Killian Tillie, horas claves en Málaga

El ala-pívot francés Killian Tillie (26 años y 2.08 metros) ha regresado este martes a Málaga para pasar más pruebas físicas relacionadas con sus problemas en espalda y tobillo que le han tenido dos años fuera de partidos oficiales, aunque ya lleva meses trabajando a buen nivel y reapareció en la Summer League de Las Vegas con la NBA. Las primeras que se realizaron la pasada semanano revelaron ningún problema. El jugador volvió a su país para casarse en Cannes el domingo y ahora está de regreso en la Costa del Sol.

Si todo está en orden, este miércoles pasaría el reconocimiento rutinario (cardíaco y analíticas variadas), como cualquier otro fichaje, para posteriormente, de no haber problema, estampar su firma como jugador del Unicaja. Así que son horas claves para tener la certeza de si el jugador parisino formará parte de la plantilla cajista para la próxima temporada. El jugador ha aceptado el exhaustivo reconocimiento médico como premisa para firmar a un acuerdo, convencido de que tras un calvario de dos años ya está plenamente recuperado para la práctica del deporte de alto nivel. Ya pasó los filtros de la NBA para jugar la citada liga de verano. “No fue el momento adecuado, pero ya no quiero pensar más en eso”, dijo Tillie sobre la lesión y tras jugar en la Summer League: “Pasé página y estoy feliz de estar en la cancha. Me sentí muy feliz de volver, porque habían sido dos años y medio sin nada. Solo miraba televisión y fue muy divertido volver a jugar".

Tillie es un jugador que en su etapa junior fue considerado proyecto top en Europa, habitual de las categorías inferiores de Francia, con quien ganó medallas antes de formarse en la NCAA en Gonzaga, la universidad de Domantas Sabonis. De ahí, tras no ser elegido en el draft, saltó a la NBA con Memphis Grizzlies, con quien jugó 54 partidos repartidos en dos temporadas, además de unos cuantos con el equipo vinculado de la G-League. En Spokane, la ciudad de Gonzaga, ha realizado su recuperación.

"Creo que es un jugador que estaría en NBA, si no hubiera sido por sus lesiones, eso es así. Un jugador que puede jugar de 5, que puede jugar de 4, con muy buen toque cerca del aro, tiene un toque de manos excelente, tiene muy buena mano, tiene un IQ muy alto, sabe jugar muy bien. Es un jugador que yo siempre digo que muchas veces no se le ve, porque su talento lo pone al servicio del equipo, no lo pone al servicio de sí mismo. Entonces es un jugador que hay que ver jugar, no hay que ver la estadística, hay que verle jugar y ver cómo juega su equipo cuando está él. Sin ir más lejos no tiene más que ver Gonzaga cuando estaba él allí y cuando desapareció por la lesión, lo que pasó. Pasó de ser uno de los más favoritos a quedarse fuera del sweet 16. Entonces yo creo que es un jugador que, si este proceso de ayudarle funciona, aparte de que lo vamos a relanzar en su carrera, creo que nos puede ayudar mucho", aseveraba Ibon Navarro sobre el jugador francés la pasada semana, mostrando su entusiasmo por su posible fichaje.