La Casa Natal de Picasso expone cien obras más del artista tras su renovación

La última vez que se cambió el discurso museológico fue hace una década

Llegan al Museo Picasso Málaga las dos obras del pintor malagueño prestadas por el Thyssen

Una de las salas de la renovada Casa Natal de Picasso. / Javier Albiñana
Agencias

04 de octubre 2022 - 18:12

La Casa Natal de Pablo Picasso en Málaga expone desde este martes un centenar de obras del artista diferentes de las que exhibía hasta ahora al haber renovado su museografía, con lo que ahora se pueden contemplar en este enclave 205 objetos originales sumando los de este autor y otros creadores.

Entre lo que se incorpora figuran los dibujos originales del cuaderno número 7 de bocetos para Las señoritas de Avinón, único existente en España de los dieciséis que dedicó el artista a estudios preparatorios de esta conocida obra.

De esta forma, actualmente hay casi medio millar de obras pertenecientes a los fondos de Picasso de la Casa Natal que se pueden visitar en Málaga, ya que a las del lugar donde nació el artista se unen las 350 que hay en el Museo Ruso malagueño.

Se trata de un nuevo discurso museológico -la última vez que se cambió fue hace una década-, según ha explicado el director de la Agencia Pública de la Casa Natal de Picasso y otros equipamientos museísticos y culturales, José María Luna.

Ha precisado que el público pedía poder ver más obras de Picasso y conocer más sobre la propia casa natal, con lo que han hecho un esfuerzo por explicar cómo vivía en ella y cómo la plaza donde se ubica la vivienda y el mediterráneo influyeron en la vida y obra de Picasso.

Obras pertenecientes a la familia Picasso. / Javier Albiñana

La nueva museografía, que subraya la importancia de Málaga en la raíz de la personalidad y la obra de Picasso y busca mejorar el recorrido del visitante, se considera la intervención más importante desde la reinauguración del inmueble en 1998.

Son nueve salas dedicadas a la formación artística de Picasso bajo la orientación de su padre, el universo picassiano a través de la modelo y el desnudo femenino, el entorno familiar y vital de los años del artista en Málaga, las palomas -que se convirtieron en símbolo de la paz-, el mediterráneo en este creador y la fiesta de los toros.

Además, en la última estancia se puede apreciar una réplica de la tradicional capa españolacon la que está enterrado el artista.

El alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, ha destacado que la Casa Natal es lo más significativo de la relación de Málaga con Picasso y ha resaltado la importancia de que se consiga que el edificio sea más atractivo y tenga más visitas.

Sala dedicada al toro con la réplica de la capa con la que fue enterrado. / Javier Albiñana

La concejala de Cultura, Noelia Losada, se ha referido a la rehabilitación del Aula Picasso, ubicada en la última planta del Ateneo, donde impartía clases el padre de Picasso, José Ruiz Blasco, profesor de dibujo.

Asimismo, se ha evocado el ambiente de la casa natal apoyado en mobiliario, ajuar doméstico y obras de la colección familiar del artista.

El nuevo recorrido sala a sala

El recorrido comienza en la sala 1 de la planta baja que, con el título Pablo, crecer en el taller, recuerda la formación artística de Picasso desde niño bajo la orientación de su padre, José Ruiz Blasco, profesor de dibujo en la Escuela de Bellas Artes de Málaga, y en contacto con los pintores de su círculo cercano.

Se muestran obras originales de Denis Belgrano, Emilio Ocón y Joaquín Martínez de la Vega, como piezas de escayola y fotografías procedentes de la Escuela, grabados de Picasso que guardan relación con las mismas y un retrato al óleo de José Ruiz, firmado por José Ponce Puente.

Las salas 2 y 3 son "una inmersión en el universo picassiano" a través de la relación con la modelo y el desnudo femenino. Para ilustrarlo, se exponen dibujos originales pertenecientes al cuaderno número 7 de bocetos para Las señoritas de Aviñón.

Por su parte, las intervenciones que se han realizado en el vestíbulo buscan atraer la atención por el contraste de color entre el interior y la fachada. En esta zona hay diversos textos y fotografías, entre las que destacan las firmadas por Juan Gyenes.

Las palomas, otro de los iconos recurrentes del malagueño. / Javier Albiñana

Las primeras salas de la primera planta "evocan el entorno familiar y vital de los años de Picasso en Málaga". En la sala cuatro pueden contemplarse sus fotografías de niño y las de sus padres, algunos objetos familiares, una sucinta genealogía y los retratos que Picasso les hizo en un cuaderno facsímil de dibujos de 1895.

La sala cinco, con balcones a la Plaza de la Merced, correspondería al salón principal de la casa. Adornan sus paredes una colección de óleos que en su mayor parte pertenecieron originalmente a la familia de Picasso, incluyendo algunos dedicados a su padre. La estancia, amueblada con piezas del siglo XIX, acoge además el busto de una virgen Dolorosa.

Al acceder a la sala seis, el visitante encuentra la reproducción a gran escala de una firma autógrafa del artista, Picasso de Málaga, que reafirma su identidad de origen y da nombre al espacio. Mediante una cronología ilustrada, se explican las diversas estancias en esta ciudad, desde su nacimiento hasta sus últimos días en 1901.

Cerámicas de la colección de la Fundación Casa Natal. / Javier Albiñana

En una vitrina se muestra un facsímil de su acta de bautismo y se conservan prendas y otros objetos personales de su infancia, como una camisa de bebé, su fajín umbilical o uno de los zapatos con los que aprendió a andar.

En la sala siete se muestran óleos de José Ruiz Blasco y grabados de Picasso sobre la paloma de la paz, así como fragmentos de películas documentales en las que se ve al artista asistir a los congresos pacifistas.

La sala ocho, dedicada al Mediterráneo en Picasso, arranca con la reproducción de un pequeño óleo, realizado en Málaga entre 1888 y 1890. Picasso contó a su hija Maya que hizo esta obra a escondidas, con pintura cogida de la paleta de su padre.

Otro de los elementos que Picasso debe a su padre es la afición a la fiesta de los toros. Por eso, en la sala novena se exponen cerámicas y grabados con tema taurino, siendo especialmente destacable la serie El toro, un hito en la producción litográfica de Picasso "en la que asistimos a la depuración absoluta de la figura del animal".

Cuando el 8 de abril de 1973 falleció el pintor, Eugenio Arias, amigo del malagueño, acicaló su cuerpo y lo arropó en una capa española. En la última estancia del Museo, el visitante puede apreciar una réplica exacta de esta prenda con la que Picasso fue enterrado. La despedida del recorrido llega con un retrato del malagueño firmado por Juan Gyenes y dos citas de Rafael Alberti y Mercedes Guillén.

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