Los empleados del hotel Don Carlos agotarán los plazos de la negociación
La asamblea de trabajadores del hotel opta por terminar el plazo de consultas del ERE
Marbella/La asamblea de trabajadores del hotel Don Carlos, ubicado en Marbella, ha acordado este jueves agotar los plazos de la negociación que mantiene la plantilla con la propiedad de la empresa, cuyo fin es evitar el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) presentado por el establecimiento turístico, del que quedan unos días del período de consultas, según ha destacado el presidente del comité de empresa, Marcos Riveros.
Así, la decisión se ha tomado tras trasladar la Consejería de Empleo de la Junta de Andalucía a los trabajadores durante la celebración de la asamblea que la empresa “está para cambiar el redactado, pero hasta que no lo veamos no sabemos si el fondo se ha cambiado o no”, ha asegurado.
“Se ha acordado que vamos a esperar a que la autoridad laboral se pronuncie, que es la que marca los tiempos de la negociación y la que ha pedido entrar en ella para intentar romper el escollo que tenemos. Cuando la empresa responda favorable o desfavorablemente, tendremos que asumirlo y actuaremos en consecuencia”, ha avanzado el representante sindical.
La mediación de la Consejería de Empleo andaluza ha estado presente desde el inicio del conflicto y el pasado miércoles la delegada en Málaga, Carmen Sánchez Sierra, se comprometió con los representantes sindicales a contactar con el hotel para buscar el consenso.
Asimismo, la manifestación convocada para mañana viernes contra la precarización del sector turístico ha quedado "desconvocada", ha remarcado Riveros.
La plantilla del Hotel Don Carlos ha optado así por acotar los plazos de la negociación del ERE que la empresa presentó el pasado mes de junio, ya que se cuenta con “un mes de período de consultas”, según ha explicado Ramón López, miembro también del comité de empresa.
Sobre el mismo, ha detallado que “se suspendió por 10 días para tratar de acercar posturas” cuando la planta hotelera presentó un escrito de suspensión el pasado 5 de julio ante la Junta de Andalucía, cuyo plazo expiró el pasado día 16, por lo que “ese período sigue corriendo ahora” y “nos quedan todavía unos días de margen para poder negociar y consensuar un texto que satisfaga a todas las partes y poder llegar a la firma del acuerdo”.
Durante la “asamblea informativa”, los representantes sindicales han trasladado a la plantilla “las últimas novedades que hay con respecto a las negociaciones”, ha aclarado López, aunque en un principio estaba prevista para ratificar el acuerdo definitivo presentado por la empresa. En el mismo, ha recordado que “se contempla a partir del 2023 la conversión del Don Carlos en hotel de temporada, pero quiere que se firme hoy el que nos convertiremos todos en fijos discontinuos o contratos a tiempo parcial” para ese año.
“Nosotros decimos que por qué hipotecar en 2020 el futuro de los trabajadores a partir del 2023, cuando tenemos tiempo suficiente para sentarnos, analizar cómo está el sector y cuál es la evolución de la empresa en estos años”, ha valorado el sindicalista.
Ante el “ultimátum” del establecimiento turístico de firmar mañana viernes esas condiciones laborales, los trabajadores piden “que agotemos el período de consultas puesto que está mediando la autoridad laboral en modificar un pequeño párrafo donde se contempla precisamente eso, hipotecar en 2020 el futuro de los trabajadores, pero a partir del 2023”.
“Creo que hay margen todavía para poder negociar y llegar a un acuerdo consensuado entre las partes porque le hemos propuesto a la empresa de aquí al 2023 ERTEs sucesivos sin la pretensión de llegar a los despidos”, lo que “conlleva un ahorro salarial enorme cercano a los 2,4 millones”, ha subrayado.
El ERE tendría un coste empresarial de 5 millones
La aplicación del Expediente de Regulación de Empleo (ERE) presentado en junio por el Hotel Don Carlos, en Marbella, que afectaría a 94 trabajadores de la plantilla fija, tendría un coste empresarial de “casi cinco millones de euros”, según ha valorado el presidente del comité de empresa del establecimiento, Marcos Riveros.
Así, ha estimado que si la planta hotelera aplica finalmente el expediente de extinción ello supondría un coste cercano a los 5 millones de euros entre el pago de las “indemnizaciones de los trabajadores”, además de “la devolución de todas Las ayudas gubernamentales a las que se está acogiendo como la cuota de la Seguridad Social y otras”.
En su opinión, el ERE ahora mismo “no tienen ningún tipo de recorrido porque estamos en un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) por causa de fuerza mayor hasta el 30 de septiembre y que posiblemente se prorrogue hasta diciembre, e incluso, se está hablando que hasta marzo del año que viene”.
En este sentido, ha destacado que “hay una cláusula de salvaguarda” mediante la cual la empresa acogida al ERTE por causas de fuerza mayor “una vez iniciada la actividad, tendría que esperar 6 meses para poder empezar a despedir, por lo que nos meteríamos en octubre de 2021”, ya que el hotel ha comunicado su apertura “en marzo del próximo año”, ha asegurado.
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