El turismo nacional copa las estancias en los campings de la Costa del Sol en verano

Los campings de la Costa del Sol han hecho su particular agosto y han cerrado la temporada alta con uno datos de ocupación que superan el 75% este verano, representando el turismo nacional más del 70% de las estancias reservadas, según han destacado varias fuentes consultadas.

Según los últimos datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE) relativos a julio, a la provincia de Málaga han llegado 80.000 turistas españoles menos este verano, registrándose una caída del mercado nacional en todos los alojamientos turísticos menos en los campings, con un 69% de nacionales los dos primeros meses de este verano.

La directora del ‘Camping Cabopino’, localizado en Marbella, Tíscar Sánchez, ha señalado que el verano “ha sido bueno y la ocupación ha estado bastante alta”, con una tasa “del 80% en julio y alrededor del 95% en agosto”. El mercado nacional ha copado las estancias, con una representación del 70% frente al internacional, con “algunos franceses y portugueses”. La previsión para septiembre es alcanzar un 70% y se espera una mayor afluencia de público extranjero a partir de octubre.

La comparación con el pasado año apunta a “un descenso del 10% en julio y del 5% en agosto” respecto a las parcelas, mientras que en los bungalós “ha estado igual”, una tendencia que la empresaria ha achacado a que “va a empezar a verse la crisis y, se avecina más cerca de lo que creemos, porque la gente ha gastado los ahorros que tenía. Han sido unos años un poco excesivos y ahora se va a controlar un poco”.

En su opinión, el turismo nacional se ha mantenido en los campings frente a otras alternativas alojativas en los que ha caído, como los hoteles, porque tienen “precios más competitivos” y se ha mantenido una “subida más suave”. Así, ha apuntado que en el establecimiento han destacado turistas procedentes de “Andalucía principalmente, Madrid o Levante”, con un perfil familiar.

La estancia media ha sido de “alrededor de 6 noches en los bungalós y de 10 en las parcelas”, en las que Sánchez ha asegurado que “las tiendas de campaña están casi desapareciendo” y predominan los viajes en caravana o autocaravana, que son los más demandados por los visitantes españoles, ha referido.

La inflación ha afectado a las economías familiares y a las empresas, con una subida de los suministros como la luz o el agua, lo que ha repercutido también en un incremento de las tarifas de entre “el 3% y el 5%”, ha señalado la directora del ‘Camping Cabopino’.

Por otro lado, la empresaria ha hecho alusión a la “competencia desleal” que generan los “asentamientos de caravanas y furgonetas en parkings o en lugares públicos”, lo que “hace mucho daño” al sector, principalmente para mantener la actividad durante el invierno.

Por su parte, la directora del ‘Camping Parque tropical’ de Estepona, Laura Grigelmo, ha señalado que en junio y julio se ha registrado “un 80% de ocupación en parcelas” y en bungalós un 85%”, mientras que en agosto “se ha notado un poco más de pernoctas llegando a estar al 95% y completas los fines de semana del 1 al 25”.

De este modo, ha apuntado que el alojamiento ha experimentado “un 5% menos” respecto al año pasado en junio y julio y “ha subido un 10%” en agosto.

En cuando al perfil de los turistas, son “clientes familiares con niños, parejas y amigos”, representando el mercado nacional un 95% de las estancias -principalmente de Andalucía-, y el internacional “el otro 5% con portugueses, franceses y británicos”. La estancia media ha sido “de 2 a 7 días” y estos visitantes españoles buscan “la combinación perfecta entre comodidad y naturaleza”.

Tarifas “más asequibles”

Según ha valorado, el mercado nacional se ha mantenido en los campings porque ofrecen unos precios “más asequibles” que otras alternativas, tras verse afectadas las economías familiares por la inflación. Al mismo tiempo, ha indicado que “si bien la facturación ha mejorado en algunos casos, el aumento en los costes de energía, mantenimiento o los salarios ha ejercido presión sobre los márgenes de beneficio”. 

Además, ha apuntado que muchos “hemos implementado estrategias de precios flexibles”. “Estas tarifas promocionales hacen que los campings sigan siendo una opción accesible y atractiva”, ha añadido.

Grigelmo ha señalado que “el turismo nacional en los campings no ha caído ya que los clientes van buscando experiencias nuevas, en las que ofrecemos estar en plena naturaleza, algo que muchos turistas han valorado más en los últimos tiempos, especialmente tras la pandemia”.

El director del ‘Camping Torremolinos’, Ángel Gancedo, ha comentado que “la ocupación en junio ha sido del 60%, en julio del 75% en y agosto las tres primeras semanas del 80%” ya que tras acabar la Feria de Málaga “baja un poquito”. En comparación con el verano de 2023, “ha aumentado un 5%”. 

El turismo nacional ha copado las estancias del camping, representando esta temporada alta un 80% y extranjeros “sobre todo los que vienen en la época estival son franceses, alemanes y holandeses”. La demanda de los españoles gira en torno a “un 50% bungalós y alojamientos y el resto parcelas para para autocaravanas y tiendas de campaña los fines de semana”, procedentes de provincias cercanas como Cádiz, Córdoba, Sevilla, Jaén o Granada.

En su opinión, este comportamiento del mercado nacional se debe a que “el cliente de camping es muy fiel a su a su modo de vida y de pasar las vacaciones en verano”, con turistas que “llevan viniendo 15 o 20 años” en verano, por lo que ha incidido en que los afectos de la inflación se han notado más en la estancia y “en vez de estar una semana pasan 4 o 5 días”.

El empresario ha detallado que en el camping “hemos tenido que subir los precios porque todos los proveedores también suben los suyos”, aunque ha matizado que el incremento ha sido “mínimo”. Asimismo, ha apuntado que “la facturación habrá subido este año alrededor de un 3% o un 4%”, derivada de que “el invierno se ha alargado” con los clientes extranjeros.

La previsión para el invierno es “el lleno absoluto” por la llegada del turismo extranjero y la ocupación de “trabajadores y víctimas de la nueva realidad social del alquiler”, que piden estancias de 6 u 8 meses siendo “la máxima por ley de 11”. Gancedo ha criticado la “competencia” de los pisos turísticos, así como la de los aparcamientos de caravanas y la “desidia de las administraciones”.

Malagueños del interior eligen el 'glamping' para veranear

Malagueños del interior han optado este verano por el glamping para veranear en la Costa del Sol, un nuevo concepto alojativo que se ha instalado esta temporada en Fuengirola y por el que se ha decantado “entre un 20% y un 25%” de público local para pasar el fin de semana en familia, así como clientes nacionales, según ha destacado la directora del ‘Glamping Costa del Sol’, Alicia Peromingo.

El centro abrió sus puertas el pasado 9 de julio, en plena temporada alta, con una oferta comercial dirigida al turista nacional debido a la premura de la puesta en funcionamiento con el 80% de las instalaciones.

El glamping ha registrado en julio una ocupación del 57% y en agosto del 80% con un turismo familiar, colgando el cartel de completo las 2 semanas centrales del pasado mes, por lo que Peromingo ha remarcado que “se han superado las expectativas el primer año”, que era “llegar al 50%”.

Durante el verano, la estancia media ha sido de 3,5 noches en julio y de 4,7 en agosto, siendo el alojamiento más demandado la “hanna”, una cabaña de madera a modo de “tienda de campaña gigante”, ha referido la directora del nuevo glamping.

El mercado nacional ha representado el 80% de las estancias, con un público procedente principalmente “del centro de Madrid, Toledo, Ciudad Real o Aragón”, así como destaca la presencia de entre un 20 y un 25% de “malagueños de municipios del interior” como Cártama, la Axarquía o la Serranía de Ronda con “escapadas de fin de semana que buscan acercarse a la costa en familia”. De turismo extranjero "ha habido un poco de todo" como franceses o belgas, aunque se espera una mayor afluencia a partir de septiembre, ha apuntillado.

En este sentido, ha subrayado que “sorprendentemente ha habido mucho cliente malagueño, lo que nos ha sorprendido positivamente”, por lo que aspira a que el glamping se convierta en un “sitio de referencia a nivel local”.

Peromingo ha explicado que esta tendencia se debe a varios factores, como es que el glamping cuenta con una “oferta más económica” y que la comercialización ha estado dirigida al cliente nacional, que “reserva más a última hora”, debido a la apertura en plena temporada. Mientras, para los próximos meses se prevé un cambio en el perfil con la llegada de turistas extranjeros y una previsión de ocupación de “alrededor del 40%”.

“Es un producto nuevo en la Costa del Sol que solo cuenta con bungalós y servicios más asemejados a un hotel de 4 estrellas”, ha señalado en torno al concepto de glamping, por lo que el cliente llega a un espacio “equipado completamente y sin necesidad de que traiga nada”. “Llegas con la maleta a un alojamiento completamente equipado” que cuenta con “servicios de limpieza que se pueden contratar, restauración todo el día, gimnasio, Spa, área de masajes, 2 piscinas y animación”, ha resaltado.