Este viernes se producía un encuentro entre el Ayuntamiento de Málaga, Diputación y Junta de Andalucía, propietarias de La Rosaleda, para abordar la reforma del estadio tras confirmarse Málaga como sede del Mundial 2030. Una mesa formada por Francisco de la Torre, Francisco Salado y Patricia del Pozo, consejera de Cultura y Deporte de la Junta. "Las tres administraciones han quedado emplazadas a continuar trabajando para avanzar en el proyecto de transformación del estadio de fútbol, que, entre otros aspectos, incluye su remodelación para la ampliación de localidades", según informaba la Diputación. La Rosaleda, como la mayoría de los estadios elegidos, se tiene que someter a una transformación poderosa. Sobre el mismo recinto se expandirá un nuevo coliseo con capacidad para unas 45.000 personas y que se llevará por delante el Anexo y el IES Guadalmedina para empezar. El proyecto, según las últimas estimaciones, se estaba por encima de los 260 millones de euros. Pero las tres partes deben atarlo en estas reuniones. De la Torre afirmó hace unas semanas que "si La Rosaleda se tiene que hacer de 50.000 o 75.000 localidades, mejor que mejor", debate surgido ante la malagamanía que ha florecido en verano, que deja el estadio corto.

La cuestión es que se pretende llevar esta obra mucho más allá del fútbol y convertir la manzana de La Rosaleda en un lugar donde seguir la expansión del centro y convertirlo en un foco comercial con un hotel de lujo y más servicios. Esta elección afecta a toda la zona, que será sometida a una transformación radical. Para cumplir con lo exigido por FIFA, una parte clave son los accesos, las comunicaciones y, por supuesto, los aparcamientos, que deben llegar a los 5.000. Recientemente desde La Casona se licitó un estudio por 300.000 euros para valorar las posibilidades comerciales y atraer capital privado.

Caso Horta: 25 de septiembre, fecha para la vista en el TAS

Se va acercando a su fin el dichoso caso Horta, que tiene bloqueados unos millones de euros que cambiarían de manera notable la realidad de un Málaga CF intervenido judicialmente, limitado en el plano económico aunque saneado. El director general de la entidad de Martiricos confirmó el pasado lunes en Área Malaguista que el próximo 25 de septiembre es la fecha fijada para la vista en Suiza, en el TAS (Tribunal de Arbitraje Deportivo), donde se verán las caras con el Sporting de Braga, que apura con todas las herramientas a su alcance el pago incluso después de una resolución de la FIFA ( del 1 de septiembre de 2023).

Hay que recordar que el Málaga tiene una prisa relativa porque mientras pasan las hojas del calendario siguen corriendo los intereses a su favor y aumentando la cuantía a percibir. "El juicio es el 25 de septiembre, miércoles. Ese día es la vista y creemos que para finales de enero estará, eso es lo que nos han comunicado", decía en 101 Televisión Málaga el mandatario blanquiazul.

"Nosotros ganamos unos 6,8 millones más intereses. Nosotros calculamos que pueda resolver el TAS en mayo 2025. En total con los intereses, pues creemos que se puede ir alrededor de 13,5 millones, pero está firmado con los agentes del jugador, que ellos percibirán un 40%", aseguraba el propio Kike Pérez en los micrófonos de SER Deportivos Málaga hace unos meses.

Con la oposición constante que ha sido el club que preside Antonio Salvador y la cantidad de obstáculos que ha puesto en el camino, a muchos les sorprende que el Málaga se sentase con ellos para tratar el traspaso de Roberto Fernández. Especialmente por tratarse de una cantidad que parecía realmente corta para el potencial del delantero y los números que había firmado en Primera RFEF.