Una muestra en el Centro Cultural Fundación Unicaja descubre al Picasso poeta y su imaginario andaluz

El Palacio Episcopal acoge en su planta baja y hasta el 10 de diciembre 'Picasso. El Gabinete de las palabras y las cosas'

Goya y Picasso frente al toro: dos visiones de la tauromaquia

El Museo Picasso Málaga inaugura 'El eco de Picasso' o cómo sigue vivo en el ADN del arte contemporáneo

Recortes de prensa sobre la muestra 'Picasso clásico' y uno de los libros ilustrados. / Javier Albiñana

En medio de una crisis creativa, cuando ya había cumplido 50 años y se encontraba en plena madurez artística y personal, Picasso también fue poeta. Y sus escritos, los primeros de ellos en español, son la prueba de que sus raíces, el recuerdo de su cultura, de su tierra natal, no lo habían abandonado a pesar de las décadas y los kilómetros de distancia. En este Año Picasso lleno de acercamientos a su obra desde multitud de ángulos diferentes, el Centro Cultural Fundación Unicaja ha querido centrar su mirada en la palabra y, frente a ella, ha reunido una heterogénea y curiosa selección de objetos del siglo XIX y XX, principalmente, que aproximan al visitante a ese imaginario al que el pintor también puso palabras.

La muestra Picasso. El Gabinete de las palabras y las cosas, que se podrá ver hasta el 10 de diciembre en la planta baja del Palacio Episcopal, reúne pintura, cerámica, grabados, objetos etnológicos, fotografías de época, libros y abundante documentación impresa y audiovisual vinculadas con el artista malagueño y que evidencian que el recuerdo y el sentimiento de Málaga y Andalucía siempre estuvieron presentes en su memoria.

La exposición, que exhibe unas 244 piezas, se nutre de fondos de la colección de arte de la Fundación Unicaja y se completa con préstamos del Museo Casa Natal, Museo Picasso Málaga, la Filmoteca Nacional, RTVA y diversos prestadores particulares. Y se estructura en tres secciones.

Algunos de los objetos reunidos en el 'Gabinete de las palabras y las cosas'. / Javier Albiñana

Una de ellas es Alquimia del verbo, en la que se pueden ver dos libros ilustrados cedidos por el Museo Casa Natal y dos vitrinas en las que se recuerdan las dos primeras exposiciones que trajeron de nuevo a Picasso hasta Málaga en los años 90. En la sala Picasso Clásico. La Suite Vollard se muestra la edición impresa de este conjunto de 100 grabados producidos por el artista entre 1930 y 1937, además de una rica muestra de la colección bibliográfica de Rafael Inglada. La tercera sección es la dedicada al Gabinete de las palabras y las cosas.

"No es nada fácil tratar de rendir tributo a un artista tan completo y polifacético como Picasso. A lo largo de este año hemos ido abordando distintas facetas de su ingente e inabarcable actividad creativa y ahora le toca el turno a la literatura y muy especialmente a la poesía", comenta José Manuel Domínguez, presidente de la Fundación Bancaria Unicaja.

"Esta exposición abre una perspectiva novedosa, propone un diálogo abierto entre la palabra poética de Picasso y una original selección de más de 200 objetos y creaciones artísticas, todos enlazados por el concepto de gabinete de curiosidades", destaca Domínguez y añade que "en su mayoría las piezas seleccionadas están vinculadas a la vida y la sociedad histórica de Málaga".

Barros malagueños del siglo XIX que forman parte de la muestra. / Javier Albiñana

José Lebrero, el director artístico del Museo Picasso Málaga, es el comisario de la muestra. "Partíamos de una pregunta, que era un convencimiento: ¿Tuvo importancia Málaga y por ende Andalucía y España para aquel joven que estuvo por última vez en esta tierra en 1901? La certeza era que sí, pero para poder comprobarlo hemos acudido a los escritos de Picasso, traducidos en su totalidad", relata Lebrero. Y subraya el experto que "los poemas de Picasso son una fuente fértil y fascinante, no solo por su originalidad y su arrojo literario, sino que también son las pruebas más irrefutables de que lejos y ausente de su ciudad el Picasso pintor llevó consigo la memoria de sus orígenes culturales".

Así que, con estos textos sobre la mesa, los responsables de la muestra elaboraron un glosario de palabras "que incluyen términos que remiten a nuestro contexto cultural, social, a lo que conocemos que era esta ciudad y de España en esa época", indica José Lebrero. Se han reunido obras de arte y también fotografías y objetos de uso doméstico. "Hemos hecho un ejercicio de arqueología con las colecciones de Fundación Unicaja", agrega el comisario.

Una exposición que aborda a Picasso desde una óptica única

Rafael Valentín López, responsable de Artes Plásticas de la Fundación Unicaja, considera que "estamos ante una exposición que creemos única, en la que se aborda a Picasso desde una óptica que creemos que nunca ha sido abordada". Y resalta que "la muestra aúna seriedad, por los conceptos que aborda, pero también pretendemos divertir al espectador".

Grabados de 'La Suite Vollard' expuestos en el Centro Cultural Fundación Unicaja. / Javier Albiñana

"Además de los numerosos préstamos, de la valiosísima documentación hemerográfica y bibliográfica, la muestra se apoya en la integración y el carisma de los objetos y piezas de la propia colección de arte de Fundación Unicaja, una colección con más de 15.000 piezas registradas, desde elementos arqueológicos hispano romanos del siglo IV hasta nuestros días", detalla Valentín López.

El Perchel, la zambomba, la pandereta, los toreros, Pedro Romero, el cante jondo, los borrachuelos, las palomas... Todas estos conceptos se hicieron palabra de su puño y letra y parte de estos versos, de estos textos, llenan las paredes de las salas para que puedan leerse. Pero también se hacen imagen en los objetos y piezas expuestas. "Pretendemos conocer el imaginario iconográfico y mentalde Picasso a través de estos objetos que cuidadosamente hemos seleccionado para hacerlos corresponder con esta realidad metafórica que Picasso manejaba en su cabeza", explica el responsable de Artes Plásticas de la Fundación Unicaja.

Piezas de uno de los libros ilustrados de Picasso. / Javier Albiñana

Además, se exhibe una nutrida colección de barros malagueños del siglo XIX que crean diferentes escenas que corresponden con ese imaginario picassiano. Se trata de figuras del cura, el torero, la bailaora, la maja, el cenachero, el mendigo... esos personajes que Picasso tenía en sus recuerdos de niñez y primera juventud y que dejó que apareciesen en sus escritos.

Igualmente, la muestra incluye algunas obras de artistas coetáneos o que precedieron a Picasso como Rafael Alberti, Joaquín Peinado, Antoni Tàpies, Gutiérrez Solana o el fotógrafo García Alix.

Gemma del Corral, delegada de Cultura de la Junta de Andalucía, destaca que "el malagueño y el visitante que venga de fuera va a encontrar en casi todos los espacios expositivos de la ciudad una muestra dedicada al gran genio y todas desde una perspectiva totalmente diferente. Málaga se ha convertido en la ciudad referente en este 50 aniversario del estudio y la investigación de la figura poliédrica de Picasso, es un lugar dedicado en cuerpo y alma a su malagueño más ilustre".

No hay comentarios

Ver los Comentarios

También te puede interesar

Así canta nuestra tierra en navidad | Crítica

El villancico flamenco

Revista Litoral

Con un jardín basta

Lo último