Cariño, he perdido a los niños

Thriller, Argentina-España, 2013, 88 min. Dirección: Patxi Amezcua. Música: Roque Baños. Intérpretes: Ricardo Darín, Belén Rueda, Luis Ziembrowski, Osvaldo Santoro, Guillermo Arengo. Cines: Vialia, Rosaleda, Plaza Mayor, La Verónica, Miramar, La Cañada, Gran Marbella, Plaza del Mar, Rincón, El Ingenio.

Thriller en el alambre pero con mucha red de seguridad, Séptimo se la juega al suspense artificial y a las estrategias del viejo whodunit (quién lo hizo) como argumentos principales para enganchar al espectador ante su trama de niños desaparecidos ante las narices de su padre, un abogado bonaerense al que Ricardo Darín vuelve a insuflar las habituales prestaciones de decisión y credibilidad en situaciones límite.

El filme de Patxi Amezcua concentra su pesquisa de búsqueda y chantaje anunciados en el inmueble del suceso, pero pronto sucumbe a la necesidad de salir al exterior para dinamizar y airear lo que, en otras circunstancias, tal vez con una mejor labor de guionista, podría haberse resuelto de puertas para dentro.

Y justamente ahí, en el meollo de la cuestión, que no es otro que el de la separación como metáfora (sic), es cuando la película hace más aguas, con una Belén Rueda muy desdibujada, literalmente ensombrecida por la energía convincente y juguetona de un Darín que se las sabe todas, hasta nadar a contracorriente.