Una historia de 'Aviones' con vértigo

Hoy se estrena en los cines de toda España la nueva película de Disney, Aviones, ambientada en el mundo de Cars aunque en esta ocasión la trama se desarrolle a unos cuantos metros del suelo. El realismo que promete la propuesta, nueva cinta para todos los públicos que se suma a la cartelera veraniega, hará que el espectador sensible con las alturas pueda llegar a empatizar y sentir cierto vértigo.

Pero no se apure, pues la historia de Dusty, el avión protagonista, es un relato de superación. Un humilde avión fumigador que para empeñar su trabajo no vuela por encima de los 300 metros, pero que tampoco excede ese límite ya que tiene vértigo.

Desde su cómoda y aburrida altura durante la rutinaria jornada laboral, Dusty ve pasar veloces a algunos aviones de competición, que le hacen sentir inferior, frágil, y recordarle que nunca podrá desempeñar otra función más que para la que fue fabricado.

Los creadores de esta historia son todo unos veteranos en el mundo de la animación. Klay Hall (Los Simpson, El rey de la colina) es el director, Taci Blathazor (Peter Pan: regreso a nunca jamás, Bambi II, La sirenita) es la productora, junto al productor ejecutivo John Lasseter (Porco Rosso, Ponyo, Monters University), fundador de Pixar.

Lasseter preguntó a Hall si le gustaría realizar una película de aviones, y éste, que adoraba el mundo de la aviación desde pequeño por influencia familiar, aceptó sin pensar. Idearon la historia entre los dos y llamaron al guionista Jeffrey M. Howard para cerrar el círculo.

Este equipo de profesionales se puso manos a la obra con un lema, el de "conseguir la máxima autenticidad". Para ello realizaron un exhaustivo proceso de documentación basado en experiencias reales con aviones y máquinas voladoras de todo tipo, para plasmar las sensaciones posteriormente de manera fiel. En el mundo de Cars la animación y la creación del espacio tridimensional resultó más sencilla. Para crear el espacio aéreo han contado con un experto en la materia, Jason McKinley, que está especializado en diseñar efectos de vuelo para el cine y la televisión.

McKinley afirma: "En cada escena de vuelo hay un cielo enorme para que los personajes pudieran alcanzarán velocidades de 400-600 kilómetros por hora".

El veterano director Klay Hall observa: "Sabíamos que si lo reproducíamos bien, el público que sufre miedo a las alturas se identificaría mucho más intensamente con el personaje". El protagonista de Aviones, Dusty, no está construido para volar alto, pero a medida que avanza la historia, este avión fumigador aprenderá a confiar en sí mismo y a superar, no sin dificultad, sus miedos en una carrera alrededor del mundo.

También se estrena hoy Exorcismo en Georgia, una historia de terror basada en hechos reales dirigida por Tom Elkins y protagonizada por Abigail Spencer y Chad Michael Murray, en la piel de una familia que se muda a una mansión supuestamente vacía.