Mundial 2030 La Rosaleda: Claves del estadio de atletismo, uso y gradas supletorias

El concejal Borja Vivas aclaró dudas acerca de ambos proyectos y no cierra ninguna puerta

El problema del aforo

Borja Vivas, concejal de Deporte / Javier Albiñana

 El concejal de Deporte del Ayuntamiento de Málaga, Borja Vivas, habló acerca del traslado de La Rosaleda al estadio de atletismo Ciudad de Málaga por las obras del Mundial 2030: “La decisión hay que tomarla cuanto antes porque nos jugamos mucho y las obras tienen que acometerse. Lo de que el Málaga tiene que salir del estadio es algo que se está estudiando y, aunque parece una frase hecha, buscaremos lo mejor para el club, la ciudad y los usuarios que usan las instalaciones. El Málaga tiene que salir beneficiado, es fundamental. Y también ver los costes, que eso al final repercute. Montar en el estadio de atletismo tendrá un coste, seguir en La Rosaleda otro y buscar otra alternativa, otro también. Zaragoza ha buscado otro modelo. Estamos en esa fase de estudio y medición y ver cuánto cuesta cada cosa. Intentaremos buscar ese equilibrio, pero que sea con el menor impacto para todos”.

Lógicamente, con los plazos que quedan, la palabra “premura” hizo acto de presencia. “Vamos a intentar cumplir los requisitos que pide la FIFA. Lo que necesitamos es ponernos en marcha porque los plazos corren en nuestra contra y dar tranquilidad y demostrar que en Málaga se hacen las cosas bien”, comentó Vivas, que apuntó sobre las gradas supletorias: “La alternativa si se hace en el Ciudad de Málaga es completar el aforo para llegar a lo más parecido al de La Rosaleda sabiendo que es complicado. Pero viendo la dificultad que tiene, como ya pasó en el Carpena. Yo no entiendo arquitectónicamente, pero son terrenos complicados. Es ver los costes y comparar en la balanza. Hay que mirarlo todo”.

Sobre los atletas que usan las instalaciones, Vivas negó categóricamente que les vaya a afectar de algún modo y se vaya a perder la pista de atletismo así como también recordó que el equipo de rugby juega allí. “No hay que verlo como una amenaza sino como una oportunidad para reflotar otros proyectos. Sé que esto genera controversia, pero con planificación y claridad, todo se llevará mejor”, comentó.

En la comparación con La Romareda, sobre la que ya se trabaja, matizó Vivas que La Rosaleda y su entorno tienen otras complejidades: “Somos tres administraciones, aunque todos vamos en la misma dirección. Es cierto que el alcalde tiene mucho interés que cuanto antes se vislumbre y haya una guía a seguir. Se está buscando la fórmula de que venga un privado, que sería idílico que viniera con el dinero y lo hiciera, pero viendo la situación que hay entendemos que las administraciones tenemos que empezar el proyecto para que alguno se pueda unir y al final esto sea un éxito. Esto trasciende más allá del fútbol, es una oportunidad para la ciudad, que sea algo más que fútbol. No tiene sentido que se use dos veces al mes. Hay que buscar el equilibrio con la convivencia con el resto de ciudadanos, para que no pase como en el Bernabéu. Son muchas variables. Pero el modelo de negocio de un pabellón o un estadio tiene que ir más allá del evento de turno”.

La cifra de aforo que habrá en La Rosaleda tras la obra, matizó el concejal, no es fácil por la cercanía al río Guadalmedina, así que no dio datos concretos pero dejó caer que está todo controlado por parte de las instituciones en este aspecto.

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