Los hijos de Natalia piden ayuda económica para poder viajar a Marbella y darle “una sepultura digna”

"Dar una sepultura digna" es el mayor deseo de los dos hijos de Natalia M., la mujer de 46 años y nacionalidad colombiana que fue mutilada y arrojada al mar en Marbella. Pero, ellos se encuentran en su tierra natal y no cuentan con el dinero necesario para comprar los billetes. Por ello, hacen un llamamiento a la solidaridad.

Son momentos duros para los allegados de la última víctima de violencia de género en España. Al otro lado del charco y sin los recursos económicos suficientes para darle el último adiós a Natalia. Pese a que comenzaron a recaudar dinero con la ayuda de familiares y conocidos, no es suficiente, así que han puesto a disposición un número de Nesqui (+57 3016237738) y una recaudación de fondos a través de la web VakiImpact para que todo aquel que quiera colaborar y suma pueda hacerlo.

Aunque la idea inicial de la familia de la víctima era repatriar su cuerpo, esta opción supone un coste mayor. “Ojalá lo consiguiésemos, pero lo vemos muy lejano porque sale incluso más caro que el viaje de ida y vuelta de sus hijos”, explica a este periódico Karen Etayo, una de las sobrinas de Natalia.

El hospedaje una vez que los hijos de la víctima aterricen a España también es una cuestión que les preocupa. “Si el dueño de un hotel o de apartamentos puede prestarle una habitación a mis primos durante los días que estén allí realizando los trámites judiciales y tratando de darle un entierro digno, estaríamos muy agradecidos”, manifiesta la sobrina.

A través de Facebook, la mujer del hijo mayor de Natalia, Víctor, también ha publicado un mensaje pidiendo ayuda, ya sea compartiendo su publicación en redes sociales, el link a la aplicación donde se pueden hacer las transferencias o donando directamente aquellos que deseen contribuir. "Necesitamos la ayuda de todos ya que de granito en granito se consiguen las cosas, mis mayores agradecimientos con ustedes y que pues haya justicia para Natalia", finaliza el post de la nuera de la mujer decapitada.

Justicia y “que ninguna mujer que sufra violencia machista se quede callada” es el mensaje que desea lanzar también Etayo. “Aunque tengan miedo, que lo hablen con familiares o con personas que les generer cofianza. Nadie está solo en este mundo”, manifiesta.

La investigación se inició por parte de la Guardia Civil y, al avisar los familiares de Natalia a la Policía tras creer reconocerla en los vídeos publicados, la Policía Nacional estableció un dispositivo tendente a localizar a la expareja de la víctima, que fue detenido por quebrantar una orden de alejamiento interpuesta tras su detención en diciembre por malos tratos.

El detenido confesó el crimen y ya se encuentra en prisión. Además, también se detuvo a un amigo de éste, por su presunta participación en los hechos. El día del crimen, supuestamente trasladó en una furgoneta a la víctima, aún con vida, y a la expareja de esta a un enclave de la playa donde tendría lugar el crimen. En este caso, ha quedado en libertad con cargos.