Santiago cuelga el mandil

El restaurador cesa en su empresa tras 65 años de trayectoria profesional l El establecimiento cerrará el 30 de septiembre

El hostelero Santiago Domínguez. / Mª Jesús Serrano
Mª Jesús Serrano

29 de septiembre 2021 - 07:20

Marbella/El restaurador Santiago Domínguez, que regenta la marisquería con el mismo nombre más antigua de Marbella Marbelladesde el año 1972 en el paseo marítimo de la ciudad, cuelga el mandil tras 65 años de trayectoria profesional dedicada a la hostelería, que cerrará sus puertas el próximo 30 de septiembre.

La decisión la lleva masticando “unos 3 o 4 años”, por lo que la ha adoptado “con naturalidad”, a la espera de ese merecido descanso. “No voy a llevarme ningún susto, ya lo tengo asimilado” y “mi cabeza no va a sufrir alteraciones”, ha relatado el restaurador respecto a su marcha del sector, aunque no descarta el asesorar a otras empresas, pero “muy tranquilamente y olvidándome de esas 15 horas que he venido echando prácticamente desde que nací”.

“De momento, voy a cesar en mi empresa y después de descansar 2 meses, tengo algunas propuestas de asesor”, ha señalado Domínguez, remarcando que se lo plantea “más que nada para entretenerme por el hecho de que si hay una profesión que te gusta como es la mía, entonces quizá cortar de golpe podría ser demasiado fuerte”.

Ya me pesa mucho el trabajo. A mí me gustaría morir en esta profesión porque siempre me ha gustado mucho, pero los años pesan mucho y ya no quiero morir en los fogoses, quiero poder disfrutar los días que me queden”, ha declarado Domínguez, quien ha asegurado que no conoce “lo que son las vacaciones, un descanso o lo que es comer de un tirón y todo eso al final agota mucho. Ahora lo que quiero es cuidar un poco de mí mismo”.

El paso de los años no perdona, y el hostelero dice adiós entre abrazos y visitas de sus clientes, que estos últimos días se acercan hasta la marisquería para despedirse del restaurador y ofrecer muestras de cariño. “Tendré que descansar, que es lo primero que quiero, y después poder visitar algunas cosas y países que ya vengo deseando desde hace muchos años y que siempre lo he ido postergando, unas veces por una cosa y otras por otra, pero siempre por razones de trabajo”, ha subrayado.

Santiago Domínguez posa junto a una foto de su juventud. / Mª Jesús Serrano

Así, el primer viaje que proyecta es a Laponia finlandesa, que visitó hace décadas a causa de una “novia de Estocolmo” que tuvo, así como reencontrarse con su hijo, que vive en Suecia y “diseña los robots que usan los cirujanos”. Según sus palabras, la pasión con la que ha desarrollado su profesión ha sido la clave del éxito de su restaurante, que es un “referente” gastronómico incluso a nivel internacional, y que actualmente ha asegurado que “hay muchas empresas interesadas” en seguir con el negocio.

Por el establecimiento han pasado “mil o más” personalidades como el actor Orson Welles, Onasis, Jacqueline Kennedy Anthony Quinn, el Rey Fahd de Arabia Saudí, el expresidente de Brasil Lula da Silva, los Reyes de Bélgica, Sophia Loren, Christopher Lee, Gina Lollobrigida o Jean-Paul Belmondo, entre otros. De este último ha recordado una anécdota relacionada con los “paparazzi”, que buscaban al actor y a su novia, y pidió a Santiago que los escondiera, por lo que el hostelero optó por “meterlos en la cocina y darles una bata blanca y un gorro y ponerlos a batir”, pasando así desapercibidos.

Si yo volviera a nacer, volvería a hacer lo mismo porque he hecho lo que me gustaba con mucho esfuerzo y muchísimo trabajo, pero he hecho lo que me gustaba. Y me lo paso muy bien y aunque esté en la cocina, salgo de vez en cuando y saludo a mis clientes, a veces me cuentan un chiste y otras veces se los cuento yo y me lo paso fenomenal”, ha relatado.

El restaurador tiene el honor de haber instalado el primer chiringuito de la Costa del Sol en la playa de La Venus de Marbella en el año 1956, donde se sirvieron las primeras cañas de cerveza Victoria de la comarca; posteriormente montó una pista de baile en el mismo para que “las noches fueran rentables” en 1957 y en 1.972 fundó la marisquería Santiago, que cerrará sus puertas el próximo jueves, 30 de septiembre. Su última iniciativa ha sido la creación del Museo del vino la pasada primavera, con más de 2.500 botellas. El establecimiento gastronómico quedará en la memoria de varias generaciones de turistas y residentes.

Más escuelas de hostelería en la Costa del Sol

El restaurador Santiago Domínguez, que regenta la marisquería con el mismo nombre en el paseo marítimo de Marbella, destaca la necesidad de crear escuelas de hostelería en la Costa del Sol para formar a personas capacitadas y no perder competitividad en el sector.

El hostelero ha valorado que actualmente la industria hostelera tiene “un problema de servicio”, ya que “no encontramos gente para trabajar”.

“Desgraciadamente, la hostelería está sufriendo una necesidad de mano de obra que habrá que darle alguna solución. Yo creo que nuestras autoridades regionales o nacionales tendrán que sentarse un día a pensar que la hostelería es la primera industria, entonces habrá que pensar que tenemos que crear a personas capacitadas para poder manejar este tipo de negocio”, ha declarado.

De lo contrario, “podemos ir perdiendo peso en el turismo y no tenemos visión de que se puedan crear otras industrias”, ha remarcado Domínguez, quien ha criticado que “actualmente tenemos muy poquitas y muy pequeñas escuelas de hostelería en la Costa del Sol, una zona que podría emplear a 200.000 personas”, por lo que ha puesto de relieve la necesidad de contar con más centros formativos.

No hay comentarios

Ver los Comentarios

También te puede interesar

Lo último