Manu Molina renovará si juega el 50% de los minutos con el Málaga

Manu Molina, según pudo saber Málaga Hoy, tiene una cláusula en su contrato por la que ampliará con el Málaga CF si juega el 50% de los minutos de LaLiga Hypermotion (también influiría si se alcanza play off). Habitualmente este tipo de puntos contractuales se vinculan a partidos disputados. De hecho, el propio jugador pensaba que era así, pero este caso es muy particular. Son 42 jornadas si no se promociona, por lo tanto tiene que cumplir un alto número de partidos completados, pero al ritmo que lleva en lo que va de campaña, lo logrará.

Ha estado en el verde en lo que va de competición liguera 1.501 y ante el Sporting seguirá aumentando el número. El mínimo es de 1.890 si no se llega a la pelea por el ascenso. Lo tiene en su mano salvo que una lesión inoportuna lo impida porque en lo que es rendimiento no cabe lugar a la duda.

De cualquier manera, el jugador onubense tiene otra idea en su cabeza, se encuentra en un momento dulce, tanto en lo personal como en lo futbolístico. Su deseo es que el club le premie y se siente a negociar un nuevo acuerdo, que le vincule a Martiricos por más de una temporada, que es lo que conseguiría con la disputa de esos minutos.

Loren Juarros también tiene presente esta idea y se sentará llegado el momento con el representante del futbolista para estudiar su caso. En la entidad están contentos con su aportación dentro y fuera del césped. Aunque hay que recordar que acaba contrato (cláusula al margen) el próximo 30 de junio y que desde el 1 de enero puede escuchar a otros.

De hecho, hay ya varios equipos preguntando por su situación. La temporada que está haciendo, actuando como brújula del Málaga y mostrando un nivel físico envidiable, ha levantado el interés de algunos conjuntos de Segunda División con vistas al curso que viene.

Pellicer y el mercado

Con una plantilla larga, con 28 jugadores operativos con los tres del filial (Izan, Aaron y Antoñito) integrados de pleno derecho arriba, el Málaga debe hacer huecos para reforzarse en el mercado invernal. Se le cuestionaba por este particular a Sergio Pellicer, que quería poner el foco en el partido de Gijón: "Vamos a esperar, vamos a hacer los 30 puntos primero", terciaba. Aunque dejó claro que para aumentar la competencia y el equilibrio interno puede ser bueno esa inyección externa. "Todos queremos mejorar. Estoy contento con los chicos, es cierto que no pueden jugar todos, igual hay que buscar ese espacio a muchos jugadores que podían tener minutos que ahora no los tienen. Tengo cinco centrales, Moussa y Murillo trabajan increíble, pero no están jugando". En esa posición de central están rotando Einar, Nelson y Álex Pastor en la titularidad y los dos canteranos apenas están teniendo opciones, su última participación fue en Copa del Rey en La Línea, cuando se perdió con el Estepona. La salida de uno de los dos, posiblemente Murillo al tener contrato más largo aunque todo dependerá del interés que haya y la idoneidad del destino.

También hay overbooking en la parte central. Hay seis jugadores ahora mismo (Manu Molina, Luismi, Ramón, Izan, Juanpe y Sangalli) para dos puestos en el medio según la estructuras de equipos que está empleando ahora mismo el técnico. Así que puede también haber movimientos ahí. "Tengo muchos medios centros también, pero tenemos que estar en alerta, todos incómodos, el primero el entrenador. Venimos de una victoria, le dije que lo disfrutáramos pero podíamos haber tenido un mal día. Cuando venga esa derrota, que tengamos esa paciencia. Pero en otros sitios viene la impaciencia. Siempre queremos lo mejor, pero hay que tener calma", quería transmitir Pellicer, que suele referir que los que vienen pueden ayudar pero los que van a marcar el nivel son los que están. Otro de los que puede salir es Haitam, que necesita minutos tras sus lesiones y en el que el club tiene mucha confianza, como publicó este periódico. Hay alguna oferta de Primera RFEF. Se sueña con un atacante que eleve el nivel, pero el mercado de invierno es el que es y el dinero tampoco abunda, así que desde dentro aboga por el realismo.