La Mancomunidad Occidental apuesta por una nueva desaladora para garantizar el abastecimiento

Marbella/La Mancomunidad de Municipios de la Costa del Sol Occidental ha destacado la necesidad de construir una segunda desaladora de 50 hectómetros cúbicos, similar a la capacidad del embalse de Istán, para garantizar el abastecimiento en la comarca en los próximos años, según ha declarado el presidente de la institución, Manuel Cardeña.

La sequía es uno de los principales retos a los que se enfrenta el organismo en su nueva legislatura, marcada por las restricciones en el consumo decretadas por la Junta de Andalucía, que obliga a los ayuntamientos de la Costa del Sol a reducirlo en un 10% desde el pasado mes de junio.

“El objetivo más importante es garantizar el abastecimiento en la Costa del Sol, estamos peleando con una sequía muy grave endémica, y tenemos que intentar poner los medios para garantizar el abastecimiento a corto y largo plazo”, ha valorado.

Cardeña ha resaltado la necesidad de plantearse la construcción de una nueva desaladora, pese a las obras de infraestructuras que está acometiendo la Junta de Andalucía, como la reforma de la de Marbella, que “la va a poner en torno a 20 hectómetros cúbicos”.

“Hace falta en la Costa del Sol una segunda desaladora para intentar garantizar el abastecimiento con una capacidad de 50 hectómetros cúbicos, y que lo garantizara para los próximos años, que no estuviéramos siempre tan ajustados”, ha remarcado.

El embalse de Istán se encuentra al al 40%

En este sentido, ha abundado en que el embalse de Istán cuenta con una capacidad de 57 hectómetros cúbicos, por lo que ha considerado que el proyecto es “idóneo”, ya que “sería como un pequeño pantano” y una alternativa a la idea de construir un nuevo embalse en la zona, que es “complicado”. La falta de lluvias ha generado que aquel se encuentre en la actualidad “alrededor del 40%”, por lo que Cardeña ha subrayado que el abastecimiento está garantizado hasta el mes de noviembre si no hay precipitaciones “sin ningún tipo de restricciones, salvo las recomendaciones que ha hecho la Junta”.

El crecimiento de la población en la Costa del Sol es uno de los motivos que sustentan esta iniciativa, que según ha estimado, ronda entre los “400.000 habitantes estables”, con picos de 500.000 en temporada estival; así como es necesario garantizar el abastecimiento para el “desarrollo de nuevos proyectos estratégicos y urbanísticos”.

La Junta inicio el pasado mes de julio las obras de reforma de la desaladora de Marbella, basada en “el cambio de las membranas por otras más modernas, que consumen menos electricidad y son más eficientes”, lo que va a permitir “pasar de una producción de 7 hectómetros cúbicos a 11”. El objetivo es “la modernización” y “poder llegar a los 20 hectómetros cúbicos, que sería una cantidad idónea”.

Otro de los grandes proyectos autonómicos es la denominada “autovía del agua”, que contempla “el cambio de la tubería de abastecimiento de la Costa del Sol” desde Guadiaro hasta Fuengirola, y que ha recordado que “la Junta está licitando los proyectos”. Otro es la retirada de los colectores del litoral, asegurando que en septiembre se ejecutarán los de El Bote de Fuengirola y San Pedro Alcántara.

Normalizar el uso del agua regenerada es otro de los aspectos en los que trabaja la Mancomunidad para combatir la sequía, de la que produce “40 hectómetros de los que invertimos unos 7 “, principalmente para el riego de los campos de golf, pero que la institución quiere extender a otros usos, como el riego y el baldeo de zonas verdes y calles. Para ello, ofreció el pasado mes a los ayuntamientos adherirse y solicitar su utilización, por lo que “estamos elaborando un protocolo” para su distribución, al que deberán someterse los municipios.

“La idea es que los ayuntamientos asuman ese protocolo, que no es fácil porque requiere de un cambio, tanto de organización como laboral, pero hay mucha conciencia y muchas ganas de hacerlo”, remarcó Cardeña, asegurando que los 11 municipios “están trabajando en la aplicación de ese agua regenerada de una manera o de otra” y que espera que sea una realidad “antes del final del verano”. “El siguiente paso es que haya una red de distribución y de riego diferente del abastecimiento, y ahí se está trabajando”, incidió el responsable de la institución supramunicipal.