Marbella pide autorización al Gobierno para acometer obras en el túnel de Puerto Banús
La actuación de mejora contará con una inversión superior a los 350.000 euros
Marbella recibe 200 propuestas previas para el nuevo Plan de Ordenación Urbana en la segunda fase de participación
El Ayuntamiento de Marbella ha solicitado al Gobierno central la autorización para acometer obras de mejora y reforma en el túnel subterráneo que conecta Nueva Andalucía y Puerto Banús, localizado en la calle Juan Belmonte y bajo la Autovía del Mediterráneo A-7, una actuación que contará con una inversión de más de 350.000 euros y que tiene como objetivo solucionar “uno de los puntos negros de la ciudad cuando se producen lluvias”, según ha informado este viernes la alcaldesa, Ángeles Muñoz.
Así lo ha destacado la regidora en una visita que ha realizado a la zona, donde ha estado acompañada por el concejal de Obras, Diego López, la edil de Nueva Andalucía, Vanesa Ortiz de Zarate, y el gerente de Hidralia, Fulgencio Díaz, señalando que el Ayuntamiento pidió en agosto el permiso a la Dirección General de Carreteras.
Muñoz ha explicado que el proyecto, al que se destinará una inversión de más de 350.000 euros, “permitirá mejorar una de las zonas que más se ven afectadas cuando se producen precipitaciones importantes y que nos obligan a cortar este vial”.
“Este túnel es un acceso subterráneo de la A7 en donde no tenemos competencias y por este motivo pedimos en agosto al organismo dependiente del Ministerio de Transporte y Movilidad la autorización para intervenir”, ha apuntado Muñoz.
La alcaldesa ha señalado que Carreteras “nos solicitó realizar unas mediciones que hemos llevado a cabo en septiembre y que ya se han remitido, quedando a la espera del permiso para que podamos actuar cuanto antes y que las obras estén listas previamente a la temporada alta”.
Características del proyecto
Muñoz ha destacado que el objetivo del proyecto es evitar en la zona tener “una diferencia de cota que haga que, al estar más bajo el viario del propio cauce del rio, en el momento en el que llueve no chupa suficiente y se forma una balsa, lo que hace que cortemos el acceso a Puerto Banús”.
Según ha apuntado la primera edil, “la idea es subir casi medio metro de cota” del paso subterráneo, así como hacer “por abajo un drenaje para que pueda ir el agua hacia el río”.
Asimismo, ha agregado que las obras de reforma del túnel subterráneo van a suponer una mejora de la movilidad en el entorno, ya que “se ampliará medio metro la cota”, se anulará “uno de los acerados y recreciendo el otro hasta 1,5 metros de anchura”. A ello ha sumado que se realizarán trabajos de iluminación y embellecimiento.
“El Ayuntamiento sabe desde hace muchos años dónde están esos puntos y cuál debe de ser la actuación”, ha recalcado la primera edil, quien ha apuntado a la necesidad de acometer los trabajos “antes de que volvamos a tener una inundación de este túnel y podamos tener solucionado el problema”.
Además, la regidora ha subrayado el esfuerzo inversor municipal en los últimos ejercicios para intervenir de manera planificada en la red de saneamiento de la ciudad. “Desde el Ayuntamiento llevamos año actuando en la mejora de puntos conflictivos, con inversiones destacadas en zonas como Señora de Gracia, Virgen del Pilar, Fuentenueva o en Los Catalanes”, ha indicado la alcaldesa, quien ha recordado que desde hace 10 ejercicios “destinamos cada año un total de 800.000 euros al plan de alcantarillado”.
Además, en la pasada legislatura se invirtieron 12 millones de euros para este tipo de proyectos y otros 10 millones en obras, en colaboración con Hidralia y Acosol, en comunidades de propietarios como el Rosario, Costabella o Hacienda Las Chapas. A esto se suma la obra de encauzamiento que se está acometiendo en el arroyo Benabolá, con 3 millones de euros, para evitar las inundaciones de viviendas cuando llueve y crear un gran parque fluvial.
También te puede interesar
Lo último
Visto y Oído
Voces
Salud sin fronteras
La IA y la humanización
Ignacio del Valle
Hiperchiringuito
La esquina
José Aguilar
Un fiscal bajo sospecha