La puesta a punto, en una fase delicada

El Málaga empezó ayer en grupos de 14 e informó de que tres jugadores se entrenaron al margen por precaución

Mientras, el Huesca recibía charlas tácticas en medio de un pinar

El preparador físico blanquiazul explica diferencias en los métodos de entrenamiento

Parte de la plantilla del Málaga durante el entrenamiento de ayer en La Rosaleda. / LaLiga
Adriano Espinal

27 de mayo 2020 - 07:20

El Málaga estrenó ayer la posibilidad de unir a 14 efectivos a la vez en las sesiones de entrenamiento. La pequeña pretemporada que sirve para poner a punto a los futbolistas ante el inminente retorno de la competición está siguiendo pasos inversos a una pretemporada normal en lo referente a organización y a poco más de un par de semanas para que vuelva el fútbol, las circunstancias especiales en las que se ejercitan los futbolistas hacen de esta fase de entrenamiento una de las más delicadas, crucial para afrontar los días de entrenamientos completos.

De hecho, el Málaga informó de que tres jugadores se ejercitaron al margen de los grupos por precaución, para prevenir posibles lesiones en función de las molestias y los antecedentes físicos de cada uno de ellos. Precaución.

“Hemos tenido que reinventarnos. Tenemos que preparar a futbolistas que han estado dos mees confinados en sus casas, haciendo ejercicios que se les mandaban. Prepararlos para jugar dos partidos por semana no se puede hacer ni con entrenamientos individuales, ni con grupos de diez ni de 14, tienes que jugar al fútbol. Nos lo están poniendo muy difícil, sin amistosos. Pero bueno, todos tenemos las mismas condiciones”, explicaba en Cope el preparador físico del equipo, Enrique Ruiz que además señalaba una particularidad importante en la manera de proceder en estas sesiones: “Normalmente en las pretemporadas se hace al revés: se empieza con situaciones más amplias, con mayor números de situaciones, el jugador interviene menos, hay menos acciones de alta intensidad. Luego se pasa a partidos más reducidos donde hay más intervenciones y más acciones específicas de golpeos, frenadas, aceleraciones, que son acciones más intensas. Ahora, por el límite de jugadores lo tenemos que hacer al revés”.

“El principal objetivo es que no caiga ninguno y más nosotros con el número de fichas que tenemos. Es muy difícil que no hubiese ninguna lesión”, dijo y explicó su visión del juego que está por venir: “Esperamos un ritmo de juego menor por todo lo que te comento. Además todo lo que conlleva jugar sin público: aspecto motivacional y de concentración. Hay menos concentración, más goles, es otro fútbol, un fútbol nuevo”.

Al menos Ruiz confirmó que tenían planificada una vuelta de los partidos para las fechas que al final se podrán dar: “Hemos planificado sabiendo que en cualquier momento teníamos que cambiarlo. Lo hicimos sobre los supuestos de que se podía arrancar el 12 o el 20.”

El Málaga seguirá hoy con sus sesiones de trabajo, mientras su próximo rival también se entrena de manera peculiar. El Huesca publicó ayer una foto de la plantilla en un pinar donde el cuerpo técnico había instado una pantalla para poder realizar una sesión de vídeo conjunta cumpliendo todos los parámetros de seguridad que se exigen en esta fase de desescalada. “¡Es tiempo de reinventarse!”, escribió el Huesca.

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