Un grupo de empresas marítimas apoya la conexión de la Costa del Sol por barco

Una embarcación navegando.
Una embarcación navegando. / M. H.

Marbella/El Clúster Marítimo-Marino de Andalucía (CMMA) ha mostrado su apoyo al proyecto de la Mancomunidad de Municipios de la Costa del Sol Occidental de unir las localidades costeras de esa franja litoral de Málaga por barco, destacando que la conexión de las ciudades mediante el transporte limpio para favorecer los desplazamientos de los ciudadanos es una tendencia en la Unión Europea, según señala su presidente, Javier Noriega.

Así, ha incidido en que esta fue una de las medidas propuestas a los partidos políticos antes de la celebración de las elecciones municipales del pasado 28 de mayo de 2023 y considera que es una de las opciones o alternativas a la movilidad que existen y que, como explica la Mancomunidad, podría ayudar a desatascar las carreteras.

La iniciativa ha sido planteada por el nuevo presidente del ente público, Manuel Cardeña, tras tomar posesión de su cargo el pasado mes de julio, en base a las propuestas de determinados colectivos empresariales como el hotelero, y ante la búsqueda de soluciones a la movilidad en la comarca.

La Mancomunidad valora así la posibilidad de conectar las distintas ciudades de la Costa del Sol mediante rutas en barco, algo que podría ser factible debido a la existencia de puertos en los centros de ciudades como Marbella, Estepona o Benalmádena, una alternativa para desplazarse que ya se oferta por varias empresas a nivel turístico en la zona.

Así, Cardeña apostó por “hablar de conexiones marítimas entre los municipios para desatascar tanto la AP-7 como la A-7”, la única alternativa de movilidad -por carretera- que existe en la actualidad en la zona más occidental de la comarca, al terminar el tren de Cercanías en la localidad de Fuengirola, y donde el colapso del tráfico es diario.

Para ello, se realizará un diagnóstico sobre la movilidad y la Mancomunidad encargará un proyecto a una consultora especializada mediante un concurso público, una propuesta que según relató la cual “ha sido muy bien acogida por todo el mundo”.

En este sentido, Noriega ha precisado que en el decálogo que la organización CMMA hizo para las pasadas elecciones municipales, se proponía a los diferentes partidos políticos que concurrían a los comicios la “conexión de las ciudades del litoral andaluz mediante el transporte más sostenible y limpio que ofrecen hoy los barcos”.

“El short sea shipping es tendencia en la Unión Europea (UE) y se trata de potenciar el tránsito de mercancías de corta distancia, pero también el de los ciudadanos. Estos itinerarios, además, son ideales para implementar combustibles alternativos y sostenibles”. “Es una alternativa, sin duda, se trata de movilidad marítima sostenible”, ha remarcado el presidente del CMMA.

Según ha valorado, esta idea va en la buena dirección al contar la Costa del Sol con varios puertos de diferente naturaleza en cascos urbanos, ofreciendo una alternativa más a la movilidad de los ciudadanos del litoral malagueño, agregando que la iniciativa podría extenderse a fines turísticos azules o a las mercancías.

El CMMA considera que esta propuesta también podría incluir a la capital y a los municipios de la Costa del Sol Oriental. Asimismo, Noriega ha recordado que los puertos son nudos esenciales para el transporte de mercancías y personas, y podrían ser puntos específicos muy importantes para esta iniciativa e impulsar así la movilidad sostenible entre municipios.

CMMA trabaja en la creación de una red de cruceros costeros

El Clúster Marítimo-Marino de Andalucía (CMMA) participa en la creación de una Red de Cruceros Costeros y Fluviales de los Destinos Náuticos Sostenibles de España (Red CCF), un proyecto conjunto desarrollado a través de la línea de ayuda Experiencias Turismo España con un apoyo económico de los fondos Next Generation de casi 2 millones de euros, en el que también participa Puerto Sotogrande, siendo éstas las dos únicas organizaciones que impulsan la iniciativa en Andalucía, según ha destacado el presidente, Javier Noriega.

En el caso de Sotogrande, socio de CMMA, se pretende actuar en la zona de la Costa del Sol Occidental y el Estrecho de Gibraltar, y una vez puesto en marcha el proyecto, el objetivo es de ampliación del área de actuación, ha señalado.

Así, Sotogrande se constituirá mediante las actuaciones determinadas en los hitos del mismo como base de la Red de Cruceros Costeros y establecerá las rutas con los operadores de turismo náutico interesados, y en coordinación con las acciones en tierra que pondrá en marcha el CMMA. Luego se ampliará la red haciendo nuevas rutas.

El clúster se encargará de realizar un trabajo de estudio del territorio, la planificación estratégica y la viabilidad económica con el fin de permitir diseñar las rutas turísticas que posteriormente serán objeto de desarrollo, de forma que los beneficiarios directos de la mejora de la experiencia turística en Andalucía serán los operadores de turismo náutico de Andalucía, que explotarán comercialmente los itinerarios a los que se dé forma.

En este sentido, a través de las actividades de formación sobre la creación de cruceros costeros náuticos culturales a las empresas que conforman el sector del turismo náutico y la asesoría posterior sobre su implementación que les proporcione el CMMA, la organización les acompañará en todo el proceso de creación del producto, encargándose directamente el clúster de la fase de creación de la red de circuitos terrestres de visita dirigidos a los turistas náuticos, guiada con señalización digital en colaboración directa con los cruceros culturales que desarrollarán Puerto Sotogrande y la Ciudad Autónoma de Ceuta.

El proyecto de la RED CCF se implantará en diez comunidades autónomas y además de Andalucía, están Galicia, Extremadura, Castilla y León, Aragón, el País Vasco, Cataluña, Canarias, Baleares y Ceuta. La líder es la Asociación Gallega de Actividades Náuticas-AGAN+, que desde 2016 desarrolla el concepto de cruceros costeros gracias a varios proyectos europeos de cooperación transfronteriza. En total, son 16 las entidades socias (públicas y privadas), y el proyecto va a suponer un gran cambio en la oferta de turismo cultural con base náutica de España.

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