando esta con la ya extinta Segunda B y, además de todo esto, también ocupa la décima plaza en la tabla clasificatoria de máximos goleadores históricos de la segunda de estas competiciones.

A pesar de su largo y exitoso recorrido por el balompié semiprofesional, el delantero oriundo del Puerto de la Torre ya había gozado de varias oportunidades previas como profesional, aunque no pudo aprovecharlas por diversos factores ni en España ni fuera donde no tuvo una buena experiencia y decidió volver a su nación natal para desarrollar su carrera.

Durante los primeros años de carrera de Dioni Villalba, el delantero malagueño estuvo jugando una temporada en el filial del Deportivo de La Coruña y anotó 13 dianas en 31 compromisos ligueros en la ya extinta Segunda B. Su buen rendimiento como el punta de lanza de la ofensiva del Deportivo Fabril provocó que Miguel Ángel Lotina posase sus ojos sobre él.

Su debut en Primera División tuvo lugar el 23 de septiembre de 2010, cuando jugó tan solo 23 minutos ante el Villarreal en casa del submarino amarillo. Tras esto, tuvo dos oportunidades más saliendo desde el banquillo para verse las caras ante el Osasuna y la UD Almería en la que era su casa en aquel entonces, Riazor.

No obstante, su breve paso por Primera División acabó con la mayor oportunidad que había tenido hasta el momento, ya que se despidió del primer equipo y de la élite del fútbol nacional en la que fue su casa como titular y jugando contra el Málaga CF, su equipo actual y el club de su tierra natal al ser del Puerto de la Torre.

La actuación de Dioni Villalba no fue muy destacada en un compromiso liguero que los gallegos lograron vencer por 3-0, puesto que jugó 69 minutos y vio una cartulina amarilla antes de ser sustitiuido por Pablo Álvarez, que puso el tercer tanto de los locales en el luminoso en el minuto 83 de partido.

El primer equipo de la entidad de la Costa del Sol llegó a Riazor con Manuel Pellegrini sentado en su banquillo y con una plantilla previa a la llegada de los fichajes que terminaron de conformar la plantilla que clasificó a los andaluces a la UEFA Champions League y le dio al club de Martiricos sus mejores años.

El once del chileno aquel día para hacer frente al Deportivo de La Coruña fue con Francesc Arnau en portería, Jesús Gámez, Weligton, Stadsgaard y Mtiliga en defensa. En la medular, estaban Francisco Portillo, Sandro Silva, Eliseu, Recio y Duda, mientras que estaba el marroquí Nabil Baha como punta de lanza.

De esta manera, el máximo goleador de la categoría de bronce decía adiós a la élite del fútbol nacional, aunque todavía tendría un último servicio a las órdenes de Lotina, ya que jugó en Copa del Rey ante el Córdoba CF en la victoria de los gallegos por 3-1.