El despliegue policial en un gimnasio de Marbella con un helicóptero se salda con cuatro detenidos

El despliegue de la Policía Nacional este jueves en un gimnasio de Marbella, próximo al distrito de Nueva Andalucía, se ha saldado con cuatro detenciones por su presunta comisión en delitos diferentes. Varias patrullas uniformadas, con cascos antidisturbios y un helicóptero sobrevolando la zona sorprendió a usuarios de centro deportivo y vecinos de la zona. Si bien, desde la Comisaría Provincial aseguran que se trató de un control rutinario como consecuencia de la puesta en marcha del Plan Marbella para combatir el crimen organizado y la delincuencia común.

El operativo tuvo lugar este jueves 9 de mayo en el Real Club de Pádel de Marbella cuando al menos cinco agentes, uniformados y con cascos antidisturbios, inspeccionaron las instalaciones deportivas. Según las imágenes que grabaron algunos usuarios, unos tres furgones se desplazaron hasta el centro mientras un helicóptero policial sobrevolaba la zona. La Policía Local de Marbella, por su parte, no particó en la intervención, precisaron las fuentes consultadas por este periódico.

'Plan Marbella'

Y es que el asentamiento de numerosas bandas criminales en Marbella ha convertido esta ciudad, en especial aquellas zonas de alto standing, en uno de los puntos calientes de la Costa del Sol; reflejo de ello es el incesante goteo de tiroteosque sus vecinos sufren desde hace unos meses. Por ello, la Policía Nacional, desde hace unas semanas, trata de poner freno con la puesta en marcha un plan que supone un refuerzo tanto de efectivos como de controles "sorpresa".

El denominado Plan Marbella está previsto que se prolongue hasta octubre de este año. A efectos prácticos, supone una mayor presencia de policías uniformados en la vía pública, además de un incremento de controles tanto a conductores de vehículos como a transeúntes con "dispositivos aleatorios en horarios y emplazamientos". El fin, elevar el factor sorpresa.

Una detención, hace un año, en el mismo gimnasio

Cabe recordar que hace poco más de un año, un cliente del mismo gimnasio fue sorprendido por la Policía Nacional cuando se encontraba entrenando al grito de: "¡Al suelo!". Una denuncia interpuesta por su expareja por supuestamente acosarla fue la que llevó a los agentes a desarrollar esta rápida y forzosa intervención.

En este caso, actuaron varios policías en la detención del individuo, que se encontraba en la zona de máquinas del recinto deportivo, pese a que vestía ropa y zapatos de calle, como grabaron algunos testigos de la escena. "¡No he hecho nada!", "¡No me resisto!" fueron algunas de las frases que este hombre profirió mientras los agentes lo conducían hasta un vehículo para, posteriormente, trasladarlo a las dependencias policiales.