Padres de los colegios Vargas Llosa y Xarblanca, indignados ante la tardanza de la instalación de las prefabricadas en Marbella

Marbella/Los padres y madres de los colegios Mario Vargas Llosa y Xarblanca de Marbella se han concentrado este miércoles para denunciar públicamente que aún no haya comenzado la instalación de las aulas prefabricadas para los alumnos que cursarán el primer curso de la ESO a partir del próximo lunes 16 de septiembre mientras se construye el nuevo instituto. “Quedan ocho días laborables y hasta hoy no ha aparecido ningún operario ni ninguna máquina para preparar y adecentar el terreno”, denuncian en un comunicado que el portavoz del AMPA La florida, Jorge Gil, ha leído esta mañana ante los medios de comunicación.

“Hemos solicitado información al servicio de Planificación de la Delegación de Educación y nos han informado de que los trabajos comenzarán el lunes próximo, una semana antes del comienzo del curso. Así llevamos semanas, solicitando información y dándonos fechas que se han ido consumiendo sin movimiento alguno. Nuestra paciencia se ha agotado, estamos cansados de que nos mientan de manera reiterada”, agregan.

A la convocatoria han acudido más de medio centenar de padres, que se han congregado junto a la parcela en la que está previsto que se instalen los módulos, en los que estudiarán más de 70 niños egresados de ambos centros públicos mientras se desarrollan las obras del nuevo instituto de Las Chapas.

Se trata de una solución provisional para estos alumnos debido a la falta de plazas de secundaria en la localidad y evitar así que estos sean repartidos en hasta tres institutos diferentes como ya ocurrió con los primeros 25 niños egresados el pasado curso del Mario Vargas Llosa. Además, esta solución provisional garantiza a los padres la adscripción del colegio al futuro instituto. Sin embargo, estos se muestran indignados ante la falta de respuesta de las administraciones ya que a poco más de una semana aún no se han iniciado los trabajos. “Estamos sufriendo una situación muy injusta. Nuestros alumnos de 1º de la ESO ya tuvieron que estudiar en aulas prefabricadas en su etapa de infantil y nueve años después, vuelven a prefabricadas”, señalan.

“Es un daño colateral que asumimos ante la imposibilidad de una solución acorde a la normativa actual y a una enseñanza de calidad, que vaya por delante, la inexistencia de suelo educativo en la zona norte de Marbella también fue culpa de las distintas administraciones competentes que no actuaron con la debida diligencia cuando sabían que el problema acabaría llegando”, apuntan.