Loren y Pellicer, una conversación pendiente

Si la temporada pasada el Málaga ya sabía a finales de abril a ciencia cierta en la categoría que competiría, en esta ha habido que esperar hasta la segunda mitad de junio. Con un final feliz, tremendamente feliz. Pero el bendito ascenso de categoría implica que no hay mucho margen de maniobra para la temporada próxima. Y es que para el 16 de agosto está previsto el inicio de la temporada en la Segunda División, Liga Hypermotion es el nombre al que habrá que acostumbrarse. O sea, que no hay espacio para las vacaciones, que deberán ser cortas. Para la semana del 8 al 15 de julio se prevé que el equipo vuelva a trabajar. ¿A las órdenes de quién?

“Sergio Pellicer, Sergio Pellicer”, fue un cántico recurrente durante las celebraciones del ascenso. Hubo algún tímido conato durante la peor racha del equipo de pedir su dimisión, pero la realidad es que su trabajo, después de no haber podido resucitar el año pasado a un equipo terminal, ha tenido un premio gordo con el ascenso. Detener la caída y desarrollar el proyecto con gente joven era la misión. Y, sorteando la palabra tabú durante varios meses, llegó el regreso.

Ahora hay que tomar decisiones con esa premura y la del entrenador es la primera. Loren y Pellicer tuvieron varias imágenes icónicas a lo largo de la jornada. Un abrazo con el castellonense llorando minutos después, la foto de los dos en el autobús con la sensación del deber cumplido. Los dos han hecho declaraciones en las que ha reconocido que no siempre han pensado de la misma manera a lo largo de la temporada, pero que es algo que también debe ocurrir, que no haya uniformidad de criterios siempre para el desarollo colectivo.

“¿Depende el futuro de Pellicer de lo que ocurra en el play off? No. ¿Es la primera opción? Yo sé qué voy a hacer el año que viene, pero no lo voy a decir”. Fueron las respuesta de Loren Juarros a preguntas de Málaga Hoy en una entrevista que concedió antes de las eliminatorias para lograr el ascenso. No quería soltar prenda el burgalés sobre lo que iba a hacer con el entrenador aunque ponderaba el trabajo que había hecho el castellonense en este tiempo. Un entrenador que conozca mejor tanto la casa como los chavales que vienen por debajo es difícil encontrarlo. Ya es ver si las dos partes coinciden en la visión del proyecto que viene. Es una conversación pendiente que tendrá lugar en los próximos días para determinar el futuro.